Eduardo Mondino reclamó se declare la emergencia en el tránsito en todo el país. La Argentina tiene entre 20 y 30 muertos por día en la materia ante el desinterés social por abordar la cuestión.
El nivel de siniestralidad vial de Argentina, que causa entre 20 y 30 muertes por día, fue calificado como una endemia social por el defensor del Pueblo de la Nación, Eduardo Mondino, quien elevó una recomendación a la Jefatura de Gabinete para que se declare la emergencia en la materia.
La Defensoría del Pueblo presentó un informe que, según Mondino, apunta a lograr que "el tema de seguridad vial entre a formar parte de la agenda del Estado. Es un tema que requiere políticas de Estado y también conciencia social. Parece que hay una aceptación social que en Argentina haya entre 20 y 30 muertos por día. Estamos ante una endemia social", aseguró.
De acuerdo a las estadísticas presentadas en el trabajo, el Registro Nacional de Antecedentes del Tránsito, en la Argentina hay más de 4.000 muertes anuales por siniestros viales, cifra que se eleva a 10.000 en las estimaciones de organizaciones no gubernamentales.
Según proyecciones elaboradas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre 2000 y 2020 las muertes causadas por el tránsito aumentarán en promedio un 48 por ciento en países de América Latina y el Caribe.
En cuanto al costo económico, la OMS estima que el gasto resultante de choques y lesiones en el tránsito representa el 1,5 por ciento del producto bruto de los países con ingresos medios, como Argentina.
Las estimaciones fueron tomadas para la realización del informe, en el que colaboraron diversas ONG que se ocupan del tema de la seguridad vial, y se recabó información de 36 organismos oficiales nacionales, provinciales y municipales.
Asunto de salud pública
"Miles de muertes, lesiones, discapacidades y costos en la salud, imponen la necesidad de tratar esta cuestión bajo la perspectiva de la salud pública", se señala en el trabajo el defensor del pueblo.
La Defensoría recomienda trabajar fuertemente en el área de la prevención de la producción de siniestros viales y en la disminución de su gravedad.
Uno de los problemas, destacó, es la "dispersión normativa, jurisdiccional y orgánica existente en la materia, lo que impone que se haga un esfuerzo significativo para lograr unicidad, coordinación, cooperación de los organismos responsables".
Mondino también reclama a la Jefatura de Gabinete la sistematización de la información nacional de registros y una política nacional para combatir la inseguridad vial que hasta el momento "no ha sido una cuestión relevante para la agenda del Estado", resalta en el informe.
Solicita un incremento de la educación vial en todos los niveles de instrucción y se acusa que hasta el momento esa educación se brinda de modo marginal.
Una de esas falencias en materia de educación, y también de control, fue enfocada por Mondino en el caso de los cinturones de seguridad y la campaña que en su momento se realizó en la ciudad de Buenos Aires.
"Hoy cualquiera puede ver que se ha relativizado nuevamente el uso del cinturón donde hubo prácticamente una caza de los automovilistas que no lo tuvieran el cinturón, y después desapareció el tema. Tiene que haber una cuestión constante", señaló el Ombudsman nacional.
Las recomendaciones del trabajo alcanzan también a las empresas concesionarias de corredores viales y ferroviarias y a los entes nacionales, provinciales y municipales, que "deben asumir su responsabilidad en materia de infraestructura vial", señala el texto.
El Estado no asume el problema
-Del informe se desprende una alta responsabilidad del Estado en materia de seguridad vial. ¿Se trata de un problema de voluntad política?, se le preguntó al doctor Mondino.
-Hay normas que son de conducta social, y hay cuestiones que tiene que fijar el Estado. El Estado no puede ser espasmódico: de golpe durante un mes sale a cazar a los que no tienen cinturón de seguridad, como ocurrió en Capital Federal y ahí van los medios, los agentes de tránsito, los funcionarios y treinta días después todo se acaba y ya nadie se acuerda del asunto. Quiero ser claro: un particular puede decidir ponerse hoy el cinturón y mañana no, o andar a una velocidad moderada un día, y al siguiente subirla, pero el Estado no puede decir "hoy controlo, mañana no", tiene que estar ahí todos los días.
Impunidad y anarquía
El diputado Danilo Kilibarda (PJ) ingresó en la reanudación del período legislativo un proyecto de ley para suspender la vigencia de la norma provincial 11.583 por la cual Santa Fe adhirió a la ley nacional de tránsito. La iniciativa apunta a mantener la suspensión "hasta tanto la provincia y las municipalidades y comunas estén dispuestas a hacerla cumplir".
El legislador santafesino define a la ley de tránsito como "rica en contenido y precisa en sus definiciones" pero agrega que "como toda ley, está compuesta de normas obligatorias cuyo incumplimiento acarrea una sanción".
Después detalla una serie de normas reglamentarias dictadas por la provincia para adherir a la ley de tránsito para demostrar que "contamos con un verdadero arsenal legislativo para regular el tránsito vehicular en los caminos de la provincia. El Estado provincial, las municipalidades y las comunas están dotadas de normas jurídicas suficientes para asegurar un tránsito sin riesgos y evitar que los accidentes sean una de las principales causas de muerte y de incapacitación sicofísica. Sin embargo, parece que nadie está dispuesto a aplicar esas normas". Enseguida agrega que "vivimos en un Estado anómico, casi comprometido con el incumplimiento constante de las normas. Si el Estado se desentiende de su principal función que es brindar seguridad a través del ordenamiento jurídico, caemos en la impunidad, en la anarquía, en la negación misma de la autoridad legítima".
Por último, llama a mirar lo que ocurre a nuestro alrededor para probar que "la inmensa mayoría de los conductores no cumple con las obligaciones mínimas impuestas por las normas reguladoras" y se pregunta si no será más honesto suspender la vigencia de la norma hasta tanto el Estado esté dispuesto a hacerla cumplir.
En la provincia
Según información recogida en fuentes policiales, durante 2005 hubo 93.364 siniestros en el territorio santafesino. De ellos hubo 13.536 con intervención policial, en 16.200 hubo lesionados y en 465 personas fallecidas. En cuanto al departamento La Capital, el total accidentes de tránsito sumó 9.644 y en 67 de ellos hubo muertos.
