De la Redacción de El Litoral
La Facultad Regional Santa Fe de la Universidad Tecnológica Nacional (FRSF) obtuvo el máximo reconocimiento a la que cualquier unidad académica del sistema universitario nacional puede aspirar: la acreditación "de su nivel educativo" por 6 años, dictamen emitido por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneau) de la carrera Ingeniería Industrial.
Este logro institucional se suma a las tres primeras acreditaciones obtenidas de las ingenierías Mecánica, Civil y Eléctrica. De esta manera, cuatro de las cinco ingenierías han pasado satisfactoriamente el proceso de evaluación obligatorio.>
"Esto es consecuencia de los trabajos puntuales que viene desarrollando la FRSF. Pero también forma parte de un contexto más general, vinculado al proyecto institucional que estamos impulsando vinculado al fuerte énfasis en la calidad educativa de nuestra Facultad. Esto tiene su tiempo y se evidencia hoy en la cantidad de laboratorios acreditados en organismos nacionales así como las ingenierías, por parte de la Coneau", explicó el decano de la FRSF, Ing. Ricardo Scholtus.>
"La Coneau es la agencia que evalúa con qué calidad se brinda el servicio educativo en las universidades argentinas. Lo que acreditan es la calidad de la enseñanza tomando en consideración aspectos relacionados con los graduados, alumnos, docentes, laboratorios, organización, procedimientos, planificación y vinculación con el medio, entre otros aspectos, a partir de estándares prefijados", aclaró el Ing. Eduardo Donnet, director del Departamento Industrial.>
La FRSF pasó una primera instancia de evaluación para tres de las cinco ingenierías. En esta segunda etapa el proceso estuvo destinado a la acreditación de la Ingeniería Industrial: "El logro es haber aprendido del proceso previo; estamos orgullosos de haber acreditado con el máximo tiempo que otorga la Coneau, que son 6 años", agregó Donnet.>
El Ing. Arnoldo Reutemann, vicedecano de la casa, indicó que la Coneau examina las características de funcionamiento de cada carrera: "Calidad de los profesores, estado de sus bibliotecas, laboratorios, cantidad de alumnos, de egresados, el tiempo que demoran los alumnos entre su ingreso y su egreso, dónde trabajan y si hay demanda de sus egresados, entre otras cuestiones de tipo general. En cuanto a lo particular, evalúan el funcionamiento de la carrera, las actividades de extensión, investigaciones hechas o en marcha, proyectos implementados y su vinculación con la carrera, con una mirada integral de las propuestas académicas".
"Es un proceso de evaluación permanente: ahora hay que demostrar que todo lo que fueron recomendaciones y planes de mejoras se han cumplido", sentenció.>
Scholtus remarcó la importancia que el gobierno nacional le ha dado a las ingenierías en todo el país, a través de los proyectos Promei, cuyo dinero se incorpora al presupuesto de forma anual de la UTN.>
"Venimos afianzando la relación con la Coneau en los últimos tiempos, con quienes reconocemos tener algunas diferencias. Sin embargo, lo que se produce hoy es el resultado de haber defendido más el proyecto institucional de la UTN, que es la que más ingenieros forma en el país. Esto ha sido un aprendizaje para la Coneau, que también no están conociendo y reconociendo logros", expresó el decano.>
>El próximo 30 de mayo estará presente en la FRSF el coordinador de Calidad Universitaria, del Ministerio de Educación de la Nación, Daniel Morán, en el marco de elaboración de los Promei II, para analizar y colaborar en el proceso de elaboración de los proyectos en los que se encuentran actualmente las carreras de ingeniería.
También estará presente el secretario académico de la UTN y demás representantes de universidades de la zona.
Los proyectos Promei otorgan recursos económicos a partir de una Fórmula Polinómica que tiene en cuenta la cantidad de carreras acreditadas, cantidad de alumnos por carrera, docentes y graduados. En función de ello resulta la cantidad de módulos a los que puede acceder cada carrera, que tienen un techo aproximado de 80 mil pesos. La asignación del dinero es anual, aunque son proyectos de tres años de duración.
"Esto mejora, aunque no soluciona la distribución de recursos en las universidades, que hasta hoy sigue destinando más del 90% al pago de salarios, quedando afuera equipamiento e infraestructura, entre otros aspectos. Sin embargo, el Promei establece un 60 % para carga salarial y el resto para inversiones de otro tipo, como por ejemplo, mobiliario y equipamiento, capacitación", precisó el Ing. Donnet.