Tratamiento con sustancia de vino tinto

Un equipo de investigadores de la universidad inglesa de Newcastle-upon-Tyne llevará próximamente a cabo un experimento con una sustancia contenida en el vino tinto y asociada a la longevidad en un grupo de pacientes aquejados de un trastorno genético progresivo y potencialmente fatal.

Los treinta pacientes que participan en el experimento sufren el llamado síndrome Melas (iniciales en inglés de encefalopatía mitocondrial, acidosis láctica y episodios tipo ictus), que afecta a los mitocondrios.

Los aquejados de esa condición normalmente desarrollan primero un tipo de diabetes, pero los efectos de la enfermedad pueden extenderse luego por todo el cuerpo.

"El problema es que no pueden convertir la comida en energía, lo que afecta al cerebro, al corazón y a los músculos de sus miembros", afirma Patrick Chinnery, profesor de neurogenética en esa universidad, citado por el diario The Times.

A quince de los treinta pacientes se les administrará una versión del resveratrol, compuesto que se halla en el vino tinto, llamado SRT501, mientras que el resto recibirá un placebo.

Esa versión más potente ha sido desarrollada por el laboratorio Sirtris Pharmaceuticals, de Cambridge (Massachusetts, EE.UU.), gracias a los trabajos del científico David Sinclair, de Harvard, que descubrió que el gen asociado con la longevidad humana- llamado SIRTI- es activado por el resveratrol.

En experimentos llevados a cabo con ratones de laboratorio se ha demostrado que el SRT501 reduce la obesidad y los niveles de glucosa en animales expuestos a una dieta rica en calorías y que, utilizada en combinación con otros fármacos contra la diabetes como Metformin, aumenta sus beneficios.

Lo más sorprendente es que incrementa además la capacidad para correr y de resistencia de los ratones, convirtiéndolos en auténticos atletas.

Ello se debe a un incremento de la producción de los mitocondrios, auténticos generadores de energía de las células, que amplifica la potencia muscular.

El objetivo del experimento en Newcastle-upon-Tyne es investigar mediante imágenes obtenidas por resonancia magnética y biopsias musculares si en los pacientes humanos tratados con SRT501 se multiplica también la producción de mitocondrios.

Asimismo se medirá la fortaleza de los músculos y la capacidad de resistencia de los enfermos.

Se sospecha además que los mitocondrios podrían estar también asociados con la diabetes, y de hecho en la India se lleva ya a cabo un experimento también con SR7501 para establecer su eficacia contra esa enfermedad.

Esa y otras versiones mucho más potentes del resveratrol actualmente en estudio se basan en las últimas investigaciones que indican que todas las especies animales viven más años gracias a una dieta de calorías limitadas.

Siempre y cuando la nutrición sea la correcta, un recorte del 40 por ciento del consumo de calorías aumenta en un 50 por ciento o más la esperanza de vida de las ratas y otros animales de laboratorio.

En los experimentos llevados a cabo con cobayas por Sinclair y otros colegas de Harvard, entre ellos Joseph Baur, se demostró que los efectos negativos de una dieta rica en calorías pueden contrarrestarse con el resveratrol.

Pero ello no ocurrió en cambio en los ratones en los que estaba ausente el gen SIRTI, de lo que los expertos dedujeron que ese gen controlaba todo el proceso.

Los trabajos posteriores demostraron que el resveratrol activa precisamente ese gen, lo que tal vez explica por qué el vino tinto, consumido siempre con moderación, tiene supuestamente efectos saludables y puede en algunos casos incluso prolongar la vida.