Los problemas que se observan a simple vista en el centenario edificio de la Escuela Industrial Superior (EIS), dependiente de la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Nacional del Litoral (FIQ) es un hecho reconocido por autoridades, docentes, alumnos y padres.
Aún cuando hay acuerdo en la necesidad de actuar de forma urgente, no sucede lo mismo respecto de las causas que han originado el deterioro actual, donde las hipótesis van desde su carácter de edificio centenario (construido en 1908), la presencia de abundante agua en los terrenos (como consecuencia del desagüe de los baños durante más de dos décadas), las excesivas lluvias caídas en el último mes de marzo o la carencia de una adecuada planificación en las obras que se vienen llevando a cabo.
Dicho panorama fue descripto e informado oficialmente el 24 de setiembre último por parte de la Comisión Escuela Industrial del Consejo Directivo de la FIQ, luego del recorrido que ésta hiciera el 10 de ese mes. Allí reconocen que la situación "dista mucho de ser ideal y de lo mínimo esperable de un ámbito educativo para que se desarrollen adecuadamente las tareas".
"Un edificio antiguo necesita un constante y, en este momento, urgente mantenimiento, no sólo de pintura y refacciones menores, sino también de cableado eléctrico; los pisos están cediendo en algunos sectores, paredes que presentan grietas importantes", indicaron, advirtiendo que obras "ya realizadas como arreglo de cielorrasos, se ve amenazado de deterioro porque previamente no se arregló el techo".
En el informe consta que "en el taller de metalmecánica, donde se realizaron no hace mucho tiempo aulas en la parte superior del mismo, hubo fallas en las soldaduras de las vigas que soportan las mismas produciéndose como dos explosiones".
La comisión entiende, respecto de la nueva construcción realizada sobre calle 1° de Mayo, que "posiblemente ha ocasionado perjuicio al estado edilicio de la escuela o agravado los ya existentes".
Entre los más serios, precisan los "evidentes signos de deterioro por haber cedido los cimientos y el asentamiento posterior de la estructura en el ala oeste, donde se encuentran puertas que no cierran, vidrios de ventanas que estallan por la compresión del mismo, rajaduras en la estructura y la clausura del ala por lógicas razones de seguridad".
Destacan, sin embargo, "que la UNL destina fondos para obras y, según las autoridades de la EIS, acuden rápidamente desde la Dirección de Construcciones de la UNL ante el requerimiento o aparición de problemas", aunque al entender de dicha comisión "sería mucho más útil hacerlo de una manera más planificada".
Finalmente, propuso al Consejo Directivo de la FIQ "que se conforme una comisión integrada por todos los interesados donde rápidamente se proceda a establecer las prioridades en materia edilicia y lograr su ejecución a la brevedad".
"Está claro: el edificio tiene problemas, nadie lo puede negar. Gran parte de lo que se dice en el informe es cierto. Podríamos decir que es un estado de crisis edilicia", admitió el director de la EIS, Ing. Héctor Aymerich, a los integrantes de la asamblea (compuesta por docentes, padres, alumnos, no docentes) convocada por la Asociación de Docentes de la UNL (Adul) el pasado viernes en el salón de actos escolar.
"Como todo edificio centenario, tiene problemas. No podemos, además, desconocer el problema hídrico que sufrió la ciudad en los últimos tiempos. La institución padece las consecuencias de no haber contado con un sistema de mantenimiento preventivo y de no haber controlado los desagües pluviales y cloacales. Probablemente, todo esto ha acrecentado los problemas de filtraciones y movimiento de cimientos, porque no sabíamos dónde estaban drenando, cosa que ya hemos verificado", explicó Aymerich.
"Este tema lo encaramos antes de que aparecieran los inconvenientes. Avisamos el año pasado que para menguarlos íbamos a recomponer el sistema de desagües, que es lo que estamos haciendo", aclaró el director ante las acusaciones de falta de planificación.
Reconoció que existen distintos tipos de situaciones, que en todos los casos están siendo seguidas por personal técnico: "En áreas donde podría afectarse la seguridad, decidimos clausurarlas, a partir de las pericias de los profesionales que la UNL contrató".
Aclaró Aymerich que para los casos de mediana complejidad "se está gestionando la solución de los mismos en forma paulatina".
La UNL recibió el financiamiento del Ministerio de Infraestructura de la Nación para proseguir con las obras de restauración de la EIS. De este modo, abrirá una licitación pública, cuyo presupuesto ronda los $ 350.000, para concretarlas en el próximo receso.
El rector de la UNL, Mario Barletta, explicó que la estrategia de intervención en los edificios de la Universidad ha seguido dos criterios claramente definidos en el Plan de Desarrollo Institucional: "Se ha trabajado promoviendo la construcción de nuevas edificaciones, pero también en el mantenimiento y puesta en valor de aquellas que cuentan con reconocimiento por sus cualidades espaciales y arquitectónicas y por los acontecimientos históricos con los que se vinculan".
"En los últimos tiempos, se verificó un deterioro en el sector oeste, dado el exceso de lluvias caídas en la ciudad, sumado a la antigüedad de la construcción", indicó el Arq. Marcelo Saba, director de Obras de la UNL. Asimismo, se informó que el resto de la estructura "no presenta ningún inconveniente, lo que ha sido verificado por las correspondientes áreas técnicas".
La Universidad solicitó el asesoramiento de expertos, quienes concluyeron en "la necesidad de una obra de micropilotaje, para transmitir la carga de la estructura al subsuelo", explicó el Arq. Rodolfo Bravi.
En 2007
se realizaron las siguientes obras: restauración de terrazas e impermeabilización en sector este, casco histórico y galerías; reconstrucción de desagües pluviales; reparaciones en dos aulas, así como de bovedillas y cielorrasos del resto de las aulas del casco histórico. El total de la inversión de esta etapa es de $ 111.197.
Comisión
Luego de la asamblea, se constituyó una comisión integrada por padres, integrantes de Adul, Apul, centro de estudiantes, directivos de la EIS y funcionarios de la UNL, para definir las prioridades y solución a las irregularidades. La misma funcionará desde la semana que viene.
De la Redacción de El Litoral