Lo que un maestro debe saber hoy

Más allá de los eternos cuestionamientos a los docentes, bien o malintencionados, lo cierto es que hoy la coyuntura social y económica argentina y los nuevos saberes y tecnologías de la aldea global exigieron adecuar la formación de los maestros.

Hoy, a las futuras generaciones de adultos les tocará enfrentar un mundo de rápidas autopistas informáticas; trabajos temporales; exigencias de uno o más títulos e idiomas; escasez de los recursos naturales, gradual extinción de algunas especies, cambios climáticos y contaminación, entre otras cuestiones. No ajenas a esta temática, se instalan, lamentablemente, la violencia y la multiculturalidad, es decir, la convivencia de etnias y religiones diversas, en sociedades que pierden más sus valores de respeto, familia y tolerancia, entre otros.

Todas estas incumbencias y disciplinas formarán parte imprescindible de la formación de los maestros actuales, especialmente los de inicial y primaria, quienes tienen a su cargo la etapa decisiva del aprendizaje y el conocimiento de los chicos.

A ello habrá que sumarle las horas de prácticas, que será necesario aumentar desde el comienzo de la carrera.

Estas directivas y consideraciones forman hoy parte del anuncio de la dirección General de Educación bonaerense, que conduce Adriana Puiggrós, de extender a cuatro años la carrera para maestros de inicial y primaria. Hay que tener en cuenta que las políticas de la provincia de Buenos Aires producen -por su tamaño, población y número de escuelas y alumnos- un efecto de réplica en las restantes jurisdicciones argentinas. Este cambio en el plan de estudios para el magisterio comenzará a regir en 2008 y pondrá el acento no sólo en el campo de la práctica, sino también en los saberes relacionados con interculturalidad, medio ambiente y nuevas configuraciones culturales.

Según la cartera de Puiggrós, el nuevo diseño "permite recuperar el sentido de la escuela y de la profesión docente en la sociedad actual; define al maestro como un pedagogo, un enseñante, un constructor de conocimiento y un trabajador de la cultura".

La nueva currícula se organizará en materias agrupadas en cinco campos: Campo de la actualización formativa; de la Fundamentación; de los Saberes a enseñar; de la Subjetividad y las Culturas; y de la Práctica Docente.

Sin embargo, "libera" a las escuelas e instituciones educativas para que ejerzan su autonomía y puedan construir "en forma permanente un currículo vivo".

El diseño plantea además la "centralidad" en el Campo de la Práctica, que comienza con una experiencia social fuera de la escuela para terminar en 3° y 4° año con una residencia en el aula.

En cuanto a los nuevos conceptos y disciplinas que incorporarán los maestros bonaerenses hoy, el nuevo plan de formación propone herramientas de educación popular, con las que el docente "se prepara para trabajar con la conflictividad y la complejidad sociocultural".

La idea es que comprenda no sólo al alumno que tendrá a su cargo, sino a las múltiples variables que atraviesan el ambiente que lo rodea, donde no es la escuela el único espacio de formación.

Debido a ello se agregaron materias referidas con el análisis del mundo contemporáneo, la cultura actual, las constelaciones familiares y juveniles, los medios de comunicación y las nuevas tecnologías.

En la formación del docente de nivel inicial se incorporan los contenidos necesarios para trabajar en jardín maternal. Se revaloriza el papel del arte, de las nuevas estéticas y el juego en la formación docente.

En síntesis, la cartera propone que el currículum sea construido por los verdaderos ejecutores del mismo.

Laura Hojman (DyN)