Concluyeron hoy las Primeras jornadas provinciales de escuelas de educación técnica, que contaron con la presencia de estudiantes, docentes y directivos de esas instituciones provenientes de distintas localidades del interior, así como autoridades ministeriales locales y nacionales.

La escuela N° 480 Manuel Belgrano fue la sede del encuentro, donde se desarrollaron diversas actividades, entre ellas, una feria de proyectos educativos y de oferta educativa de las escuelas de educación técnica. Otra actividad destacada fue la realización de ateneos, con el objeto de socializar los proyectos institucionales que dieron lugar a la elaboración de los Planes de Mejoras, programa con financiamiento nacional.

En el acto de apertura, la ministra de Educación, Adriana Cantero, expresó su "satisfacción" por la calidad de los proyectos que las distintas escuelas presentaron en los diversos stands que se montaron para la ocasión.

"Esta es una muestra de trabajos donde se justificará qué se hizo en el marco de los planes de mejoras, qué nivel de ejecución lograron para mostrar cómo han impactado en las escuelas con perfil técnico", precisó la ministra.

Dichos planes vienen implementándose desde hace un año y medio en la provincia. Al respecto, Cantero expresó su "satisfacción, no sólo con el nivel de calidad de las propuestas, sino con el nivel de ejecución que han demostrado. Ello nos permitió tener un buen nivel de rendición de cuentas y la posibilidad de que habiliten nuevos planes de inversión".

El vicedirector de la escuela agrotécnica N° 295, de La Potasa (ubicada a 10 km de Reconquista) presentó el impacto que tuvo el plan de mejoras "después de una postergación bastante prolongada, sobre todo lo vinculado a los recursos didácticos que necesitamos en una escuela como la nuestra, que requiere fundamentalmente equipamiento actualizado para funcionar". Con los 229 mil pesos que recibieron concretaron la obra del cerco perimetral del predio escolar, así como la compra de un tractor desmalezador, una sembradora de hortalizas, las instalaciones para la producción de cerdos, para la producción del centro avícola, entre otras.

"Nosotros hacemos hincapié en la gran movilización que esto produjo en nuestros alumnos y los padres, en el aumento de la matrícula, así como en las instituciones que nos están apoyando", concluyó.

Por su parte, el docente de la escuela N° 269 de Sunchales exhibía en paneles cómo trabajan en los talleres: "Hace dos años formamos la cooperativa escolar, donde los chicos hacen jabones y detergentes para las industrias, por ejemplo". El dinero recibido fue invertido en equipamiento nuevo "porque teníamos máquinas muy obsoletas: tornos, fresadora, perforadoras de bancos, instrumentos para electricidad, carpintería, soldaduras y laboratorios.

Un alumno de la escuela Nicolás Avellaneda, de Santa Fe, presentó a los asistentes un robot controlado por una cucaracha: "Consta de dos carreteles sobre los que camina la cucaracha (del tipo Madagascar), donde se apoyan las patas. En el extremo de cada uno hay un carretel dentado: la cucaracha camina y hace que se muevan los carreteles, a los que enviamos un haz de luz". Y agregó: "Al estar dentado se genera color negro y transparente, lo que produce información lógica con 0 y 1. Esto nos dará información numérica de los movimientos de la cucaracha: estos datos van a la placa controladora, que envía alimentación a los motores en forma pautada. Así, se mueve el carretel y consecuentemente se mueve el robot. Esto no está programado: el robot se mueve para donde la cucaracha quiera".

El "cucamóvil" fue hecho con materiales reciclados, en 15 días. "Lo que hacemos es generar un movimiento mecánico a partir de un movimiento biológico. El objetivo es demostrar que si nosotros pudimos hacer esto en poco tiempo y con materiales reciclados, mucho más puede hacer una persona con recursos económicos y tiempo", concluyó el estudiante.

De la Redacción de El Litoral