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Diputados de Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos se reunieron ayer para acordar la postura que llevarán pasado mañana a la convocatoria. Pedirán que se preserve la institucionalidad y la división de poderes. Los socialistas, prudentes.
Diputados provinciales del Frente Progresista de Santa Fe se reunieron ayer en esta ciudad con legisladores de Córdoba y Entre Ríos. Fue una especie de previa del encuentro que se realizará el próximo viernes en San Francisco, donde esperan encontrarse diputados y senadores provinciales y nacionales de la Región Centro para definir una agenda legislativa común.
Si bien se dijo que la convocatoria de pasado mañana "es abierta" para todos los partidos, a la reunión de ayer no concurrieron referentes del Partido Justicialista; sólo radicales, aristas y demoprogresistas. Es que uno de los puntos centrales de la agenda implica dejar sentada claramente cuál es la postura del sector frente al gobierno nacional, a propósito del reciente conflicto desatado con el campo.
"Pretendemos que la reunión del viernes se haga sobre la base de los ejes que quedaron sentados por el gobierno de Hermes Binner cuando se firmó el acta en el Salón Blanco, y en la cual se le pedía a la Nación una instancia de diálogo y la suspensión de las retenciones", dijo a El Litoral el diputado Hugo Marcucci.
El legislador radical confirmó que la inquietud por reunirse surgió a raíz del paro agropecuario, en el cual la Región Centro se convirtió en uno de los puntos neurálgicos del país por el impacto de las medidas y por el caudal de recursos que las tres provincias aportan al fisco nacional.
"Así, surgió la iniciativa de encontrarnos todos en San Francisco el viernes, y previamente, decidimos conversar aquí en Santa Fe", relató.
La previa
En la reunión de ayer, se ratificó la idea esbozada en su momento por el gobernador Hermes Binner de exigir el diálogo a la Nación, sobre todo en esta instancia en la que debe definirse cómo se reintegrarán las retenciones.
"A eso, se suma la exigencia de una nueva ley de coparticipación, que tenga en cuenta una distribución para las provincias más equitativa de los recursos en general, y de las retenciones en particular", dijo Marcucci.
Pero la discusión no quedó ahí. También se planteó una fuerte disidencia hacia la manera de ejercer el poder de parte de la presidenta de la Nación. En ese sentido, coincidieron en llevar a la mesa de discusión el viernes, un reclamo concreto para que se preserve la división de poderes y la institucionalidad, y para que el Congreso, "avasallado por las últimas medidas", vuelva a tener participación e injerencia en la discusión de temas controvertidos como las políticas impositivas. Hasta se incluyó como punto de debate la necesidad de que se respete la libertad de prensa.
"La idea es debatir todo esto en el encuentro del viernes. No son éstas las conclusiones, pero sí pasan por estos ejes las preocupaciones que tenemos en común. Los legisladores que vinieron estuvieron de acuerdo con estas líneas de pensamiento, sobre todo, con el reclamo de una nueva ley de coparticipación", explicó Marcucci. Aclaró que no se arribó a una postura única, pero dijo que "hay coincidencias muy grandes que van más allá de los partidos políticos y donde emerge una preocupación del interior por proteger sus recursos y su producción, y por establecer una relación diferente con el poder central".
Quiénes fueron
A la reunión de ayer asistieron por Santa Fe los diputados radicales Hugo Marcucci, Santiago Mascheroni y Darío Boscarol; Antonio Riestra del ARI y Luis Mauri del PDP. Por Entre Ríos, participaron cuatro diputados radicales y por Córdoba, el jefe de la bancada de la UCR. No hubo socialistas, aunque según Marcucci, participaron de la organización del encuentro.
Consultado por El Litoral, el senador por Rosario Juan Carlos Zabalza (PS), aclaró que la convocatoria del viernes en San Francisco parte de las fuerzas opositoras y no hay aún ninguna invitación formal o escrita.
"Estamos en contacto con la gente porque nos interesa ser parte de todo lo que implique discutir las derivaciones del conflicto con el campo y la coparticipación de las provincias. Pero es una convocatoria que se está haciendo desde sectores de la oposición", insistió.
En lo personal, Zabalza dijo estar más interesado en poder impulsar desde el Senado provincial una reunión de todos los bloques de legisladores provinciales de la Región Centro para "defender los intereses comunes".
Así, el Partido Socialista aparece frente a la reunión del viernes más prudente que convencido. Según pudo saber El Litoral, consideran que sería más conveniente lograr una convocatoria y una postura institucional de las tres provincias como región, antes que un encuentro de dirigentes opositores al gobierno nacional, que sólo profundizaría las divisiones y hasta desataría especulaciones sobre futuras contiendas electorales.
Dinero en cuentagotas
La Casa Rosada se abstendrá de ahondar las diferencias con el gobierno de Córdoba, aunque tendrá con él una relación de baja intensidad institucional hasta tanto haya un desenlace más o menos cierto del conflicto con el campo que prevé prolongado.
La nueva modalidad se traducirá en un desembolso "a cuentagotas" de los recursos nacionales comprometidos para la realización de obras públicas en la Provincia y, políticamente, en un congelamiento de la relación.
Supondrá también, como contracara, jerarquizar la relación político-institucional con el gobierno de Córdoba capital a partir de hacer fluido el financiamiento nacional para obras públicas.
Tales perspectivas del vínculo entre la Nación y la provincia surgen de fuentes de la Rosada consultadas ayer, luego de que el gobernador Juan Schiaretti anunciara el lunes su decisión de actuar administrativa y judicialmente si, como consecuencia de su posición de diálogo en medio del paro del campo, el gobierno nacional suspende fondos para obras públicas en Córdoba.
La premisa de la que parte el gobierno nacional para este cambio de posición es que "el conflicto con el campo seguirá", dijo una fuente de la Secretaría General de la Presidencia que verifica el día a día del comportamiento del gobernador ante la crisis. "Schiaretti ya optó en este conflicto. Por eso no hay que pensar en que cambie de postura. Más aún cuando tiene como vocero a un delasotista como (Carlos) Caserio. Hasta que haya un desenlace en la crisis con el campo, habrá freezer político y dinero a cuentagotas para Schiaretti. Pero tampoco lo vamos a ahogar", razonó la fuente.
Adelanto
El gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, anunció ayer que les adelantará los reintegros a los pequeños productores de su provincia con dinero provincial y luego pedirá el reembolso a la Nación. "Les damos la plata con presupuesto provincial; los productores no confían en el gobierno", dijo al matutino porteño La Nación un allegado a Schiaretti. La provincia empadronará a 17.000 pequeños productores, a los que les reintegrará entre 50 y 100 millones de pesos en el año. "Luego, la provincia se lo reclamará a la Nación", dijo la fuente.
Binner
Fuentes cercanas al mandatario santafesino adelantaron que el doctor Hermes Binner no tenía previsto viajar el viernes a San Francisco. "Es una reunión de legisladores", indicó la fuente que no negó que representantes del socialismo pudieran asistir.