El director de Programa de Educación para América Latina de Intel, Javier Firpo, brindará una conferencia el próximo viernes, a las 19 horas, en el Club del Orden. Describirá de qué manera se va integrando la tecnología en el sistema educativo y planteará cuáles son los desafíos de cara al futuro.
"En un mundo globalizado, las PC's conectadas a Internet son una herramienta de mucha utilidad para el acceso a contenidos que posibiliten un mejor desarrollo de los estudiantes. Con docentes debidamente capacitados, los recursos didácticos y pedagógicos son muchísimos. Teniendo aulas conectadas, los maestros pueden guiar el proceso de aprendizaje de sus estudiantes construyendo los conocimientos a partir de ellos mismos", explicó Firpo al ser consultado por los beneficios del uso de las TICs.
Siempre que sean bien utilizadas, las PC's e Internet son recursos útiles que enriquecen el aprendizaje. "Hoy en día hay toneladas de `contenidos' digitales disponibles, que se actualizan en forma permanente, y que pueden complementar los materiales impresos. El tema es saber evaluar esa información y emplearla para los procesos de enseñanza-aprendizaje", evaluó.
Los alumnos, por su parte, por medio de "las nuevas modalidades de los usos de las TICs, como los blogs y wikis, no sólo pueden acceder a contenidos, sino también proveer y compartir con el mundo lo que ellos producen. Esto, sin dudas, hace valorizar mucho la labor creativa de los estudiantes", sostuvo Firpo.
El directivo de Intel remarcó una y otra vez que las computadoras "no hacen magia". "Por más que tengamos sembrado todo el sistema educativo con máquinas nuevas y con la mejor conexión no tendrá ningún sentido si no se saben utilizar de manera efectiva y razonada", argumentó.
La Argentina tiene un largo camino por recorrer en la materia ya que, salvo excepciones, el equipamiento es utilizado en las clases de computación. "La gran mayoría de las escuelas tienen su gabinete, pero en esos laboratorios no suelen enseñar matemática, geografía o historia sino informática. Y lo curioso es que, por lo general, los estudiantes ya saben utilizar la herramienta. Uno de los esfuerzos que estamos tratando de hacer es que esos equipamientos no sean utilizados para enseñar informática sino que sean incorporados para que con la ayuda de los maestros de las distintas áreas del conocimiento puedan ser integrado a la educación de manera efectiva. Esto está aconteciendo de manera muy paulatina", señaló Firpo.
Acortar la "brecha digital y generacional" entre los docentes formados en la era analógica y los chicos de la era tecnológica es una tarea ineludible que tendrá que profundizarse desde el Estado.
En nuestra provincia y con el apoyo de la gestión de Obeid, Intel capacitó unos 3.000 maestros y ya inició conversaciones con el Ministerio de Educación para continuar desarrollando los programas de la compañía en Santa Fe.
En materia de incorporación de tecnología a la educación, la Argentina está en una posición intermedia respecto a otros países latinoamericanos. A nivel regional, Chile es -según Firpo- "un modelo interesante" porque ha desarrollado en los últimos 15 años una política educativa basada en la incorporación sistemática y sostenida de la tecnología, con equipamiento, contenidos y capacitación docente.
En el ámbito internacional, Corea es una país de avanzada en la materia. "Ellos han integrado la tecnología dentro de las áreas del conocimiento. Han dejado de tener informática para utilizar la tecnología como una herramienta más. Van a historia, geografía, matemática y en lugar del manual o la enciclopedia utilizan la tecnología", sostuvo Firpo.
En Argentina, el ejecutivo de Intel señaló que "todavía no se está empleando bien. Se está empezando a utilizar pero todavía hay mucho por hacer. El país tiene arriba de 600 mil maestros y de ese número estoy seguro que un altísimo porcentaje que no está capacitado digitalmente".
A pesar de todo, señaló que se evidencia "un cambio" en el modo en que se utilizan las tecnologías "en aquellos lugares y comunidades donde ha habido una política de capacitación docente importante, en donde los maestros se dan cuenta que es una herramienta útil y pedagógica y, por lo tanto, comienzan a utilizarla".
Conferencia
"Integrando Educación y Tecnología. Un desafío necesario para una mejor educación en el siglo XXI" es el título de la conferencia que el Dr. Javier Firpo ofrecerá el próximo viernes 18 en el Club del Orden, sito en San Martín 1936.
El disertante es abogado y realizó un master en Derecho en la Universidad de Duke (EE.UU.). Es presidente de la Fundación Alfa (Alumni Foundation de Argentina) y Director del Programa de Educación para América Latina de Intel, empresa que destina recursos para formar en la Argentina y en el mundo a los docentes en el uso de las nuevas tecnologías y a los estudiantes para que estén preparados para las demandas de este siglo.
En el país, la incorporación de la tecnología "empezó de manera errática y casual en el sistema educativo en forma masiva en los 90, cumpliendo un rol fundamentalmente administrativo".
Casi una década después los gabinetes de informática introdujeron las PC en el ámbito educativo y hoy "casi todas las escuelas tienen alguna computadora: máquinas nuevas o viejas, PCïs que recibieron del Ministerio de Educación o de alguna donación", sostuvo Firpo.
El acceso a Internet está más rezagado que la disponibilidad de equipamiento. "La conectividad en las escuelas es un proceso lento pero por suerte cada vez es más habitual. Aún en establecimientos sin Internet, muchos docentes hacen maravillas con sus alumnos", destacó.
La nueva ley de Educación, en la que se establece que el acceso y dominio de las tecnologías de la información y la comunicación deben formar parte de los contenidos curriculares, representa un fundamento legal para avanzar en la integración de las TICïs en la educación. "Más allá de lo que deberíamos hacer, la ley es un desafío formal y obligatorio".
Equipar las escuelas argentinas implicará destinar recursos pero "lo importante es que esa inversión no es un gasto". "Cuando se invierte en tecnología, tarde o temprano, vuelve porque se logra integrar mejor sus usos dentro del sistema educativo, genera mejores maestros, estudiantes, investigadores, universitarios y trabajadores; mejor factor competitivo a nivel país y región", concluyó Firpo.