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El Museo de Arte Contemporáneo de la UNL rinde homenaje a un gran artista de Santa Fe: Richard Pautasso. Su muestra de dibujos, cajas y objetos, que se denomina "Dedicado al cine", se inaugurará este viernes a las 20 y se podrá visitar hasta el 28 de setiembre de martes a viernes, de 9 a 13 y de 16 a 20; y los sábados y domingos de 16 a 20, en Bv. Gálvez 1578.
La curación de la muestra está a cargo de la Lic. Stella Arber Ädirectora del MACÄ; la fotografía y producción es de Fernando Jaume y Gisela Amante.
Richard Pautasso trabajó en cine con Fernando Birri como ambientador en la película "Los inundados". Además se le encomendó todo el trabajo gráfico y montaje de "Tire dié", como también el material gráfico y de ediciones del período de Birri, en el Instituto Superior de Cinematografía de la UNL. Asimismo participó con sus conocimientos en los teatros independientes de la época como escenógrafo y vestuarista.
También en la década del '50 hizo trabajos gráficos importantes y de ilustración para ediciones, al mismo tiempo de iniciarse como ilustrador de cuentos y poemas del diario El Litoral, donde se desempeñó durante tres décadas ininterrumpidamente.
Pautasso fue un reconocido vidrierista en nuestra ciudad y parte del país; ilustrador de libros y revistas, decorador de interiores, y en proyectos arquitectónicos dejó su propia impronta.
La directora del MAC y curadora de la muestra habla de la obra de Pautasso: "Sus creaciones van hilando los esquemas iniciales de historias filmadas de sencillas cronologías, hasta unidades de focalizadas y múltiples acciones en progresión, que llegan a complejas instancias enunciativas.
"Dependiendo del director que incluya en la escena, los recursos se articulan, poniendo en evidencia los medios y elementos que caracterizan a cada uno. Referencias directas, claras implicancias, demarcaciones puntuales, hacen que el espectador organice mentalmente lo que ve en estas obras, con lo que sabe de las películas que delatan, por haberlas visto o tener referencias de ellas. Son huellas permanentes que hacen al ideario cinematográfico que aparecen en escena, dando cuenta de tal o cual película.
"Como en un trabajo de laboratorio, el artista crea, recuperando y sosteniendo la historia contada y se hace cargo de la supervivencia de la imagen, aunque sea con otros recursos y planteados desde otra óptica. Es una manera de quebrar la maldición del fin de la escena, cuando se apaga la pantalla. Pautasso las salva de la desaparición, casi como un coleccionista, se pone a investigar, a recrear la fantasía, a reproducir sus formatos, aunque sea en otra clave, haciendo aparecer el género de que se trata sin tapujos, sea melodrama o histórico-épico, policial, musical o comedia, harán su ingreso en otra variable de la imagen, de la mano del artista.
"Pautasso recrea Ädestaca ArberÄ al director francés Jacques Demy, desde el color, la alusión a los movimientos de cámara y los tiempos de narración en esta sucesión, cuadro por cuadro.
"Francoise Truffaut está también en esta dedicatoria. Para él, la infancia y la juventud están siempre presentes con diferentes propósitos, y desde perspectivas complementarias, el testimonio, las ausencias, los principios mezclados con la melancolía y la sensibilidad extrema.
"A Werner Herzog, tan propenso a retratar los hechos históricos y a ofrecer ángulos claros para sus puntos de partida y dejar que la imaginación complete el relato fílmico, también lo tuvo en cuenta. Las obsesiones, la locura, la anulación de la razón y todos sus personajes llevados a extremos son parte de la filmografía del alemán.
"Las cajas-objetos que nos muestra Pautasso representan la filmografía de varios realizadores. Fritz Lang, que tan bien retrata los mundos prerracionales, vinculados con la fantasía de héroes legendarios, espías vigilantes de redes delictivas, donde todo escapa a su control, es otro de los homenajeados.
"También para Eric Rohmer, agudo intelectual, creador de climas de profunda empatía con una moral intensa, sobre el sentido de la existencia humana. Sus personajes asumen el rol de definirse a sí mismos en la cotidianidad de las escenas, acompañadas de expresivos gestos, rostros y comportamientos".
Relato, trama y conflicto se resuelven a través de las relaciones humanas comunes en la convivencia diaria y cotidiana en Jim Jarmusch, que también tiene su obra.
"Pier Paolo Pasolini, con sus críticas a la sociedad a través de personajes marginales, huye constantemente del lugar común, poseído por una feroz energía y una visión contradictoria del mundo, desnudó su alma a través de sus películas y aquí en la obra de Pautasso tiene un espacio destacado en una impecable caja-objeto.
"Tim Burton, con siniestras ambientaciones, su sarcástico sentido del humor y sus personajes surrealistas, crea un universo propio. Su imaginación desbordante de profunda raigambre visual, mezclada con el humor negro, hacen de este director uno de los más originales del Hollywood actual.
"Hay un espacio especial dedicado al cine afgano, que está presente a través de la alfombra, pieza clave, donde comer, amar, discutir o pasar un apacible momento familiar se circunscribe a estar sobre ella. Elaboradas por las mujeres de la familia como gesto de amor, aquí se recrea a través de guardas y colores utilizados ancestralmente para hacer referencia a ella. Cada director es connotado a partir de sus características principales y sobresalientes. A través de simbólicos elementos e imágenes, este artista trata a cada uno de ellos, en sus propios mundos, tan grandiosos como desolados".
Para Arber, "la figura humana masculina es un motivo constante que ocupa el centro de varias escenas y de varios paisajes Äanota ArberÄ, que recrean la fauna y flora autóctonas, otro tema representado en esta muestra, donde el artista reflexiona sobre la lucha denodada de la naturaleza por sobrevivir a la depredación humana; manadas migratorias pugnan por desplazamientos insólitos de territorios marcados por el dominio del hombre".
"Los paisajes de Pautasso tienen pulsaciones propias, la humedad, el aire, la niebla, el agua, se traducen en el obrar zigzagueante de las ramas, el calmo silbido del viento, la calidez de la hierba tierna y todos los intrincados sucesos de la naturaleza.
"Son paisajes delicados, sutiles y a la vez fuertes y sostenidos, con variados cambios de luz y puntos fuertes en el plano, que dan como resultado una sensación de espacio abierto cargado de vida, grávido de energía vibrante, se notan el flujo y reflujo del universo vegetal con su movimiento producido por le ventoso clima ribereño.
"El dominio absoluto del dibujo va más allá de los temas, las formas y los materiales; nos dejan frente al gran creador que es este artista. En todos los casos se pueden analizar las instancias procedimentales de sustento, las claves maestras a las que se reduce el dibujo de Richard Pautasso.
"Se registran en las obras Äescribe finalmente ArberÄ la inspiración y la excitación de la pulsión creativa en estado puro, revelando una deliciosa y sutil movilidad perceptiva-visual, basada en un sustrato de profundidad, delicadeza y madurez de su espíritu creativo. Pautasso posee una acumulación de energía de reserva que es su fuerza; una energía conservada desde siempre que es perdurable y sólida. Hay en él una madurez cuya adquisición lleva toda una vida y a la vez una madurez del momento actual, de inspiración súbita, de impulso de la idea matriz que se torna irreversible y que ha sido evidentemente atrapado por su imaginación y registrado por su mano en estas obras".
En 1966, J.M. Taverna Irigoyen sostuvo sobre la obra del artista: "Sus símbolos tienen fuerza propia, aunque no vivan del placer de sí mismos. Son símbolos que caen dócilmente en el cuadrado del papel, como si se los hubiera invitado a hacerse carne de un paisaje, de un interior o de un horizonte. Es decir, que no son símbolos buscados, superfluos, falsos o de intensidad prestada. Como verdaderos símbolos, participan de su línea íntimamente consustanciados del dolor, la alegría o el patetismo; símbolos, en fin que no complementan el escenario sino que integran una parte formal del mismo.
"Porque el dibujo de Pautasso goza del común denominador de una línea tratada sabiamente; una línea ágil y traviesa, temperamental y culebreante, abierta y arrevesada, presente y distante, según así lo exijan los movimientos de sus criaturas o sus construcciones en el horizonte. Línea que juega todas las posibilidades de la luz y de la sombra, dando a cada cuerpo, a todo elemento geométrico, su categoría decisiva y precisa". El texto fue recogido por la publicación Creadores Santafesinos.
Por su parte, Domingo Sahda señaló en el "99: " En los territorios creados por el dibujante suceden cosas, se muestran acciones que están pasando, son vidas dibujadas que viven en su mundo y desde él nos hacen guiños cómplices.
"La primera llave de la que se apropia el artista es la de la libertad para imaginar siendo él mismo. Las mutilaciones que con galanura exhiben sus personajes no señalan lo trágico, tampoco lo dramático o lo terrible. Dicen de la libertad de la diversidad en un lugar donde todo es posible, donde las convenciones se caen. Poesía de los espacios infinitos que huyen como ecos de sí mismos; territorio en el que las luces y las sombras se orquestan en un todo abierto al infinito.
"Admonitorio, sentencioso a su manera, el artista señala, denuncia, cuestiona, ironiza ácidamente haciendo de la línea su inclaudicable compañera, el arma esencial de su estar en el mundo. Su espada".
DE LA REDACCIÓN DE EL LITORAL