El Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop) dirigió una nota al Servicio Provincial de Enseñanza Privada, dependiente del Ministerio de Educación, en la que reclama un cambio "urgente" en la forma en que se autorizan los incrementos de las cuotas para los colegios privados.
Las instituciones aún no trasladaron a sus aranceles la última mejora salarial del magisterio que corre desde agosto y que rondó el 12 por ciento. De hacerlo, las escuelas privadas estarían subiendo sus cuotas un 54 % en el transcurso de un año, según cálculos del Sadop.
El sindicato dio un ejemplo. Una cuota en las escuelas que reciben el 100 por ciento de aporte estatal, se podría incrementar de 67 pesos, que costaba en agosto del año pasado, a 103 pesos, si se aplica el procedimiento actual.
"Este incremento no responde a la realidad del costo educativo, tampoco al aumento de los salarios, ni a ningún índice de incremento de costos de vida, ni oficial ni privado", señalan las seccionales Santa Fe y Rosario del Sadop en la nota conjunta que remitieron a Germán Falo, titular del Spep.
Si a esto se le suma la inscripción de 2009 -que se pueden establecer en el doble del arancel mensual- el costo real de las cuotas para los últimos meses "se incrementará aún más", advierte el sindicato.
El Spep establece mapas arancelarios que toman en cuenta el sueldo nominal del maestro de grado y el porcentaje de subsidio que aporta el Estado, en base al cual se estipulan topes máximos de cuotas que los colegios deben respetar. De acuerdo a esas grillas, el porcentaje de aumento permitido entre agosto del año pasado y agosto de 2008, es del 37 % o menos.
Sin embargo, dos casos reales que recogió El Litoral muestran porcentajes mayores de incremento. Una alumna que asiste a un reconocido colegio céntrico de nuestra ciudad pagaba $ 166 en marzo de este año y $ 252 ahora (51,80 % de incremento, al que habría que agregarle el aumento que se viene).
Otra nena, que va una escuela privada distinta abona $ 234, mientras que el año pasado pagaba 150 pesos (56 %). Este mes los padres de la alumna se encontraron con la novedad de tener que abonar 30 pesos más de cuota, sin que se les justifique la causa de la suba.
La preocupación del Sadop radica en que este desmesurado nivel de aumento "está fuera de todo parámetro de la realidad", según explicó Pedro Bayúgar, secretario general del Sadop Santa Fe.
La actual metodología de cálculo de aranceles, estaría avalando a que "algunos pícaros propietarios de las instituciones usen la excusa del incremento salarial recibido por los docentes para tener más ganancias e ir en detrimento de los padres y de los propios docentes del sector privado que también mandan a sus chicos a los colegios y pagan cuotas".
"Cada aumento de sueldo nos enfrenta a los docentes con los padres porque la metodología de cálculo de las cuotas, que viene de la época de Reviglio, es perversa", criticó Bayúgar, para quien el costo educativo "no es directamente proporcional al salario; si así fuera, el comercio trasladaría directamente el aumento de sus empleados a los precios y no sucede así en la realidad".
Por eso, el Sadop entiende que "urge" establecer un nuevo parámetro o procedimiento de incremento de dichos aranceles, que responda "a la efectiva y real necesidad de las escuelas, dejando de lado el procedimiento vigente que presume un aumento acumulativo, en función del incremento del salario".
Bayúgar señaló que en otras provincias usan mecanismos distintos que, por ejemplo, tienen en cuenta los costos totales del servicio educativo como impuestos, mantenimiento edilicio, salarios, insumos; todos ítems tabulados por la Secretaría de Comercio Interior.
Consultado por El Litoral, Germán Falo, titular del Servicio Provincial de Enseñanza Privada (Spep) dijo que el actual sistema de cálculo de cuotas es "razonable" y está en vigencia "desde pasadas gestiones".
Aseguró, sin embargo, que este mecanismo "está en permanente evaluación" y se tendrá en cuenta el reclamo que presenta el Sadop. De todos modos, aclaró que así como existe esta postura gremial, "para las entidades propietarias esta fórmula resulta insuficiente".
Advirtió que en Capital Federal "hay un sistema distinto de análisis de costos máximos para establecer las cuotas, que tiene fuertes cuestionamientos".
El Sistema Provincial de Enseñanza Privada establece los valores máximos que puede cobrar cada colegio de acuerdo a una grilla establecida conforme al porcentaje de subsidio que aporta el Estado. No es lo mismo un colegio que recibe el 100 % de aporte, que generalmente está ubicado en barrios periféricos y cobra una cuota voluntaria, que aquel establecimiento céntrico que recibe menos apoyo del Estado, pero que tiene permitido cobrar aranceles más altos.
La cuota voluntaria de una escuela que recibe el 100 por ciento de subsidio equivale al 5 % del salario nominal de un maestro de grado (que hoy es de $ 1.830 y con el último aumento se irá a $ 2.049).
Para un colegio que recibe el 80 por ciento de subsidio estatal, el arancel se calcula sobre el 9 % de ese sueldo. Ese porcentaje es mayor cuando el Estado otorga menos subsidio. Para el colegio que recibe el 70 por ciento de aporte, la cuota es el 11,67 % de ese salario y así sucesivamente hasta llegar al 15 % de 2.049 pesos, para el establecimiento con 40 por ciento de cobertura del Estado.
De los 784
colegios privados de todos los niveles existentes en la provincia, más de 120 cobran cuotas menores a $ 30, unos 200 establecimientos cobran entre $ 30 y $ 50 de arancel, otros 200 entre $ 50 y $ 100, y unos 180 perciben más de $ 100 de cuotas, según el Servicio Provincial de Enseñanza Privada