De la Redacción de El Litoral

La Academia Nacional de Ingeniería -institución técnico-científica dedicada a promover el estudio, la aplicación y el desarrollo de las ingenierías en todo el país- distinguirá el próximo 28 de noviembre a Romina Ayelén Porta, ingeniera civil de 26 años egresada el año pasado de la UTN -Facultad Regional Santa Fe- con un promedio de 8.74, para orgullo de su casa de altos estudios. La ceremonia de premiación se realizará durante una sesión pública en el Aula Magna de la Academia Nacional de Medicina, en la ciudad de Buenos Aires. Ya se ha hecho extensiva la invitación al decano de la facultad -Ing. Ricardo O. Scholtus-, y demás autoridades académicas.

La joven profesional -quien en la actualidad se desempeña laboralmente en la empresa Cocyar Ingeniería S.R.L de nuestra ciudad-, explicó a El Litoral que "las facultades de ingeniería de todo el país postulan sus mejores egresados ante la academia nacional, siempre y cuando los postulantes cumplan determinados requisitos: por ejemplo, un buen promedio académico, no haber tenido aplazos durante el cursado, el porcentaje de asistencia, el tiempo en que se hizo la carrera, etc. La entidad consideró que yo cumplí satisfactoriamente con los requerimientos. Este reconocimiento me llena de alegría y de orgullo por todo el esfuerzo realizado", expresó.

Consultada sobre la especificidad de su carrera, la joven explicó que "las ingenierías tiene mucha carga horaria y se deben cursar todas las materias: no existe la condición de alumno libre para rendir exámenes, excepto en los gabinetes de idioma o el taller de informática. Hay materias anuales muy largas y "pesadas', que son fundamentales para la formación profesional". Y agregó: "En los últimos años de mi carrera trabajé dentro en el Gimni -Grupo de Investigación en Métodos Numéricos en Ingeniería de la UTN-, en una consultora que funciona dentro de la facultad y como ayudante de cátedra. El hecho de haber realizado actividades laborales paralelas al estudio me sirvió de mucho", destacó.

"La carrera de ingeniería civil tiene un abanico interminable de opciones, que van desde el cálculo matemático o la dirección y coordinación de obras de construcción, hasta proyectos integrales de obras de defensas. También la investigación es una variante interesante: aunque si bien en Santa Fe no hay una fuerte presencia de investigaciones en el ámbito académico, igualmente esta actividad ha crecido mucho en los últimos años", explicó Romina.

El ingeniero civil tiene en la actualidad un amplísimo campo de acción en la construcción, gracias al crecimiento exponencial de esta actividad en los últimos años. "En general los proyectos para la construcción de edificios, por ejemplo, incorporan ingenieros de distintas disciplinas. Esa interacción con profesionales provenientes de diversas áreas ayuda mucho al enriquecimiento de la formación profesional propia. Los proyectos que se ejecutan son más completos si están dirigidos por equipos interdisciplinarios", añadió la joven profesional.

Sobre la salida laboral de las ingenierías en la actualidad, explicó que "si bien es muy poca la gente que termina una ingeniería en comparación con el número de ingresantes por año, ocurre que al haber muy pocos ingenieros disponibles, los estudiantes avanzados son convocados para empezar a trabajar antes de finalizar sus estudios. Dentro de la facultad hay espacios donde se pueden realizar prácticas de trabajo iniciales. Trabajar y estudiar puede dilatar un poco la carrera, pero sirve de mucho recibir el título teniendo alguna experiencia laboral", concluyó.