Una nueva conciencia escolar sobre el medioambiente

¿Cómo discutir el cambio climático en la escuela?

Para el Lic. Juan M. Giuranacci, educador y capacitador docente, las ciencias naturales deberían tener una relación más estrecha con las ciencias sociales para que los alumnos empiecen a entender qué es el cambio climático.

Luciano Andreychuk

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En el marco del ciclo de conferencias “Cambio climático, ¿todavía podemos hacer algo?”, organizado por la Fundación Hábitat y Desarrollo, días atrás se realizó el tercer encuentro en el que disertó Juan Manuel Giuranacci, quien es licenciado en Gestión Educativa, profesor de enseñanza de Nivel Inicial y Primario y capacitador docente. Los ejes temáticos de su exposición giraron en torno al compromiso de enseñar ciencias, la escuela y la globalización en América Latina, el reencuentro entre política y pedagogía y el cambio climático en la educación argentina.

En diálogo con El Litoral, Giuranacci se refirió a las dificultades con que se encuentran los docentes al momento de promover el interés en las ciencias, por un lado, y al tratar problemáticas relacionadas con el medioambiente —el calentamiento global y el cambio climático, etcétera—, por el otro. “El principal escollo que tienen que sortear los educadores es la falta de capacitación. Creo que es fundamental empezar a integrar las ciencias sociales con las naturales, y que estas últimas dejen de ser un mero cúmulo de conocimientos técnicos. La integración entre estas dos áreas permitiría que tanto los chicos como los adultos podamos empezar a tomar conciencia sobre las problemáticas ambientales que afectan al planeta”, destacó.

“A pesar de la falta de formación y los retrasos en la actualización de las currículas, el docente es muy capaz, tiene inventiva y muchas veces sacan de la galera estrategias para superar las dificultades y poder enseñar”, señaló Giuranacci. Por otro lado, “los soportes tecnológicos para la enseñanza no están disponibles, y en los pocos casos en que sí están, a los docentes les falta conocimiento para usarlos. Por ejemplo, el uso de filminas: con este recurso de enseñanza los chicos se enganchan mucho, pero esos recursos no siempre están disponibles, y si están, no se sabe cómo y cuándo utilizarlos. Muchas veces se necesita contratar a un capacitador para que enseñe a los maestros cómo utilizar correctamente soportes multimediales para las clases, pero no hay dinero en las escuelas públicas para pagar esa capacitación”, sostuvo.

Escuela y cambio climático

Consultado sobre las acciones político-institucionales y las estrategias pedagógicas que se deberían implementar para introducir en la escuela la problemática del cambio climático, el especialista afirmó: “Lo primero es que el docente sepa pararse sobre una teoría pedagógica, en el lugar de la crítica. Después, hay que tener en cuenta que la política es el sistema organizacional de un Estado para mejorar la educación, y que la dificultad está en que hay políticas educativas que están fuera de lugar con respecto a la concientización sobre las problemáticas ambientales. Habría que revisar esto”.

—La nueva Ley Nacional de Educación, ¿podrá facilitar la introducción de la problemática del cambio climático en la escuela?

—Creo que toda ley debe estar sustentada en un proyecto de país, pero, lamentablemente, nuestras normas en las últimas décadas nunca estuvieron enmarcadas en un plan de desarrollo nacional. Con respecto a la nueva ley de educación, las palabras están muy lindas, los conceptos muy bien redactados, pero considero que las políticas educativas deben hacerse desde sus ejecutores, desde los docentes mismos. Para esta ley, por ejemplo, no hubo participación plural de los propios maestros. Más allá de que, en su letra, la nueva ley nacional parezca progresista, el verdadero progreso estará en buscar modelos autónomos. Cuando empecemos a incluir en el debate a todos los actores de la educación, principalmente los docentes, podremos mejorar nuestro sistema educativo.

Para Giuranacci, “el principal escollo que deben sortear los educadores al momento de enseñar ciencias naturales es la falta de capacitación”.

Foto: Luis Cetraro

“Cuántas veces vemos, por ejemplo en el caso de las papeleras, los desmontes y la tala de árboles, cómo se limita la concientización sobre las problemáticas del medioambiente en la escuela. Las limitaciones también aparecen en un sistema educativo que no siempre trata de propiciar la libertad del conocimiento, sino todo lo contrario: el saber termina siendo estanco y muy técnico”.

Juan M. Giuranacci

Profesor y capacitador docente