Obama renuncia a instalar un
escudo antimisiles en Europa
El Pentágono confirmó que habrá un “importante ajuste” al plan antimisiles de Estados Unidos en la región.
Obama renuncia a instalar un
escudo antimisiles en Europa
El Pentágono confirmó que habrá un “importante ajuste” al plan antimisiles de Estados Unidos en la región.
Se lo comunicó telefónicamente al presidente de República Checa
Télam-AFP-EFE
El presidente estadounidense Barack Obama reveló hoy un nuevo enfoque de defensa antimisiles en Europa, al advertir que el programa balístico iraní seguía siendo una amenaza.
“Este nuevo enfoque brindará una capacidad más rápida, cimentada en sistemas probados y ofrece mayores defensas contra la amenaza de ataques de misiles que el programa de defensa de misiles europeo de 2007”, dijo Obama.
“Nuestro foco claro y consistente ha sido la amenaza presentada por el programa de misiles balísticos de Irán y continúa siéndolo junto con la base del programa que estamos anunciando hoy”, agregó en una breve declaración pública.
El primer ministro checo, Jan Fischer, había anunciado más temprano que Obama abandonó los planes de su país de instalar un escudo antimisiles en República Checa y Polonia al que Rusia se oponía.
El premier Fischer dijo a periodistas en Praga que Obama lo llamó por teléfono para anunciarle su decisión de no instalar un sistema de radar en República Checa y 10 misiles interceptores en Polonia.
El nuevo secretario general de la Otan, Anders Fogh Rasmussen, calificó de “paso positivo” la decisión de Obama, que según analistas aumenta las chances de que Rusia coopere más con Estados Unidos en la disputa por el programa nuclear de Irán.
El plan había sido propuesto por el ex presidente estadounidense George W. Bush, que decía que el escudo era vital para hacer frente a la amenaza de Irán y otros países, pero el Kremlin veía con recelo la presencia de misiles tan cerca de su territorio.
Fischer dijo que el presidente estadounidense lo llamó anoche y le dijo que “su gobierno abandona los planes de construir un sistema de radar antimisiles en suelo checo”. “Igual pasó con Polonia que fue informada del mismo modo sobre esta intención”, agregó el premier checo, citado por la agencia de noticias DPA.
“Acertada”
“La decisión del presidente de Estados Unidos ha sido acertada”, dijo Konstantin Kosachev, el influyente presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Duma, la Cámara baja del Parlamento ruso. “Refleja la comprensión de que ninguna medida de seguridad puede tomarse exclusivamente sobre la base de una Nación”, agregó.
Fischer dijo que Obama le aseguró que la “cooperación estratégica” entre sus países continuará, y que Washington considera a los checos como uno de sus principales aliados.
El premier agregó que luego de una revisión de los planes sobre el sistema de defensa antimisiles, Estados Unidos concluyó que la amenaza de ataques con misiles de corto y mediano alcance es hoy mayor que la de proyectiles de largo alcance.
El gobierno polaco declinó confirmar los comentarios de Fischer y dijo que esperaba un anuncio formal por parte de Estados Unidos.
Obama asumió indeciso sobre si seguir adelante con el escudo y dijo que iba a revisar los planes.
Alexei Arbatov, director del Centro para la Seguridad Internacional de la Academia Rusa de Ciencia, dijo a una radio de Moscú que Washington cedió con el escudo para lograr mayor colaboración de Rusia respecto de Irán.
“Estados Unidos calcula que abandonando el sistema de defensa antimisiles o posponiéndolo a un futuro lejano, Rusia se inclinará a unirse a Estados Unidos y a adoptar una línea más dura respecto de sanciones contra Irán”, dijo Arbatov, citado por la cadena CNN.
El secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, convocó una conferencia de prensa para hoy en Washington en la que se espera un anuncio formal sobre el escudo.
La conferencia de prensa será dada por Gates y por un militar, el general James Cartwright, uno de los principales expertos en sistema de defensa antimisiles.
“Ajustes” dice el Pentágono
El Pentágono anunció hoy que el gobierno de Estados Unidos está realizando un “importante ajuste” al plan de defensa antimisiles que auspició la Administración de George W. Bush y que provocó importantes tensiones con Rusia.
Un portavoz del Pentágono, Geoff Morrell, dijo hoy que se ha cambiado de planes para proteger mejor a las fuerzas de Estados Unidos en Europa y a sus aliados de potenciales ataques con misiles de Irán.
El Pentágono agregó que el cambio de planes se debe en parte a que se ha comprobado que Irán no ha realizado grandes avances en el desarrollo de misiles de largo alcance que fue la causa de que Washington iniciara este proyecto.
De momento, según distintas fuentes, la revisión del proyecto no ha concluido.
El vicepresidente Joseph Biden, que se encuentra de visita en Bandag, en declaraciones a la CNN se limitó hoy a decir que no piensa que Irán sea una amenaza inmediata para Estados Unidos y sus aliados.
La falta de avance iraní en el desarrollo de misiles de largo alcance supuestamente reduce la amenaza de Teherán tanto sobre Estados Unidos como sobre las principales capitales europeas.
Según publica hoy el diario The Wall Street Journal, la próxima semana concluirá la revisión del expediente que fue ordenada por el presidente estadounidense.
En una breve declaración a la prensa, el presidente de Estados Unidos dijo que habrá un “nuevo enfoque” sobre la posibilidad de un sistema antimisiles en Europa.
Foto: AGENCIA AFP
El fracasado proyecto
El escudo antimisiles en Europa central impulsado por el anterior presidente estadounidense, George W. Bush, y suspendido ahora por EE.UU., tenía como objetivo proteger a Europa de posibles ataques balísticos del llamado “Eje del Mal”, principalmente de Irán.
Los planes estadounidenses preveían la instalación de un potente radar en la República Checa, así como de diez misiles de interceptación en la vecina Polonia. El asunto causó un enfriamiento de las relaciones entre Estados Unidos y Rusia, que dijo sentirse amenazado por la instalación del escudo en el territorio de dos de sus ex satélites comunistas.
Como consecuencia, las autoridades rusas suspendieron unilateralmente a finales de 2007 la aplicación del Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (Face).
A pesar de los roces con Rusia, el gobierno estadounidense siguió adelante con el escudo y logró incluso el apoyo de la Otan, cuya cumbre presidencial de Bucarest en abril 2008 dio su apoyo oficial al proyecto. Las instalaciones en Europa iban a formar parte del sistema defensivo contra misiles, denominado National Missile Defense (NMD).
Se trataba de un complejo entramado de comunicaciones, radares y cohetes que, según las previsiones del Pentágono, se encargaría de detectar y destruir en vuelo cualquier misil o conjunto de misiles lanzados contra Estados Unidos.
El programa tenía un costo estimado superior a los 20.000 millones de dólares entre las tres etapas de que constaba, desde 1998 a 2015.
El proyecto nació en 1996 durante la Administración de Bill Clinton, pero ésta dejó en manos de su sucesora la puesta en marcha por los cuantiosos gastos que conllevaba su investigación y desarrollo.
La idea de contar con un escudo que hiciera invulnerable a EE.UU. de supuestos ataques nucleares comenzó, sin embargo, en la década de los años ochenta, con el proyecto de “guerra de las galaxias” del presidente norteamericano Ronald Reagan.
Rusia niega acuerdo
Rusia negó hoy cualquier tipo de acuerdo secreto con Estados Unidos a cambio de que Washington modifique su posición sobre el escudo antimisiles en Europa Central, dijo un portavoz de la Cancillería.
“Algunos medios aseguran que hay un supuesto acuerdo sobre el escudo antimisiles”, afirmó el portavoz Andrei Nesterenko a la prensa. “Puedo decirles que ello no se corresponde con nuestra política ni con la forma de abordar cualquier tipo de problemas con cualquier país... Se trata de meras conjeturas”, añadió.
/// EL DATO
Cambio de estrategia
El proyecto auspiciado por George W. Bush causó el rechazo y la ira del Kremlin que lo consideró una amenaza a su sistema balístico intercontinental, pese a los desmentidos norteamericanos.
La actual administración estadounidense apunta como amenaza más inmediata para los aliados europeos los sistemas balístico de corto y medio alcance iraní, por lo que Washington decidirá un cambio en favor del desarrollo de un sistema defensivo regional para el continente europeo.
Los críticos aseguran en cambio que la decisión es un gesto para lograr la cooperación rusa en la obtención de nuevas sanciones contra el régimen iraní si Teherán no abandona su programa nuclear.
/// la clave