Primer día del nuevo paro en otro capítulo del conflicto docente
Malestar y reclamos en un día de aulas vacías
Desde Amsafe La Capital -que se movilizó en la Región IV para reclamar por el estado de edificios escolares- se afirmó que la huelga de hoy tuvo un “altísimo acatamiento”. En las escuelas públicas de la ciudad, silencio y ausencia; en las privadas, adhesión dispar.
La movilización de Amsafe La Capital, frente al edificio de la Región IV, tuvo una importante convocatoria. Allí el gremio reclamó por mejores condiciones para los edificios escolares.
Foto: Néstor Gallegos
De la redacción de El Litoral
“Hoy no vino nadie”, se sinceró María Biondi, directora de la escuela primaria Luis M. Drago. Allí el silencio era casi total, a no ser por la charla circunstancial de algunas porteras que trabajaban sin apuro. El impacto del primer día de los dos paros de 48 horas dispuesto por Amsafe, UDA y Sadop -para ésta y la próxima semana-, pareció ser reafirmado con la sentenciosa ausencia de los planteles docentes y los guardapolvos blancos, al menos en las escuelas públicas.
Como en la Drago, la adhesión en la escuela Sgto. Cabral fue “total”. Lo absoluto no dejó margen a relatividades: “Es total”, enfatizó a El Litoral la directora del establecimiento. Y admitió que la dilación del conflicto docente “nos apena a todos. El año había empezado bien, nos daban expectativas. Se lograron algunas cosas importantes. Pero la relación del gobierno con los gremios se fue tensando, sobre todo por el tema salarial”. El salario docente, piedra en el zapato de las finanzas del Estado provincial.
La instantánea de estas dos escuelas públicas fue similar a otras del norte y de la periferia de la ciudad. Silencio, candados en las puertas de las aulas, más porteras con escurridores tratando de sacar el agua diluviada anoche sobre la ciudad. Nada de docentes ni de alumnos. Pero en las privadas la adhesión pareció dividida: en el Colegio Niño Jesús, de los Agustinos Recoletos, se escuchaba el bullicio escolar en horario de recreo. Había actividad escolar normal. Similar situación se vio en otros privados, sobre todo los céntricos (ver aparte).
Movilización
En la esquina de Avellaneda y Balcarce -en el edificio de la Región IV de Educación- una multitud de docentes acompañaba la convocatoria de movilización de Amsafe La Capital. Desde el improvisado escenario los oradores bramaban los sendos reclamos del sector, unificados en la ocasión en la situación edilicia de las escuelas.
Uno de los gremialistas fue leyendo una serie de historias escritas por los propios docentes y alumnos de escuelas con problemas edilicios, de los históricos y de los nuevos caídos en el infortunio: la Nº 16 de Rincón, la Combate de Quebracho, la Camila C. de Ballarini, entre muchas otras. Con cada nueva lectura, los presentes acompañaban con aplausos de apoyo, y también compasión. “Se olvidaron de las escuelas”, dijo de soslayo una maestra que pasaba entre el gentío.
Conflicto trancado
“La adhesión al paro de hoy de Amsafe es altísima, con un 99 % de acatamiento. Se están realizando distintas actividades en toda la provincia, reuniones de delegados, asambleas en las plazas o en las regionales. Es un paro activo sin concurrencia. Lo que se votó se está garantizado con el acompañamiento de la medida de fuerza”, afirmó a El Litoral Sonia Alesso, secretaria general de Amsafe.
“Nosotros esperamos una salida concreta. Pero se necesita abrir la paritaria para que se puedan retomar los distintos problemas a resolver, además del salario, que es central”, dijo Alesso y no olvidó de pasar lista: “El tema vivienda, el decreto de traslados, la infraestructura escolar, la cuestión previsional. Además, los concursos de media, técnica y adultos se siguen demorado. Esto agrava el malestar”, cerró.
