El Centro Galmozzi quiere recuperar la memoria de los emigrados cremascos.

Buscan a inmigrantes de la ciudad de Crema

El 3 de junio pasado se celebró el Día del Inmigrante Italiano, fecha elegida por el gobierno argentino porque se recuerda el día del nacimiento de Manuel Belgrano, hijo destacado de un inmigrante italiano y prócer argentino. (este año se cumplen 240 años del nacimiento).

La fecha es oportuna para dar a conocer los objetivos de una institución italiana, el Centro de Investigaciones Alfredo Galmozzi, de la ciudad de Crema, que está buscando a aquellos emigrados y sus descendientes que un día partieron de aquel pueblo de la Lombardía a nuestro país. Pretende recuperar la memoria de sus emigrados y de distintos hechos históricos que tienen que ver con esa ciudad.

Sus autoridades tomaron contacto con De Raíces y Abuelos para que, a través de nuestras páginas, se pudiera hacer este llamado a aquellos emigrantes italianos. Ocurre que este año tienen el propósito de trabajar con la inmigración cremasca porque no saben qué pasó con quienes partieron de esa ciudad por diversos motivos, fundamentalmente en tres grandes oleadas inmigratorias: a fines del 1800, después de la Primera Guerra Mundial y después de la Segunda Guerra Mundial.

Aseguraron que como es muy difícil hacer esta búsqueda desde la ciudad de origen porque no tienen elementos que los ayuden (únicamente cuentan con el archivo parroquial pero no saben cuál fue el destino final de aquellas familias) es que solicitaron la colaboración de nuestra publicación para encararla.

De esta manera, convocaron a instituciones italianas que puedan tener listas o nombres de los emigrados de esa ciudad o bien a las familias de los descendientes de cremascos para que brinden esta información. Sin embargo, saben de algunos contratiempos que podrán encontrar en el camino como, por ejemplo, que en muchas familias no se habla de este tema y, por este motivo, algunas sólo saben que tienen un antepasado italiano pero no saben de dónde ha venido.

Otro factor que les juega en contra es que Crema es una ciudad chica y por eso también es difícil realizar esta búsqueda. Hasta el momento, sólo saben que muchos cremascos fueron a Brasil, pero también ya identificaron algunos en Argentina, como en Concordia (Entre Ríos), Rosario (Santa Fe) y Aldo Bonzi (Buenos Aires). Por eso insisten en que, a través de nuestra sección, muchos podrían colaborar con esta búsqueda.

Lo ideal es que cada familia o institución aporte el nombre del emigrante y una fecha aproximada de nacimiento, para que pueda ser buscado en el archivo diocesano. Pero, si se sabe qué actividad desempeñó y se tienen algunas fotografías para facilitar, sería mucho más provechoso para la investigación que encara el Centro Galmozzi.

ALGO DE HISTORIA

Crema es una pequeña ciudad de la Lombardía italiana, surcada por numerosos cursos de agua. Se encuentra ubicada cerca de la zona montañosa y es una ciudad chica, muy agradable y bien cuidada.Tiene orígenes remotos e inciertos pero su existencia estaría documentada a partir del 1047.

Como en otras ciudades europeas se instauró en ella el feudalismo, il Comune y la Signoria. A lo largo de su historia sufrió el asedio de Barbarossa, la dominación de Venecia, de los franceses y del Imperio Austro-Húngaro. En 1861 cuando fue proclamado el reino de Italia bajo el dominio de los Saboya, llevando la capital a Torino, Crema formó parte de éste y desde entonces siguió unida a los destinos de Italia, participando en la vida política local y nacional. En 1870 Roma es reconocida como la capital de la Nación y, en 1889, Crema se convierte en capital de departamento, comprendiendo 53 comunas.

En Crema, el agua fue un elemento que favoreció el desarrollo de la agricultura y la ganadería. A fines del 800 había cursos de agua que mantenían una temperatura constante durante todo el año y por eso podía haber permanentemente pastos para el ganado, en especial vacuno, para obtener leche.

En el último siglo la economía se ha caracterizado por la producción de forrajes, cereales (sobre todo trigo) y álamos, y la agricultura (principalmente destinada al cultivo de lino y cáñamo) también se desarrolló en el contexto de la economía provincial. La actividad industrial estuvo vinculada también con el lino, y el cáñamo permitía la fabricación de papel y tejidos.

Hoy en día hay granjas lecheras y funcionan las principales empresas alimentarias en general, así como las industrias metalúrgica, mecánica y textil.

La industria también tomó impulso gracias a la fabricación artesanal de órganos, que alcanzó niveles de excelencia pero no están funcionando actualmente. Eran muy renombradas las fábricas de órganos iniciadas por Pacífico Inzoli en 1867 y Juan Tamburini en 1893, las que fabricaron este instrumento musical que luego se podían encontrar en muchas ciudades italianas y del extranjero.

Respecto a los lugares más significativos de Crema se pueden mencionar la Catedral, que tiene una fachada gótica que se denomina a viento, porque es plana; el Torraso, que tiene un león tallado de la época del dominio véneto; y las puertas de entrada a la ciudad (en algún momento fue una ciudad amurallada y se conservan las puertas: Serio y Ombriano).

Crema conserva algunos platos típicos, entre los que se cuentan -por ejemplo- los tortelli cremascos. Es una pasta que tiene forma de empanadita chica, pero lo particular es el relleno, que es dulce: pasas de uva, amaretis triturados, vino marsalla, y un bizcocho elaborado en la ciudad con especias. Estos tortelli se sirven sin salsa; sólo se le coloca manteca derretida, hojas de salvia y queso rallado. El plato dulce típico es la torta bertolina, que la hacen con uvas enteras, y la spongarda.

CENTRO GALMOZZI

Desarrolla una actividad de investigación, catalogación y archivo del material histórico en relación, especialmente, con el territorio cremasco. La adquisición de estas fuentes históricas se traduce, gracias a la contribución de colaboradores voluntarios, en publicaciones de libros y otras producciones multimediales.

Ofrece un amplio espacio dedicado además a iniciativas orientadas a promover la sensibilidad de los ciudadanos hacia la historia local.

Ha establecido una importante actividad de colaboración con las escuelas. De esta manera, los jóvenes pueden conocer y participar en los proyectos del Centro, enriqueciendo su propia experiencia escolar.

El Centro Ricerca Galmozzi, cuyo presidente es Felice Lopopolo, ha encarado este año una investigación orientada a conocer la emigración de Crema y de sus alrededores, es decir del cremasco, desde fines del 1800. En esa época la población era de unas 30.000 personas y ya han podido identificar alrededor de 1.000 nombres de emigrados. Tienen el propósito de reconstruir ese fenómeno social y recuperarlo para la memoria colectiva, encuadrado históricamente.

Es una tarea de investigación muy difícil porque desconocen, en general, el destino elegido por los cremascos y en ocasiones sólo han podido encontrar fragmentos de la vida de los emigrados, que querrían completar. Uno de estos es el caso de Domenico Uggetti, quien ingresó a la Argentina alrededor de 1913 -pero no hay certezas-, cuando tenía alrededor de 39 años. Era músico y compuso letras de tango en Buenos Aires pero murió probablemente en Santa Fe, en fecha desconocida.

El Centro tiene previsto trabajar con biografías de emigrados, artículos periodísticos que abordaron el tema de la emigración y la historia de la emigración Lombarda. La producción final será un libro y un video en el que se incluirán las entrevistas que se puedan realizar.

Cabe agregar que el pedido de información -como se dijo- está orientado a las asociaciones italianas en general y a las lombardas en particular, a los cremascos y a sus descendientes, quienes podrían aportar listas o nombres de emigrados cremascos, referencias sobre su vida, sobre las actividades que desarrollaron, fotos y fotocopias de documentos significativos (actas de matrimonio, nacimiento/bautismo de los hijos, defunción de los cremascos). También está incluida la posibilidad de que haya relatos orales basados en recuerdos conservados en las familias. Por este motivo se convoca a entidades italianas o descendientes de cremascos a responder a este pedido.

+info CONTACTO

Centro Galmozzi: en Internet: www.centroricercagalmozzi.it; e-mail (en castellano o italiano): [email protected] y [email protected] (Dra. Marita Desti, en español, colaboradora de la institución que también ayuda en el Archivo Histórico Diocesano); teléfono en Argentina: (0345) 421-6746.

La ciudad de Crema está ubicada en la Lombardía italiana.

Los descendientes de cremascos pueden brindar información sobre sus antepasados.

EDUCACIÓN Y CULTURA

En la ciudad de Crema fue muy cuidada la instrucción y la cultura. Para mediados del 1800, el sistema escolar masculino y femenino se convirtió en gratuito y obligatorio, lo que llevó a un cambio de hábitos de vida, determinado por las necesidades económicas.

Por este motivo, los niños que estaban empleados en los trabajos de los campos de los agricultores que los hospedaban debían ser obligatoriamente incluidos en la vida escolar.

En 1839, el palacio Vailati Bisleri, hoy Instituto Musical Folcioni, adquirido por la comuna, se convirtió en sede de la escuela elemental. Posteriormente, desde 1860 se establecieron las escuelas normal, técnica, el gimnasio, la escuela magistral, las nocturnas, el asilo infantil y la biblioteca comunal. La información se difundió también a través de los diarios locales.

En la actualidad, se siguen desarrollando variadas actividades educativas y culturales y, a pesar de que han cerrado algunas industrias por motivos propios de la situación general del país, Crema está empeñada en la recuperación económica y continúa siendo una ciudad muy activa y vivaz cultural y artísticamente, rica de pintores, escultores, arquitectos, escritores y poetas, algunos de los cuales adquirieron notoriedad más allá de los confines nacionales.

El Centro tiene previsto trabajar con biografías y artículos periodísticos que abordaron el tema de la emigración.