La experiencia del Área de Orientación Educativa de la UTN Santa Fe
Por una revisión actualizada
de las prácticas pedagógicas
La experiencia del Área de Orientación Educativa de la UTN Santa Fe
Por una revisión actualizada
de las prácticas pedagógicas
Un equipo interdisciplinario trabaja con los docentes de esa facultad para evaluar y mejorar las formas de enseñar en los primeros años de las ingenierías, donde la deserción más amenaza. Propuestas para reajustar las estrategias educativas y afianzar las didácticas.
La etapa estudiantil más compleja es el primer año de la universidad. En la UTN Santa Fe buscan mejorar las estrategias de enseñanza para facilitar la retención.
Foto: Archivo / Flavio Raina
Luciano Andreychuk
¿Cómo enseñan los profesores universitarios hoy? ¿Valiéndose de qué estrategias? ¿Parados desde cuál paradigma? Las metodologías de enseñanza ¿inciden directa o indirectamente en los índices de retención y deserción universitaria? Querer problematizar la enseñanza universitaria obliga a un sinnúmero de interrogantes, cuyas respuestas se hallan en el núcleo medular de la cuestión: la relación pedagógica docente-alumno.
Una experiencia educativa se propone llegar hasta ese lugar siempre complejo, abordando la cuestión de las didácticas y la revisión permanente de las prácticas de enseñanza: el Área de Orientación Educativa de la UTN Santa Fe. La misión de este equipo interdisciplinario es trabajar junto con los docentes para evaluar y mejorar las metodologías de enseñanza en los dos primeros años de las carreras de ingeniería, pues -como ocurre en casi todo el sistema universitario argentino- es allí donde se registran los mayores problemas de desgranamiento y deserción.
“Cada estadio del sistema educativo se basa en la culpabilización del nivel anterior: la universidad le echa la culpa a la escuela media, ésta a la primaria, ésta a preescolar y al jardín de infantes, y éste a los padres. Hay que romper con esto y pensar en cómo enseñamos aquí y ahora. Hay que revisar permanentemente las prácticas pedagógicas”, definió, entre la crítica y la propuesta constructiva, Alfonso Giménez Uribe, docente de esa casa e integrante del equipo.
Además de jornadas de capacitación para docentes, el área de la facultad regional ofrece tutorías para estudiantes, acompañamiento individualizado para atender aspectos personales -de tipo emocional o vocacional-, técnicas de estudio y planificación. El equipo busca apuntar también a algunas modalidades novedosas: “Empezar a observarnos las clases entre los propios docentes para destacar las fortalezas, pero también hacer notar las debilidades”, comentó Giménez.
“Más allá de la capacitación docente, consideramos importante el intercambio; que los docentes puedan relatar sus prácticas educativas, y ver cómo nosotros podemos intervenir y asistir desde la cuestión pedagógica. En concreto, se trata de ver cómo los conocimientos técnicos con que cuentan los docentes pueden ser comunicados, enseñados de la mejor manera a los alumnos”, agregó la Lic. Mariana Mansutti, integrante del área.
Simetrías y visibilización
¿Existen barreras pedagógicas que separan y ponen distancia entre el profesor universitario y el alumno del primer año? ¿Entre un profesional formado con un corpus de conocimiento sofisticado y complejo y un joven que recién sale de la euforia inocente de la secundaria? “La relación pedagógica docente-alumno, en cuanto a relación de igual a igual, tiene que tener una dimensión simétrica, siempre”, señaló el docente.
“Hay un desnivel en cuanto al conocimiento, claro: el docente sabe cosas que el alumno aún no. Pero nosotros decimos que la simetría entre el lugar de uno y otro se tiene que respetar. Lo que nos debe distinguir como docentes es el deseo y la honesta pretensión de que el otro aprenda. Uno no es docente porque le guste enseñar; uno es docente porque su deseo está situado en que el otro (el alumno) aprenda. El deseo de enseñar pasa a ser subsidiario”, definió el especialista.
Giménez y Mansutti coincidieron en la necesidad de visibilizar la figura del profesor: “En la medida en que se hace visible al alumno, y que éste siente que su docente está siempre presente a través de clases de consulta, o aun vía correo electrónico para evacuar una duda, se gana en cercanía pedagógica. Se trata de acortar las distancias entre uno y otro”.
Mansutti y Giménez, integrantes del Área de Orientación Educativa.
Foto: Mauricio Garín
El equipo
Los profesionales y docentes integrantes del Área de Orientación Educativa son: Dr. Alfonso Giménez Uribe (coordinador general); Ing. Gloria Alzugaray, Ing. Eva Casco, Ing. Romina Ferrando, Ing. César Ibáñez, Ing. Sonia Pastorelli, Ing. M. de los Milagros Rolón, Ing. Caterina Tuljack, Ing. Aldo Zanetta, Ing. Malva Alberto, Lic. Mariana Mansutti, Ms. Lucía Rodríguez Virasoro, Lic. Mariela Samoluk, Lic. Beatriz Spagni, Lic. Lara Zingaretti, Ms. Bergagna Dante, Tec. Martín Passadore.
/// el dato
Nuevas adolescencias
Los nuevos ingresantes no son ni parecidos a los que entraban a la facultad apenas 10 años atrás. El alumno de hoy llega con características muy particulares que hay que tener en cuenta. Eso también obliga a revisar las prácticas permanentemente, “una formación ajustada del docente, desde una mirada educativa”, explicó Mansutti. Para Giménez una de las claves pasa por “comprender las características de la sociedad actual, de las nuevas subjetividades y adolescencias. Esto requiere estrategias concretas de intervención pedagógica”.
/// LA CLAVE
Cronicidad, ese problema
Una tendencia actual muestra que muchos estudiantes avanzados de carreras de ingeniería son “captados” por empresas para ocupar puestos de trabajo, antes de culminar sus estudios. La demanda empresarial supera ampliamente la oferta de profesionales, y esto genera una cuestión de dos caras contrapuestas: por un lado, los chicos suman a su estudio una experiencia de trabajo; por el otro, los tiempos de egreso se dilatan en el tiempo. Y aquí aparece la llamada cronicidad. “Buscamos estrategias que nos permitan que ese estudiante en 7 años y medio u 8 egrese finalmente, con el plus de una experiencia laboral como ventaja”, afirmaron los integrantes del área.