Plantas transgénicas resistentes
a heladas, sequías y salinidad
Plantas transgénicas resistentes
a heladas, sequías y salinidad
EFE
Un grupo de expertos argentinos diseñó plantas transgénicas capaces de soportar heladas, sequías y la salinidad excesiva de los suelos, en busca de aplicar esta tecnología a la agricultura.
La capacidad de soportar condiciones climáticas extremas y salinidad está presente en un gen del girasol aislado por expertos del Instituto de Agrobiotecnología del Litoral (IAL) e implantado luego en plantas experimentales.
El resultado fue una nueva planta con su estructura genética modificada capaz de soportar las peores condiciones que pueden sufrir los cultivos extensivos.
El proyecto se lleva a cabo junto con la Comisión Nacional de Ciencia y Tecnología (Conicet) dentro de un programa que desde hace años apunta al desarrollo de girasol transgénico.
El Instituto de Biotecnología, que depende de la Universidad Nacional del Litoral argentino, ya había aislado y patentado el gen de girasol denominado HaHB4, que confiere a las plantas tolerancia a la sequía, la salinidad y el ataque de insectos.
Ahora aisló e implantó en cultivos experimentales otro gen, denominado HaFT, que agrega características de protección a las heladas.
“Otorga una marcada tolerancia a la congelación y además los beneficios de mejorar el comportamiento de las plantas frente a condiciones de sequía y salinidad”, indicó Raquel Chan, directora del proyecto.
Los resultados
“Los estudios básicos nos llevaron a ver que este gen intervenía en las vías de respuesta a las temperaturas de congelación y que, al introducirlo como transgen en otra planta, generaba una tolerancia a estas temperaturas por debajo de cero”, agregó.
El gen fue introducido en especímenes de Arabidopsis, planta cuya estructura genética poco compleja la hace ideal para la experimentación en biotecnología.
Los ejemplares modificados “sobreviven al tratamiento (de condiciones extremas) en un porcentaje mucho mayor que las no modificadas”, apuntó Chan al detallar que los experimentos se hicieron a temperaturas de 4 grados y -8 grados centígrados
“No son plantas que se puedan mantener congeladas, sino que toleran unas cuantas horas, algo similar a lo que ocurre en los campos durante las madrugadas en el invierno”, aclaró.
La investigadora dijo que ahora se afronta el desafío de que este adelanto biotecnológico se pueda aplicar al trigo, la soja y el maíz, cuyas estructuras genéticas son muy diferentes a las del modelo experimental.
“Sabemos que muchos de los mecanismos moleculares están conservados entre las plantas, como los de la respuesta al estrés, que es lo que nosotros estudiamos”, afirmó Chan en referencia a que los expertos son optimistas en lograr ese objetivo.
La Universidad del Litoral y el Conicet firmaron un convenio con la empresa inglesa Plant Bioscience Limited (PBL), que actúa como intermediaria para obtener financiación para el desarrollo de proyectos en biotecnología.
Biotecnología
Los estudios experimentales en laboratorio están a cargo del Instituto de Agrobiotecnología del Litoral (dependiente de la UNL) y el Conicet.
Foto: Archivo El Litoral