Disertó la vicepresidenta de la Sociedad de Medicina Antropológica
Disertó la vicepresidenta de la Sociedad de Medicina Antropológica
Apuestan a la práctica humanística de la medicina
El desarrollo tecnológico en la práctica médica es un tema que debate la Medicina Antropológica.
Foto: Archivo El Litoral
Una mirada integral del paciente, su dolencia y su contexto es la propuesta de esta corriente del pensamiento, que debería -sugirieron sus seguidores- enseñarse desde los primeros años de la carrera médica.
Mariana Rivera
“Observamos a la Medicina desde un lugar en donde todo necesita ser contenido: la salud de una persona desde el punto de vista científico, social, cultural, espiritual, en función del contexto en el cual se encuentra (laboral, familiar)”.
Así definió la Dra. Alicia Miranda, vicepresidenta de la Sociedad Argentina de Medicina Antropológica (Sama), a esta corriente holística de pensamiento sobre las personas, que incluye un alto valor ético.
La profesional estuvo en nuestra ciudad ofreciendo una charla sobre “Salud y medicina antropológica: fundamentos de la medicina antropológica”, realizada en el marco de los Seminarios 2010 de esa institución, dirigidos por el Dr. Francisco Maglio. Había sido organizada por ATE y el Servicio de Reumatología del hospital Cullen, que contó con la colaboración de la Escuela Superior de Sanidad Ramón Carrillo de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas de la UNL.
Tal como lo explicó en su conferencia -en la que participaron estudiantes de Medicina, enfermeros, médicos y pacientes-, “la Medicina Antropológica observa que la Medicina es para la persona, es integral; requiere ver ese cuerpo, su ideología, cómo esta persona sufre esa enfermedad o tiene dolor y cómo la padece. Podemos tener todos una misma enfermedad pero su circunstancia, su evolución y el acceso al tratamiento pueden ser totalmente diferentes”.
Asimismo, reseñó que “esta corriente de pensamiento tuvo su auge en la segunda década del siglo XX y en la década del 40, con grandes referentes y maestros. Era gente formada en una Medicina muy centrada en la persona, en lo semiológico, en la escucha del paciente, en la anamnesis”.
La profesional agregó que “es una visión muy ética de mirar la Medicina; es pensar que no sólo la hacen los médicos sino que hay un equipo: enfermeros, cuidadores, administrativos. El paciente puede llegar violentado a la consulta médica por la cantidad de trámites que tuvo que hacer, de los cuales son víctimas los propios empleados, frente a una burocracia que lo perturba frente a otros padecimientos”.
En tanto, aseguró que otros temas que se debaten en las sesiones científicas en la institución que ella integra incluyen gerenciamiento de la salud, mercantilización del medicamento, migraciones poblacionales y su relación con la salud, la xenofobia y su impacto sobre la salud de las personas, entre otros.
Accesibilidad e información
Por otra parte, la Dra. Miranda advirtió que “una variable inevitable para nosotros los médicos está muy atravesada por el desarrollo tecnológico, que es fabuloso pero nos puso en distancia con el cuerpo. Uno ve un paciente y siempre nos preguntan qué estudios les vamos a pedir o nosotros pensamos en eso, antes de cualquier otra apreciación. El paciente no entiende por qué uno no le pide una tomografía, una resonancia o marcadores, como ocurrió en casos similares con sus vecinos o amigos. A lo mejor hay que pedirlos, no decimos que no porque tienen una utilidad. Pero es importante que la comunidad acepte que a veces no necesita un estudio, lo que garantiza que otra persona pueda tener acceso a él”.
Al respecto, planteó que “los pacientes hoy acceden a información médica por los medios de comunicación (radio, televisión e Internet) y muchos se angustian porque escuchan esa información (sobre nuevos estudios) pero no saben cómo procesar ese dato y si ellos son candidatos a hacérselos. El desarrollo tecnológico tiene beneficios muy altos pero si no hay un análisis crítico y una racionalización del recurso también caemos en que a mayor tecnología mayor cantidad de recursos y menor accesibilidad”.
Y dio un ejemplo: “En un paciente como el cantante Gustavo Ceratti, si no hubiera el recurso tecnológico actual no podría seguir con vida. Hay que tener en cuenta que es una persona, que está viva, más allá de las posibilidades tecnológicas con que se cuenta gracias al avance científico importante. Además hay un contexto: la familia, el cuerpo médico que lo cuida, y ver si ese recurso está bien utilizado”.
Aprenderla desde temprano
Tras admitir que en algunas universidades del país la Medicina Antropológica está siendo tenido en cuenta, la Dra. Alicia Miranda sugirió que “hay que avanzar sobre implementarlo desde el inicio de la carrera, para que se den materias de orden humanístico, para poder llevar al terreno a la Medicina Antropológica. La idea es que cuando el alumno vaya a ver pacientes con sus docentes pueda hacer una observación mucho más amplia, no sólo preocupado por cómo palpar un hígado. Debe advertir que está viendo una persona, que tiene una dolencia, a la cual hay que palparle el hígado. El alumno en quinto año está impregnado de un pensamiento muy cientificista y hay que desestructurarlo si recién se le enseña esto a esta altura, ya que está marcado desde ese lugar”.
Al respecto, mencionó que “usamos mucho el arte y la literatura para que los alumnos se interioricen con la sensibilidad. Resulta una herramienta entretenida y se dan cuenta de que este tema es importante, tanto como saber que a cierta edad hay que pedirle estudios a los hombres por el tema de la próstata o a las mujeres para controlar sus mamas o lo ginecológico”.
Aspectos éticos
Por último, admitió que “hay mucha gente que lo enseña intuitivamente como todo aspecto ético. Mi generación tuvo la suerte de tener maestros, lo que hoy es muy difícil de tener. Hubo mucha gente interesada en la docencia, no desde el punto de vista curricular. Eran profesionales que entendían que la medicina tiene varios aspectos, como el asistencial puro y el docente (para otro más joven y para el paciente), entre otros. Esto es enfocar la salud desde un punto de vista integral”. Y agregó: “En el momento de la enfermedad la persona está muy vulnerada y nosotros no podemos avasallarla. Esto hay que enseñarlo, hablarlo. Debemos conversar con el paciente en un discurso que éste comprenda, mirar el estudio que se hizo con él, entre otros aspectos. Lo primero que hay que tener en cuenta en la comunicación con el paciente es su mirada durante la consulta médica”.
La Medicina Antropológica está centrada en la persona, en lo semiológico, en la escucha del paciente.
Foto: Archivo El Litoral
La Dra. Alicia Miranda disertó en nuestra ciudad sobre esta corriente de pensamiento que data de la segunda década del siglo XX.
Foto: Guillermo Di Salvatore
La Dra. Alicia Miranda
es médica internista. Tiene a su cargo la vicepresidencia de la Sociedad Argentina de Medicina Antropológica, es miembro de Número de la Academia Argentina de Ética de Medicina y docente universitaria de Ética en Medicina.
/// PERFIL
Más información
Sociedad Argentina de Medicina Antropológica:
www.sama.org.ar.