Hasta el 12 de noviembre está abierta la inscripción en las escuelas

Elección del secundario: sugieren dialogar y conciliar con los hijos

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La elección debe considerar el proyecto educativo que ofrece el colegio y las características y necesidades de los hijos.

Foto: Archivo

Lo primero es charlar en familia y aclarar cuáles son las expectativas y los aspectos prioritarios en cuanto a la elección del colegio. Especialistas sugieren elegir una escuela acorde con los valores y la formación que los padres quieran transmitir a sus hijos.

 

De la redacción de El Litoral

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Hasta el 12 de noviembre hay tiempo para anotarse al 1er año del ciclo lectivo 2011 en alguna escuela secundaria de la provincia. La elección del colegio de nivel medio es un momento difícil para un chico que con 12 ó 13 años termina el séptimo grado. Por eso, los especialistas sugieren el acompañamiento de los padres, charlar sobre las expectativas de sus hijos y conciliar con las propias.

¿Quién elige el colegio: el padre o el hijo? “Me animaría a decir que diez años atrás decidían unilateralmente los papás, mientras que hoy es una opción más compartida. Por el lado del chico, pesa más la escuela adonde irá la mayoría de sus amigos. Mientras que los papás, buscan prestigio, un proyecto institucional sólido, hacen otro tipo de evaluación del colegio”, destacó la psicopedagoga Mariela Cordero, que trabaja desde hace tiempo en el área de orientación vocacional de establecimientos medios.

La profesional añadió que ambas partes están en puja y que lo importante es construir ese “tercer espacio de convergencia” a través del diálogo, donde se expliciten las expectativas de padres e hijos y se llegue a un acuerdo.

Beatriz es una madre que dejó elegir a sus hijos los establecimientos secundarios donde continuar el proceso de enseñanza. La hija se inclinó por una escuela de arte y el varón por un industrial. “La decisión fue de ellos, claro que nosotros acompañamos y definimos un plan B por si no lograban ingresar a esas escuelas. De hecho, hoy seguimos chequeando cada tanto para comprobar si la decisión que tomaron fue la correcta”, adujo.

La doctora en Educación, María del Pilar Ruiz, opinó que “la elección del secundario es más una decisión de los padres que de los hijos, porque a los 12 años en general todavía son inmaduros y les cuesta definirse. Hay casos de chicos más preparados que otros, pero por lo común, a esa edad, no evalúan el proyecto educativo”.

Las psicopedagogas coincidieron en que el apoyo de los padres es fundamental. “Conciliar y apoyar, acompañar al joven a averiguar la información de la escuela pretendida, dialogar y comprenderlos. Esto significa escuchar los deseos del chico, pero también poner los límites como adultos”, remarcaron.

No es una decisión secundaria

En los hechos, a la hora de optar por la escuela secundaria inciden distintas variables según el caso. Algunos eligen el establecimiento por la cercanía al domicilio, otros porque es el colegio al que fueron sus padres, por la asistencia de los amigos, el prestigio de la institución o simplemente porque es el que pueden afrontar económicamente.

“Diría que muy pocas veces influye la orientación que ofrece ese secundario porque en cada uno de ellos generalmente hay varias modalidades”, destacó Ruiz, que se desempeña como docente y psicopedagoga de escuelas de la ciudad.

Los momentos de elección son siempre cruciales y más cuando se trata de una materia sensible como es la educación de los hijos. “Son situaciones álgidas, de choques, de confrontación, de idas y vueltas. Hace una década ese tránsito de la primaria al secundario no era tan traumático, en cambio hoy -por la gran cantidad de propuestas escolares, las diferentes terminalidades, la escuela media obligatoria- se convirtió en un punto de inflexión. Esto se suma a que el niño comienza a atravesar su propia crisis evolutiva con el ingreso a la adolescencia y la confrontación con los padres”, consideró Cordero.

Un colegio acorde

Las profesionales consultadas sostienen que deben brindarse los espacios necesarios dentro de las familias para orientar la elección. “Los padres deben tener en cuenta que el proyecto escolares coincida -en los valores, en lo religioso, en la formación como persona- con lo que la familia quiera transmitir a sus hijos. Eso habla de la coherencia, porque si vamos a defender un proyecto educativo, no podemos tener a la familia en contra”, fue la sugerencia de Ruiz.

Por su parte, Cordero aconsejó que los papás se interiocen en el proyecto educativo. “Todas las escuelas tienen valores y una organización que las define, así que sería bueno que los padres se acerquen a consultar, pregunten, recorran el establecimiento. La elección debe considerar siempre las características y necesidades del hijo. Es decir, que los papás se involucren y evalúen todos los aspectos”.


Bancos para todos

Por calendario escolar, hasta el 12 de noviembre se realizará la inscripción de los aspirantes a ingresar al 1er año de la escuela media en 2011.

Nora Reina, directora provincial de Educación Secundaria, señaló que existen algunos criterios generales establecidos por el Decreto Nº 181/09. Entre ellos, hay un orden de prioridades: primero, ingresan quienes han cursado en una escuela primaria que articula con ese secundario; luego, los aspirantes que tengan un parentesco con el plantel escolar; después, tienen prioridad los hermanos de alumnos que asisten a esa escuela.

Pasado ese criterio, si la cantidad de inscriptos supera las vacantes, se hace un sorteo general. Para los que no consiguieron un banco, entre el director escolar y el supervisor deben asegurarse de encontrarle un lugar en alguna otra institución. “Como el secundario es obligatorio, todos deben estar incluidos en el sistema”, destacó la funcionaria del Ministerio de Educación.

/// A tener en cuenta

Características de los hijos: la personalidad y el estilo de aprendizaje del hijo y sus necesidades. ¿Necesita la estructura de una escuela tradicional o prefiere explorar y tomar una participación más activa en su aprendizaje? ¿Podría beneficiarse con algún tipo de propuesta educativa alternativa? ¿Responde de forma diferente al estar en grupos grandes o pequeños? ¿Necesita un horario de jornada simple o es posible pensar en una jornada de mayor carga horaria? Por ejemplo, si un niño tiene un interés especial en la música o un idioma extranjero, quizás preferiría una escuela que ofrezca tales actividades.

Características de la familia y de la escuela: la elección de escuela dependerá de sus valores, además de consideraciones prácticas como el transporte y los gastos de cuotas si se trata de un colegio privado. Es importante que los padres puedan conocer la filosofía o misión de la escuela y reflexionar sobre la continuidad o no con la educación anteriormente elegida para el nivel primario. También deberán analizar la política disciplinaria de la escuela y los criterios de asignación de tareas o deberes y de la comunicación que se hace de las calificaciones.

Instalaciones escolares y recursos: otro aspecto importante es analizar qué recursos materiales y de infraestructura ofrece la escuela: ¿tiene una biblioteca bien equipada? ¿tiene un salón separado para almorzar? ¿tienen un espacio adecuado para educación física?

El prestigio: los padres podrían preguntar a amigos, vecinos, otros padres y referentes sobre el prestigio de la escuela en la que estén interesados.

La currícula: ¿Pone la escuela énfasis en la comprensión lectora y otros aspectos que Ud. considera esenciales? ¿Ofrece la inmersión en un segundo idioma? ¿Se ajusta el enfoque curricular a las expectativas y metas educativas que ustedes como padres tienen para su hijo? ¿Se ofrecen actividades extracurriculares?

Fuente: Lic. Alejandra Scialabba, co-autora del libro “Qué escuela quiero para mi hijo”.