RELEVAMIENTO DEL MINISTERIO DE SALUD
RELEVAMIENTO DEL MINISTERIO DE SALUD
Preocupa el aumento de la obesidad infantil en el territorio provincial
Las mediciones se realizaron en hospitales públicos y centros de salud. Un 32 % de chicos de 5 a 19 años tiene problemas de sobrepeso. La patología afecta a todos los sectores sociales.
De la Redacción de El Litoral
La obesidad y el sobrepeso infantil pasaron de ser patologías características de las regiones más “ricas” a convivir estrechamente con la pobreza. Es una enfermedad epidémica debido a la cantidad de casos en todo el mundo y particularmente en la Argentina, el país con los índices más altos de Latinoamérica -el 7,3 %, seguida por Brasil y Chile- en 2010, según reportó la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Santa Fe, lejos de estar aislado, empieza a ser un territorio crítico: el 32 % de la franja que va de 5 a los 19 años presenta inconvenientes de sobrepeso, mientras que entre los menores de 5 años un 24 % está en riesgo de obesidad, el 8 % tiene sobrepeso y el 3 % es obeso.
Estos datos surgen del estudio más reciente que se efectuó en la provincia, que es una encuesta antropométrica (ver gráfico) realizada entre octubre y noviembre de 2010 por la Dirección por la Salud en la Niñez, Adolescencia y Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud. Se midieron alrededor de 10.000 chicos que asistieron a hospitales públicos y centros de salud. El balance de esta población arroja una proporción elevada de niños y niñas de baja talla en edad temprana. Además, se registra una importante presencia de sobrepeso y obesidad en toda la población de niños, niñas y adolescentes.
Inclusive, en el hospital de niños Dr. Orlando Alassia de Santa Fe es la primera causa de las consultas anuales (el 56 %) en el Servicio de Endocrinología en la franja que va de los recién nacidos a los preadolescentes.
El sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud y se producen fundamentalmente por un desequilibrio energético entre calorías consumidas y gastadas (baja actividad física). La cifra más actualizada de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que el año pasado, alrededor de 43 millones de niños menores de cinco años tenían sobrepeso, repartidos de la siguiente manera: 35 millones en los países en desarrollo y 8 millones en las regiones desarrolladas.
“Es una enfermedad que no respeta clases sociales. Ahora vemos la misma prevalencia de esta problemática en los diferentes sectores. Es la obesidad en la pobreza, la cual desde el punto de vista de salud pública pasó a ser realmente muy preocupante”, explicó el Dr. Humberto Fain, pediatra especialista en Nutrición infantil y jefe del Servicio de Nutrición del Hospital de Niños Víctor Vilela de Rosario, consultado por El Litoral.
Problema emergente
Los especialistas locales apuntan a trabajar en forma interdisciplinaria y abordar la problemática cuanto antes. “Es una situación seria”, reiteró el Dr. Fain, asesor de la Dirección por la Salud en la Niñez, Adolescencia y Sexual y Reproductiva. “Los casos son cada vez más frecuentes. Si bien no se registran episodios extremos, algunos chicos aparecen con un sobrepeso importante”, agregó la doctora Raquel Cosiglia, directora del hospital de niños Dr. Orlando Alassia.
Milagros Ferrando es nutricionista infantil. En la misma sintonía que el resto aseguró que “en la primera consulta se advierten malos hábitos alimentarios, tanto por limitaciones en los gustos, desorden en las comidas o exceso de comidas chatarra, que son las que los chicos más consumen”.
Entre las consecuencias, ya se ven muchos casos de personas con resistencia a la insulina en edades muy tempranas. “La mayoría de los chicos que yo trato presentan esa característica, la cual si no se trata a tiempo termina en una diabetes tipo 2. Se ven cada vez más chicos con este tipo de diabetes, que es la conocida como diabetes no insulinodependiente. También se advierte mucho colesterol y triglicéridos en edades muy bajas”.
Por su parte, el doctor Javier Núñez, endocrinólogo del Hospital Alassia de Santa Fe, detalló los porcentajes que manejan en ese efector, en el cual por año ven aproximadamente 1.400 pacientes de los cuales, el 56 % (784), tiene problemas vinculados con exceso de peso. “Las atenciones van desde recién nacidos hasta los 15 años. La peor edad es el ingreso escolar. La mayoría presenta sobrepeso y el resto es obeso, aunque todavía no tenemos casos de diabetes. Hay muchos con resistencia a la insulina, otros con colesterol muy alto y algunos pocos con hipertensión”, comentó.
Legislación
El proyecto de adhesión provincial a la Ley de Obesidad -sancionada en 2008 en el Congreso Nacional- tiene media sanción en Diputados pero aún no se trató en el Senado. Son dos iniciativas vinculadas con la concientización en materia de salud alimentaria, fundamentalmente en el ámbito educativo, las que todavía requieren un análisis en profundidad. Sin embargo, actualmente se aplican los artículos 15 y 16, los cuales refieren la incorporación del tratamiento de los trastornos alimentarios al Programa Médico Obligatorio y la cobertura de las obras sociales.
Los números de Santa Fe
En 2010 se realizó una encuesta antropométrica en la provincia y se evaluó únicamente a chicos que asistieron a hospitales y centros de salud públicos, divididos en dos edades: menores de 5 años y de 5 a 19 años. Las personas encuestadas fueron 10.000 (aproximadamente).
2,6
millones
de personas mueren cada año producto del sobrepeso y la obesidad en todo el mundo.
En la etapa de la escuela primaria, está más marcado el problema, también en los primeros años de la secundaria. Cuando son un poquito más grandes aparecen algunos cambios aunque mínimos, porque las mamás a veces no saben cómo modificar esos hábitos”.
Milagros Ferrando
Nutricionista infantil
Santa Fe no está ajeno al crecimiento de la enfermedad en el país y el mundo. Lo que queda claro es que el problema de la obesidad infantil es serio. Se mantienen los porcentajes en lo referido a obesidad, sobrepeso y un nuevo parámetro, el riesgo de obesidad”.
Humberto Fain
Médico pediatra
Si no cambiamos la modalidad de planificar, este grave problema nos traerá graves consecuencias: diabetes infantil, dislipidemias, hipertensión, mayor recarga de los servicios sociales y de salud pública, y mayor consumo de medicación para enfermedades prevenibles”.
Elsa Olmedo
Lic. en Nutrición