Una obra emblemática para el patrimonio cultural y religioso local
Una obra emblemática para el patrimonio cultural y religioso local
Reunirán ideas para definir el edificio de la Catedral Nueva
La Universidad Católica convocará a sus docentes de Arquitectura para que propongan aportes sobre cómo debería quedar concluida la obra. Se busca respetar el proyecto original -de fines del siglo XIX-, pero adaptado a un concepto arquitectónico contemporáneo.
Vista panorámica de la catedral, con la ciudad a sus espaldas. Buscan reimpulsar el proyecto para concluir la obra.
Foto: Archivo El Litoral / José Vittori
De la redacción de El Litoral
En unos 15 días, la Facultad de Arquitectura de la Universidad Católica de Santa Fe (UCSF) convocará a sus docentes a que presenten ideas, reflexiones y propuestas que permitan pensar y proyectar, desde un punto de vista arquitectónico, el edificio de la Catedral Nueva. La convocatoria pretende darle un nuevo empuje al proyecto de continuación y finalización de esta obra inconclusa -fuertemente impulsado desde el Arzobispado santafesino-, emblemática para el patrimonio cultural y religioso de la ciudad.
La propuesta surgió tras la firma de un convenio de colaboración celebrado días atrás entre dicha casa de estudios y la Asociación Civil Pro Catedral Nueva. Formalizaron la rúbrica el Arzobispo de Santa Fe, Mons. José María Arancedo, el Pbro. Ricardo Colombo (de la parroquia Sagrado Corazón) y la presidenta del Directorio de la UCSF, Dra. Ruth Del Carmen Casabianca. A través de este convenio, la universidad comenzará a dar su aporte en la obra catedralicia.
El proyecto original del histórico emplazamiento -situado en 1º de Mayo, entre Tucumán y Primera Junta- es obra del arquitecto Juan Bautista Arnaldi y data del año 1896. La catedral nunca se concluyó, y en los últimos años el espacio se utilizó como anfiteatro para diversas actividades culturales. Desde hace tiempo, autoridades eclesiásticas locales, feligreses y actores sociales impulsan sostenidamente la finalización de la obra.
Con la firma de este convenio, ahora se pretende pensar y proyectar desde una mirada académica el diseño del edificio. “Nos convocaron para ver qué podíamos aportar. Para la facultad es muy importante participar de este proyecto. Consideramos que primero será necesario una instancia de reflexión, de indagación, de ideas sobre cómo encarar un proyecto edilicio de estas características, tanto desde el punto de vista técnico como conceptual”, explicó a El Litoral el Arq. Gustavo Giobando, decano de la facultad de Arquitectura de la UCSF.
La catedral es un proyecto edilicio concebido desde los paradigmas arquitectónicos del siglo XIX, y que se comenzó a ejecutar a principios del siglo XX. “Pero hoy estamos en 2011, lo cual nos pone ante un desafío: ¿Cómo hacemos para completar la obra respetando la intencionalidad del proyecto original, pero a su vez adecuándola a lo que significa construir una catedral hoy, con la contemporaneidad que implica una intervención de este tipo? Es una cuestión bastante compleja y difícil”, planteó el decano.
Modalidad
La convocatoria constituirá una primera instancia de conceptualización, reunión de ideas preliminares y reflexiones respecto al tema. Serán invitados los docentes de facultad, y se recibirá también el aporte de alumnos. “También se invitará a especialistas en la obra de arquitecto Arnaldi, y a entendidos en temas litúrgicos. Se conformarán equipos intercátedras de profesores -de distintas áreas de la arquitectura-, pues lo fundamental será mantener una visión interdisciplinaria”, dijo el decano.
Posteriormente, habrá una puesta en común de los resultados, a modo de presentación de avances de las ideas. Todo esto será monitoreado por una comisión de seguimiento que estará integrada por miembros de la asociación civil involucrada y autoridades de la UCSF. Se estima que toda esta primera instancia de ideas demandará unos dos meses. “Será una etapa de reflexión, discusión y confrontación de alternativas para definir la mejor manera de encarar el proyecto”, cerró Giobando.
Autoridades religiosas y académicas durante la firma del convenio.
Foto: Gentileza Prensa UCSF
Una definición
Para Giobando, “la obra de la Catedral Nueva es muy importante, y debe hacerse desde el respeto de la tradición patrimonial. Es necesario revalorizar estos espacios patrimoniales en la ciudad. Una de las dimensiones de la persona es la referida a la espiritualidad, y esta dimensión religiosa debe reflejarse desde los espacios físicos. En el caso de la catedral, hay que respetar el espíritu del proyecto original pero partiendo de una reflexión actualizada. De ahí la complejidad de este proyecto edilicio”.