Llegan cartas
Los que entregaron al cura Mugica
Juan Manuel Duarte. Catequista Villero
DNI 23.464.924
Señores directores: Hoy vi un afiche que mostraba la iconografía de la vieja revista Militancia, que saliera entre 1973 y principios de 1974. Curiosamente en su último número se entregó a Nuestro Padre Mugica a la sección “Cárcel del Pueblo”, llenándolo de improperios y atacándolo vilmente. Siempre me pregunté que habrá pasado por la cabeza del actual secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, al saber que el 29 de marzo de 1974 en el último número de Militancia, prácticamente le había dejado la cabeza del Padre Carlos Mugica al brujo López Rega servida en bandeja. Nobleza obliga, meses después hubo una autocrítica: ¡en la que se volvía a atacar al Padre Carlos! El otro director de Militancia era Rodolfo Ortega Peña, y curiosamente ambos eran amados por el Padre Carlos. El 1º de enero del 73, los dos habían ido a la Villa 31 a pedirle a Carlos Mugica que hiciera huelga de hambre contra el gobierno de Lanusse, en momentos que nadie sabía si Lanusse realmente permitiría las elecciones de marzo. Y El Padre Carlos, fiel a sus amigos, los atendió gustoso e hizo esa huelga. Catorce meses después, salía el último número de Militancia, ya amenazada por el brujo, pero con una fuerte crisis interna. La causa, según fuentes de la época, era “porque pegó muy duro en los cumpas que mandaran a Carlos a la Cárcel del Pueblo. El revuelo fue infernal”. Otra fuente primerísima de ese tiempo y de mucha cercanía con el ex presidente Kirchner fue más reveladora: “Duhalde es un mal bicho, no es amigo de nadie y nadie lo quiere, era capaz de vender a un amigo y más; en cambio Rodolfo era otra cosa, podías hablar con él, era intelectualmente brillante, pero meterse tan lleno en la Militancia lo nubló. Así se fue quedando solo”. Otros aseguran que “atrás estuvo metido Pepe Firmenich. Viejo, el 40% de la gente de Montoneros nos fuimos a la JP Lealtad, y casi todos, siguiendo a Carlos.
Lo tenían junado”. Esas fuentes aseguran que el primero en recibir esa Militancia fue López Rega. La Pasión del Padre Carlos Mugica había comenzado. Para colmo, el 1º de mayo se negó a irse de la Plaza y se peleó con gente de la Orga mientras el brujo, en el balcón, sonreía cínicamente sabiendo que su momento había llegado.