Sin exámenes ni actividades administrativas
Católica: sigue bloqueada y ya intervino la Justicia
Desde ayer, gremialistas del Soeme bloquearon el acceso a la institución educativa a empleados y alumnos, en reclamo de la participación en paritarias. Esta mañana se realizó una denuncia contra los ocupantes del acceso. La justicia correccional intervino en el conflicto.
En Facebook. Los alumnos comenzaban a expresar su incertidumbre y fastidio en la red social más popular. Muchos no pudieron rendir exámenes por el bloqueo gremial. Foto: Guillermo Di Salvatore
De la redacción de El Litoral
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El conflicto gremial en la Universidad Católica no tuvo tregua: miembros del Sindicato de Obreros y Empleados de la Educación y la Minoridad (Soeme), filiales Rosario y Santa Fe, continúan bloqueando la entrada de esa casa de estudios privada, sobre Echagüe al 7100. El rector Ricardo Rocchetti presentó esta mañana una denuncia judicial contra las personas que realiza el bloqueo en el acceso a la institución. Ello dio lugar a que intervenga la justicia correccional, y se conforme una comisión judicial -encabezada por la jueza de Instrucción Cuarta, Susana Luna, y el fiscal en turno-, constituida para entablar una charla con los promotores del bloqueo, con el objeto de disuardirlos a que depongan su actitud y permitan la entrada a la institución. Al cierre de la presente edición, se supo que la jueza se reunía con los gremialistas de la protesta en la seccional 8º.
De acuerdo a fuentes judiciales, la medida judicial está enmarcada en una confrontación de derechos. La jueza no cuestiona la legitimidad de la protesta, pero intenta mediar con los promotores del bloqueo para evitar que no se vulneren derechos de otras personas (el libre ingreso a la UCSF por parte de alumnos y empleados).
“Nosotros realizamos la denuncia en Fiscalía, porque esta medida de protesta afecta derechos constitucionales básicos, como el derecho a trabajar y a estudiar”, dijo Rocchetti a El Litoral. También esta mañana autoridades académicas se reunieron con el ministro de Seguridad, Álvaro Gaviola, para buscar una solución al conflicto. Luego de la reunión, se realizó la denuncia.
“Esperamos que nos dejen ingresar a la universidad. Si bien no cuestionamos el derecho a protestar, hay otros derechos individuales que están siendo vulnerados, como estudiar y trabajar”, insistió Rocchetti. Consultado sobre si cree el conflicto podría solucionarse por la vía del diálogo entre las partes, opinó: “Es difícil, porque lo que piden (desde Soeme) es de cumplimiento imposible. Nosotros tenemos firmado un convenio colectivo con otro gremio (Apuc). Por eso, lo que demanda Soeme es una cuestión inconducente”.
Cabe recordar que Soeme (sindicato nacional) exige al rectorado de la UCSF que nombre miembros paritarios para discutir salarios y condiciones laborales del personal no docente con ese gremio (se pide además que se firme un convenio colectivo de trabajo nacional). Pero desde la UCSF se desconoce a Soeme como interlocutor, porque históricamente se ha negociado con la Asociación del Personal de la UCSF (Apuc), entidad a la que está afiliada la mayoría de sus 150 trabajadores no docentes.
Rocchetti agregó que la postergación de exámenes (ni ayer ni hoy hubo actividades académicas en la universidad) se resolverá una vez que la situación se normalice. “Los alumnos deben estar tranquilos de que se reprogramarán las fechas, estas situaciones se resolverán”. No obstante, los estudiantes de esa universidad privada comenzaban a volcar expresiones de incertidumbre, fastidio y bronca en las redes sociales (ver foto).
Paritaria
Antes de la conocerse el curso de la denuncia judicial, José Vitola, secretario adjunto de Soeme (seccionales Santa Fe y Rosario), fue consultado por este diario. El gremialista ratificó la petición y aseguró que “el secretariado nacional (de Soeme) ha decretado que el bloqueo del ingreso a la UCSF se mantendrá hasta el 15 de diciembre, a menos que las autoridades académicas designen delegados para la participar en paritaria nacional, y así trasladar la discusión sobre salarios y condiciones laborales para el personal no docente al ámbito del Ministerio de Trabajo de la Nación”, dijo.
“Desde la UCSF siguen reconociendo la representatividad del gremio interno para el personal no docente (Apuc). Ahora nosotros tenemos la sospecha de que existe una complicidad entre la universidad con ese gremio. Tenemos la sospecha de que tercerizan trabajos, por encima de los derechos de los trabajadores no docentes”, dijo Vitola a este diario.
Consultado sobre si existe la posibilidad de levantar la medida extrema del bloqueo (para permitir la normalización de exámenes y otras actividades académicas) y buscar otro canal de protesta que habilite el diálogo sobre el conflicto gremial puntual, el gremialista dijo: “El canal de diálogo (de Soeme) está abierto, pero tienen que acercarse a hablar y llevar la discusión paritaria al Ministerio de Trabajo, algo que las autoridades de la UCSF no quieren hacer”.
Ahora se aguarda la resolución por la vía judicial de un conflicto que ya lleva largas semanas.
Atropello
Rómulo J. Crespo
No hay una explicación racional que justifique o ayude a entender la decisión de un grupo de dirigentes del Sindicato de Obreros y Empleados de la Educación y la Minoridad (Soeme) de bloquear el acceso a la sede de la Universidad Católica de Santa Fe. La excusa es una pretendida incorporación al gremio de los trabajadores no docentes de esa casa de estudios, incorporación que es resistida por los propios trabajadores que ya están afiliados a otro gremio (Apuc). En cualquier caso, el fin -hasta suponiéndolo legítimo- no justifica los medios. Sin eufemismos: esto es un vulgar atropello que deja más perjuicios que beneficios.
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Informamos que la UCSF (sede Santa Fe) continúa bloqueada y por lo tanto, las actividades académicas y administrativas permanecen transitoriamente suspendidas. Se arbitrarán las medidas para que las mismas sean reprogramadas a fin de que puedan recuperarse adecuadamente”.
Comunicado de la UCSF