¿Se podrá hacer productiva una región devastada?
¿Se podrá hacer productiva una región devastada?
Recuperación ambiental para los Bajos
Típica postal de los bajos. La fotografía fue tomada en un campo cercano a la localidad de Tostado.
Foto: Archivo El Litoral
Eloy Rodríguez
Los bajos son una depresión limitada por los Domos Oriental y Occidental y al norte el llamado Dorsal Agrícola de Charata (Chaco). Al oeste de este dorsal existe una importante depresión desde Gancedo y La Paloma hasta Chorotis. Ésta, los domos, el Dorsal y el Río Salado, constituyen los aportes hídricos. Otra ubicación sería: al N, las Rutas Nacionales 96 y 16; al O el tramo ferroviario General Pinedo Santa Fe (hasta el paralelo 30º), con dos apófisis en Santiago del Estero: la cuenca del Río Salado (hasta Añatuya) y la cuenca de la Cañada Los Saladillos; al sur el paralelo 30º y al este el Río Paraná.
Un estudio integral efectuado por los gobiernos de Santa Fe (Sylvestre Begnis); Chaco (Bittel) y Santiago del Estero (Juárez), en el período 1973/75, determinó la realización de trabajos para equilibrar el sistema, con un plazo de ejecución de 12 meses, a partir de agosto/74 y las siguientes inversiones: 30% el CFI; 30% el I.N.C.y T.H. y 40% las tres provincias (Santa Fe 54,92%; Chaco 32,89% y Santiago del Estero 12,19%). ¡Pasaron 38 años!
Hidrografía superficial
El norte santafesino es el desagüe natural (obligado) del sistema, por el Río Salado o por el Paraná y recibe las lluvias más los aportes vecinos, a través de las Cañadas de las Víboras y Rica y los esteros El Sábalo y Cocherek. Este último desagua hacia el Paraná por medio de los arroyos Amores, Las Garzas y El rey o hacia los Arroyos Golondrinas, La Sarnosita, Calchaquí y el Río Salado.
También adquiere importancia el Río Tapenagá que nace al noroeste de Machagay, Chaco, y desemboca en el Paraná, al sur del paralelo 28, luego de unirse al Saladillo. Su cuenca es un triángulo con vértices en Tres Isletas y Sáenz Peña. El norte de la cuenca es netamente agrícola y su parte baja es ganadera.
Aguas subterráneas
Existen dos tipos: las freáticas y las confinadas. Las primeras, relacionadas con las inundaciones, se encuentran entre 3 a 20 metros de profundidad, según el régimen pluvial, son de poco rendimiento, alto contenido salino y exigua permeabilidad por la presión de los terrenos supra adyacentes y la escasa pendiente. Las excavaciones en cauces de “ríos muertos” obtienen, generalmente, agua de buena calidad y rendimiento por existir una mejor recarga de los acuíferos.
Localmente se podrían encontrar lentes de agua dulce suspendidos en aguas saladas, que pueden usarse con fines ganaderos o para consumo de pequeñas poblaciones, haciendo un manejo adecuado y mejorando la infiltración.
Equilibrio original y modificación escénica por anarquía de canales
El escenario original disipaba el agua mediante la intercepción y la evapo-transpiración a través de los bosques y montes chaqueños y almacenaba en áreas bajas, de ahí el nombre (esteros, lagunas y cañadas), con suelos frágiles, por la gran salinidad, en la región santafesina.
El desequilibrio data de 40 años, cuando la gran expansión agropecuaria produce una reconversión geográfica acompañada por un cambio climático que ocasiona el anegamiento de grandes superficies. El brusco desmonte elimina la disipación chaqueña y Santa Fe, alarmada por el lento escurrimiento, no almacena sino que provoca el drenaje a través de la ejecución de una anarquía de canales originada por la sumatoria de los excesos, agravada por la sedimentación y por la no retención del agua dulce (es lo primero que escurre).
Plan de recuperación
Para intentar la recuperación de la región habrá que tener en cuenta:
1) El manejo del agua: Según el estudio de 1973, “las peculiares condiciones morfológicas y edafológicas de los Bajos; la hidrografía e hidrogeología y la particular distribución de las lluvias en el tiempo, requieren un estudio integral mediante equipos interdisciplinarios”.
Roberto Marano, investigador y docente en Ciencias Agrarias de la UNL afirma que “para que infiltre el agua se necesitan lluvias seguidas de baja intensidad y cultivos que aumenten la rugosidad del terreno (maíz, sorgo o vegetación nativa)”.
Habrá que equilibrar las cuencas, fijando el lugar de entrada del agua, la magnitud y la descarga final, compatibilizar con los drenajes locales, obteniendo el máximo equilibrio posible entre cuencas superiores y receptoras de excedentes.
“Siembra” y “cosecha” de agua, son materias pendientes. Por ejemplo, en los últimos meses de 2009 y enero de 2010, precipitaron 540 mm., sin prever “guardar” agua ante la seca invernal. Represas estratégicamente ubicadas pueden permitir la recarga por gravedad o inducción.
Habrá que preparar la zona de captación e influencia de los pozos, raspar los fondos si están secos para acelerar la infiltración, limpiar las cunetas, arar el predio involucrado y alambrarlo, evitando que el “pisoteo” de la hacienda lo impermeabilice, practicar inyecciones forzadas de agua dulce y otras tareas.
2) El ordenamiento territorial evitará que haya zonas sobrecargadas que resquebrajen la relación cantidad de animales-superficie ocupada. El Ing. Hugo Terré, planteó que “la provincia, a través de una cartografía jurisdiccional (mapa de aguas) debiera darle a cada comuna la herramienta para asesorar al ganadero sobre la cantidad de animales que pueden cargar los campos, de acuerdo a la capacidad y calidad del agua, e informarle sobre la existencia y características de los recursos acuíferos, para que el inversor pueda medir los riesgos del negocio y hasta se podría planificar algún tipo de seguro”
3) Infraestructura vial: Las rutas deberán mantenerse transitables para poder sacar la producción. Son vitales las rutas transversales 30, 31, 32, 40 y 98 y las de sentido norte-sur: 35 (límite con Santiago del Estero); 91, 77, 95, 13 (límite con Vera) y 3 hasta Chaco.
Objetivo final
Este proyecto integral provocaría: 1º) un aumento considerable del stock ganadero, 2º) una mayor zona cultivable de algodón, girasol, maíz, soja, sorgo y trigo, 3º) el aprovechamiento del futuro puente Reconquista-Goya y la hidrovía Brasil, Paraguay, Argentina y 4º) la generación de mayores ingresos por el incremento de las exportaciones más la tributación impositiva a cargo del sector rural.
Según Terré, “el sistema productivo debe surgir de un equipo multidisciplinario, que planteé en julio de 2009, integrado por quienes hayan convivido con la problemática y estén en contacto con el medio. La provincia no cuenta con un equipo de estas características. Habrá que compatibilizar la producción con el medio ambiente; disminuir los riesgos, los índices de NBI; efectuar el ordenamiento territorial y evitar que perduren las emergencias”.
La lección de la naturaleza lleva casi medio siglo. Se escurrieron más de 20 inundaciones y ahora hace falta el agua. No haber aprendido es inexplicable.
En la imagen se puede observar demarcado el corazón de los bajos submeridionales de la provincia de Santa Fe.