Para determinar las zonas expuestas al vector transmisor de la enfermedad
Dengue: buscan larvas del mosquito
Agentes en el campo. En la primera casa que relevaron en Guadalupe, Tatiana y María Belén extrajeron de un balde larvas de mosquitos. También tomaron los datos del domicilio y dieron las recomendaciones de prevención a la propietaria.
Foto: Mauricio Garín
Alumnos de la escuela de Medicina de la UNL recorrieron 38 puntos de distintos barrios de la ciudad y tomaron muestras de agua de distintos recipientes. Posteriormente, se confeccionará el índice larvario.
De la Redacción de El Litoral
Alumnos de tercer año de la escuela de Medicina de la UNL recorrieron 38 puntos en distintos barrios de la ciudad en busca de larvas de mosquitos. El objetivo del relevamiento es calcular el índice larvario de la especie Aedes Aegypti que trasmite el virus del dengue, determinar la situación general y las zonas más expuestas al vector transmisor de la enfermedad.
La iniciativa fue organizada de forma conjunta por la Secretaría de Salud de la Municipalidad, el programa de Zoonosis y Prevención de la Salud del Ministerio de Salud de la provincia y la Facultad de Ciencias Médicas. La misma se llevará a cabo únicamente durante el día de hoy desde la mañana y hasta las 16, para lo que se afectó a un grupo de 188 estudiantes con conocimientos básicos en atención primaria de la salud, que a su vez tendrán que brindar recomendaciones a los vecinos que visiten sobre las medidas que deben tener en cuenta para evitar la proliferación de larvas.
Los estudiantes que realizaron el recorrido de a dos, fueron munidos de un kit con tubo de ensayo y pipetas y previamente recibieron capacitación sobre el procedimiento a seguir para obtener las muestras en los fondos de las casas, particularmente de tachos o baldes con agua estancada o recipientes similares.
“Las viviendas a visitar se seleccionan por manzanas de manera aleatoria para tomar las muestras y también se promociona el descacharrado de los patios a modo de prevención”, explicó Soledad Jauregui, coordinadora de la sala de situación de Salud de la Municipalidad y docente de la carrera de Medicina.
Recomendaciones
La importancia de la descacharrización radica en que al eliminar los reservorios de agua, se evita la reproducción de los mosquitos en general y particularmente, los transmisores del dengue por lo que también resulta la manera más efectiva de prevenir la enfermedad. En ese sentido, el secretario de Salud de la Municipalidad, Mario Drisun aclaró que “el hecho de que efectivamente se encuentren larvas y mosquitos no significa que haya dengue porque para tal caso los insectos deberían estar infectados con el virus”.
Para eliminar los criaderos de los insectos, es aconsejable impedir que los recipientes en uso acumulen agua; cambiar con frecuencia el agua de floreros o reemplazarla con arena; mantener boca abajo los recipientes que no se utilicen y desechar los objetos inservibles capaces de acumular agua de lluvia como neumáticos viejos, latas, botellas, juguetes y frascos.
En forma complementaria a estas medidas, se aconseja utilizar telas mosquiteras, pastillas, repelentes y espirales de baja toxicidad.
Finalmente, en piletas y piletines que se encuentran al aire libre, es recomendable cepillar las paredes en el espacio que se encuentra entre el agua y el borde y usar larvicidas una vez por semana.
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