Culminó sus estudios gracias al programa Volver a la Universidad

Se recibió de ingeniero a los 60 años

Se recibió de ingeniero a los 60 añosFlamante ingeniero. Ángel Chavazza terminó su carrera universitaria a los 60 años, a través de un programa institucional que busca repatriar alumnos para que egresen. Foto: Gentileza Prensa UTN Santa Fe

Ángel Chavazza obtuvo el título de ingeniero eléctrico en la UTN local. Había abandonado la carrera en 1987. Y 25 años después, aprobó las últimas dos materias que tenía “colgadas”. Un ejemplo de querer y poder.

 

De la redacción de El Litoral

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Ángel Roberto Chavazza se convenció a sus 60 años de que nunca es tarde para saldar deudas pendientes. Aunque ya ha recorrido un buen trayecto de vida, al hombre le quedaba algo por terminar: recibirse de ingeniero eléctrico. Y llegó la oportunidad: empezó el Plan Volver a la Universidad que impulsa la UTN Santa Fe -destinado a “repatriar” alumnos que no concluyeron sus estudios y hacer que egresen- en mayo de 2011. Cursó a la par de los “pibes” de hoy. Rindió las últimas dos materias que le quedaban el año pasado, y llegó a la meta.

Ángel reconoce que la inconclusa carrera era una mochila que le pesaba mucho. “Casi sin advertirlo, había desarrollado una estrategia para obviar el problema: cuando debía pasar por la Costanera frente a la sede de la facultad regional, sin darme cuenta miraba hacia la laguna, es decir miraba para otro lado, quizás como una forma de no asumir el compromiso no terminado. Hasta que llegó la propuesta del programa, y me animé”, dice hoy con el título bajo el brazo, en diálogo con El Litoral.

Nació en Bandera (Santiago del Estero) pero es santafesino por adopción. Tiene esposa, dos hijos (“toda mi familia me apoyó mucho”, agradece), un nieto que ilumina sus días y un trabajo estable en la Dirección Provincial de Arquitectura e Ingeniería del Ministerio de Obras Públicas. Había comenzado el cursado de Ingeniería Eléctrica en 1979, en medio de una época turbulenta. Terminó el cursado y rindió materias hasta 1987. Después, por diversas razones, abandonó el estudio y se dedicó al trabajo y a la familia.

El tiempo fue pasando, y 25 años después, culminó su carrera. Debió volver a la facultad, cursar y rendir exámenes de las materias que le quedaban. “Volver a las aulas me hacía un cosquilleo, sobre todo por la recepción que tendría entre los muchachos que venían cursando y a los que de pronto se les aparece un ‘viejo’ que hace preguntas. Nada de eso fue problema”, afirma.

“Los compañeros de la clase me ayudaron mucho. Me informaban de los cambios de horarios, trabajos prácticos, etc. Por lo tanto me hicieron sentir muy cómodo”, cuenta Ángel. A la segunda clase me invitaban con mates -recuerda- y cuando salí del aula del examen final estaban todos esperando afuera y me recibieron con un aplauso. Reconozco que apenas pude agradecerles porque la emoción me cerró la garganta”, relata.

“En general nunca dejé de leer informes técnicos debido a mi trabajo, así que no me resultó difícil retomar la lectura de apuntes técnicos. Los docentes de la UTN me apoyaron mucho, suministrando información actualizada, dado que yo había cursado las materias mucho antes y necesitaba ponerme a ritmo de aula, sobre todo porque comencé a cursar con el ciclo lectivo comenzado”, afirma Chavazza.

“La carrera de Ingeniería Eléctrica siempre me gustó y me sigue gustando. Por razones de edad y de los destinos en que transitó mi vida, posiblemente no podré ejercerla como había pensado al iniciar la carrera hace muchos años. Pero ya encontraré la forma de devolver la inversión que hizo el Estado en mi formación”, concluye.

 

El dato

“Brillante idea”

  • Para Ángel Chavazza, “el Programa Volver a la Universidad fue una brillante idea de la conducción de la UTN local, dado que con algunas facilidades desde lo administrativo, permite culminar proyectos que habían quedado inconclusos por distintas razones”, resaltó.