Rige el marco laboral de derechos y obligaciones para la docencia superior
Rige el marco laboral de derechos y obligaciones para la docencia superior
Histórico: los universitarios ya tienen su convenio de trabajo
Una “bisagra”. La entrada en vigencia del Convenio Colectivo de Trabajo marca un momento clave para la docencia universitaria del país. Foto: Archivo El Litoral / Luis Cetraro
Luciano Andreychuk
Twitter: @landreychuk
Después de años de lucha y reclamos, finalmente se firmó la homologación del primer Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) nacional, único y de carácter obligatorio para los 150 mil docentes de las 54 universidades estatales del país. El CCT es una norma “madre”, el marco laboral que regulará los derechos y obligaciones para los profesores de todas las universidades, y que los rectorados deberán cumplir.
El CCT -que demandó 4 años de redacción y consensos- fue rubricado por la presidente de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner; el presidente del Consejo de Rectores (CIN) Ing. Jorge Calzoni, con la presencia de un grupo de rectores de universidades nacionales y de federaciones sindicales.
Calzoni destacó que la homologación del CCT “es un hecho muy importante en la historia de la educación argentina, ya que se concretó un derecho por el que los docentes universitarios venían peleando desde hace muchos años”.
“Es una bisagra. Hay un antes y después del CCT. Antes, las relaciones entre la docencia y las autoridades académicas eran unilaterales y administrativas. Cada universidad establecía las condiciones de trabajo, y no se garantizaba una estabilidad para el docente. Ahora, con el CCT ya vigente, esa relación será convencional y bilateral. Desde lo procedimiental es un gran avance”, dijo a El Litoral Rita Villegas, secretaria general de Conadu Histórica.
En qué consiste
El CCT será de aplicación obligatoria en todas las universidades públicas. Ya no habrá reservas particulares para los rectorados, sino que las autoridades de las casas de estudios deberán adaptarse los principios de la nueva norma y aplicarlos.
Esto implica dos cuestiones clave: ahora, las paritarias serán locales (de Nivel Particular). Cada gremio de base se sentará con las autoridades de cada universidad para consensuar condiciones de trabajo, higiene y seguridad laboral.
También, en esa paritaria local se deberá resolver la situación de los docentes que trabajan como contratados o interinos, quienes ahora podrán ingresar a planta por concurso abierto de oposición y antecedentes.
La regularización de la planta docente será en forma gradual y progresiva, en función de la situación de cada universidad. “Pensemos que el 70 % de los 150 mil docentes universitarios del país no tiene estabilidad laboral, carrera académica ni régimen de licencias. Son cuestiones que ahora podrán ir corrigiéndose gracias al CCT”, ponderó Villegas.
“Por ejemplo, los docentes interinos -que tienen de dos a cinco años de interinato- podrán integrar la planta estable, hacer carrera y mejorar su jerarquización docente”, dijo la secretaria. Y a ningún docente se le podrá modificar su situación actual para abajo. “Está garantizado su puesto de trabajo. También los contratados podrán pasar a planta mediante ingreso por concurso. Todo eso se irá resolviendo en paritarias locales”, agregó.
Satisfacción de Uda
Representantes de la Unión Docentes Argentinos (Uda) asistieron a la firma de la homologación del CCT. “Este convenio es fundamental en lo que respecta a enmarcar las condiciones de trabajo y poner de manifiesto la calidad del empleo de dichos docentes, a la vez que garantiza la estabilidad laboral del sector”, indicó el titular de ese sindicato y secretario de Políticas Educativas de la CGT, Sergio Romero.
En el mismo sentido, se expresó Villegas: “Celebramos este triunfo que es de toda la docencia universitaria. El CCT se tendrá que adecuar y hacer respetar. Cada docente deberá apropiarse de ese piso de derechos que tiene y sujetarse a las obligaciones impuestas”, concluyó.