MÚSICA
MÚSICA
Trombonanza: fin de fiesta
Ayer, tuvo lugar la jornada de clausura de la 17ª edición del Festival que reúne a trombonistas, tubistas y eufonistas de todo el mundo en Santa Fe. Por la mañana, los Canticuénticos fueron protagonistas de una fiesta en la explanada del Teatro Municipal; y por la noche, se hizo el tradicional cierre junto a la Jazz Ensamble.
El festival se desarrolló durante seis días en distintos espacios de la ciudad. El cierre fue con la Santa Fe Jazz Ensamble, en el Teatro Municipal.
Foto: Mauricio Garín
De la Redacción de El Litoral
Fue una edición especial, ya que Trombonanza celebra este año no sólo el reconocimiento como Fiesta Provincial del Trombón sino que, además, fue declarada de Interés por la Cámara de Diputados de la Nación; al mismo tiempo, Santa Fe estrena su título de Capital del Trombón. Durante seis días, más de 150 músicos de todo el mundo se dieron cita en la ciudad para participar de conciertos y espacios formativos.
Ayer, las actividades comenzaron temprano, con el tradicional concierto matinal de Trombonanza. Como invitados especiales estuvieron los Canticuénticos, quienes interpretaron junto al ensamble de participantes y profesores la “Cumbia del monstruo”, ya un clásico del público infantil.
Por la noche la cita fue, como es habitual, en el Teatro Municipal junto a la Santa Fe Jazz Ensamble Big Band. Participaron como solistas Sandoval Moreno de Oliveira, de Brasil; Remigio Pereira Pintos, de Paraguay y José Davila, de Estados Unidos. La dirección estuvo a cargo de Pedro Casís.
La organización es iniciativa de Rubén Carughi, con apoyo de la Embajada de Estados Unidos, la UNL, el Ministerio de Innovación y Cultura de la Provincia de Santa Fe y la Municipalidad, junto a gremios e instituciones privadas.
En las fotos
En el centro, Rubén Carughi, alma mater del encuentro.
Foto: Mauricio Garín
Al mediodía, la peatonal se llenó de música junto a los Canticuénticos.
Foto: Guillermo Di Salvatore
La Cumbia del Monstruo hizo bailar a grandes y chicos en la mañana del sábado.
Foto: Guillermo Di Salvatore
Trombones en alto: una postal de Trombonanza.
Foto: Guillermo Di Salvatore