Por la sequía y la corrida cambiaria
Por la sequía y la corrida cambiaria
En mayo la actividad económica cayó 5,8 %
Es el segundo mes de contracción, luego de 13 meses de crecimiento consecutivo. Es la peor caída del mandato de Macri.
Redacción de El Litoral
La actividad económica se derrumbó en mayo pasado un 5,8 % respecto a igual mes de 2017, lo que representa la mayor contracción en la era Macri, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
La dato del Estimador Mensual de la Actividad Económica (Emae) correspondiente al quinto mes del año fue mucho peor al esperado por los analistas. Un sondeo realizado por Reuter proyectaba una contracción del 1,8 %.
Fue a causa principalmente del desplome del 35,2 % de la actividad agropecuaria producto de la sequía. Además, cayeron fuerte la pesca (-29,2 %), y transporte y comunicaciones (-4,9 %).
Por su parte, los sectores que tuvieron incidencia positiva sobre el indicador fueron Actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler (4 %), Intermediación financiera (10,8 %) y Construcción (4,4 %).
El indicador desestacionalizado se contrajo 1,4 % respecto de abril último, mes en que el indicador había registrado una baja interanual del 0,6 %.
De este modo, el organismo encargado de las estadísticas públicas reflejó el período recesivo iniciado en el segundo trimestre, especialmente por el impacto de la sequía que afectó a amplias zonas del país.
En los primeros tres meses los resultados fueron diferentes: en enero el Emae verificó un incremento del 4 %; en febrero subió al 5 % y en marzo se ubicó en el 2,1 %, siempre en la medición con relación a 2017.
Desde que Mauricio Macri asumió, la baja más fuerte del indicador se había registrado en junio de 2016, con un porcentaje del 4,9 % en la medición interanual, seguido por julio de ese mismo año con el 4,5 %, en el marco de una profundización de la baja iniciada en abril.
El dato fue el más abultado desde julio de 2009, aunque a partir de ese período el organismo cambió la metodología de medición.
Sobre 15 grandes ramas de actividad, el Indec registró en mayo 6 con signo negativo, de las cuales únicamente dos acusaron disminuciones a tasas de dos dígitos, y muy altos.
Agricultura, ganadería, caza y silvicultura fue la rama de actividad de mayor incidencia en la contracción anual del Emae correspondiente a mayo, indicó el organismo.
Las otras ramas que contribuyeron a la caída del indicador fueron Impuestos netos de subsidios y Transporte y comunicaciones, agregó.
En contraposición, actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler, intermediación financiera y construcción fueron los sectores de mayor incidencia positiva.
Contracción de la industria
La industria se contrajo un 5 % interanual en junio, por lo que acumuló en el primer semestre de 2018 una merma de 0,2 % anual, según la consultora de Orlando Ferreres. Por su parte, la medición desestacionalizada del índice anotó una suba del 0,1 % mensual.
Durante el mes de junio, la industria manufacturera fue afectada por bruscas caídas en los sectores más relevantes. Puntualmente, en el segmento de Alimentos y Bebidas se registró una contracción del 6,8 % interanual, con un retroceso de 14,1 % en la producción de aceites, y una baja de 8 % en el rubro de las bebidas.
Asimismo, también se destaca la caída de 13,4 % interanual en la producción de automotores, la cual se vio perjudicada por los conflictos laborales en Brasil, que afectaron el normal funcionamiento de las terminales.
Esto repercutió en las trayectorias observadas en segmentos como el de Metálicas Básicas (-1,3 % i.a.), que también padece el menor dinamismo de la construcción, al igual que los Minerales no Metálicos (-0,9 % i.a.).
Por último, se destaca la baja del 4,1 % en relación a igual mes del año pasado reportada en la industria química, condicionada por paradas programadas de plantas. Dicho esto, las perspectivas de corto plazo no son alentadoras, considerando el contexto macroeconómico que se ha configurado localmente, y un panorama internacional que no resulta beneficioso.