El Litoral
La iniciatiava cuenta con el apoyo de 200 parlamentarios de distintos partidos políticos. Aboga por permitir su cultivo y consumo en sitios privados y su venta en establecimientos del Estado.
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EFE
Más de 200 parlamentarios italianos de diferentes partidos políticos han secundado un proyecto de ley para regular el cannabis, que aboga por permitir su cultivo y consumo en sitios privados y su venta en establecimientos del Estado.
Esta propuesta legislativa, que copa hoy las portadas de los principales medios de comunicación, ha sido impulsada por el senador y subsecretario de Estado de Exteriores, Benedetto Della Vedova, y ya ha recibido el apoyo de alrededor de 220 diputados de varias fuerzas políticas.
Los legisladores que han dado su visto bueno a este texto provienen de formaciones como el Partido Demócrata (PD, en el Gobierno), Izquierda, Ecología y Libertad (SEL), Movimiento 5 Estrellas (M5S), Grandes Autonomías y Libertad (GAL) o la conservadora Forza Italia (FI).
Della Vedova ha explicado en una rueda de prensa en qué consiste este proyecto de ley que deberá superar el trámite parlamentario y que, en resumidas cuentas, permite el consumo de la marihuana en lugares privados y prohíbe su venta entre consumidores.
El texto prohíbe la tenencia de esta sustancia a los menores de edad pero, por el contrario, los mayores de dieciocho años podrán poseer "una módica cantidad" de cannabis: Hasta quince gramos en su domicilio y hasta cinco en la calle.
En cuanto a su cultivo, el texto alberga la posibilidad de que cada persona pueda plantar en su casa hasta cinco plantas pero, para esto, deberán comunicarlo previamente a la Agencia de Monopolio.
Asimismo, los adultos "podrán cultivar de forma asociada en entidades que contarán con un máximo de 50 integrantes con cinco plantas cada uno".
La venta de la cosecha estará prohibida tanto para los consumidores individuales como para las asociaciones ya que será competencia exclusiva del Estado.
Asimismo permite el autocultivo para fines terapéuticos ya que, según Della Vedova, "el acceso es difícil para algunos enfermos" en la actualidad.
En cuanto a su consumo, el texto prohíbe fumar marihuana en lugares públicos o abiertos al público, como parques, y además sanciona la conducción de vehículos bajo los efectos de esta droga.
Por último, aborda el aspecto de la prevención y, por eso, un 5 % de los beneficios derivados de la legalización estarán destinados a financiar proyectos del Fondo Nacional por la Lucha contra la Droga.
Los medios locales se hacen hoy eco de la acogida que el proyecto ha recabado entre los legisladores, muchos de ellos a favor pero también muchos contrarios a su tramitación.
Entre los más críticos destacan la líder de Hermanos de Italia (FdI), Giorgia Meloni, y el de la Liga Norte (LN), Matteo Salvini, ambos de ultraderecha.
Salvini se dijo contrario al proyecto y abogó por legalizar antes la prostitución porque "el sexo no hace daño".
"Personalmente soy contrario. Estaría a favor de la legalización y reglamentación de la prostitución porque, hasta que no se demuestre lo contrario, el sexo no hace daño, el cannabis sí", dijo en declaraciones a los medios.