Dijo que la tasa vial, con la que Antonio Bonfatti pretendía financiar la reconstrucción de rutas y caminos, es “distorsiva”. Opinó que el Impuesto Verde es “un impuesto a la actividad”, y rechazó “tocar” Ingresos Brutos. Sobre el Inmobiliario, planteó que sólo debe actualizarse según las pautas inflacionarias.
De la redacción de El Litoral
El gobernador electo Miguel Lifschitz marcó diferencias sobre varios puntos de la política impositiva llevada adelante por sus antecesores Hermes Binner y Antonio Bonfatti. En declaraciones a la revista rosarina Punto Biz, el futuro mandatario dijo ser partidario de “tocar lo menos posible” la estructura tributaria. “No tenemos en agenda avanzar con una reforma tributaria importante -aclaró-. No soy partidario de tocar Ingresos Brutos y no haría cambios allí. Lo dejaría como está, pero anticipó que en materia de impuestos, vamos a estudiar algún mecanismo para promocionar el turismo. Y en el Inmobiliario, hay que trabajar en mantenerlo actualizado acorde con la inflación; no más que eso”, planteó.
Lifschitz dijo que tampoco piensa “en el Impuesto a la Herencia”, y anticipó que “habría que revisar los cambios en Inmobiliario que propone la ley de Suelos”. Esta última es una iniciativa que se impulsó -aunque sin éxito- durante la gestión de Bonfatti.
En contra
Lifschitz se manifestó contrario a otras dos iniciativas de tipo tributarias impulsadas recurrentemente durante la actual administración. Se trata de la denominada Tasa Vial y de la creación del Impuesto Verde.
“No soy partidario de fórmulas rebuscadas para financiar obras -dijo el gobernador electo-. Prefiero las fórmulas tradicionales, como reasignar partidas presupuestarias o tomar deuda. Por ejemplo, no soy partidario de sancionar una tasa vial para construir rutas, como hizo Córdoba y como piden algunos constructores. Considero que es una tasa distorsiva y a los que más termina impactando es a los sectores productivos, que usan de manera intensiva el gasoil y a los que, pretendidamente, se los busca apoyar encarando la construcción y mejora de rutas”, explicó.
Sobre la misma base, el actual senador por Rosario dijo que tampoco lo “atrae la idea del Impuesto Verde, que según los borradores que me llegaron, me parece cargar demasiado en la agroindustria”. En rigor, la idea trascendió el standard de “borrador” ya que en 2013 fue enviado por el Poder Ejecutivo a la Legislatura como mensaje y proyecto de ley, y reenviado en sucesivas ocasiones ante la falta de tratamiento.
“Las industrias para operar -siguió diciendo Lifschitz- tienen que obtener una factibilidad ambiental por lo que el impuesto termina siendo un impuesto a la actividad. Ése también es un proyecto que no vamos a apoyar desde el Poder Ejecutivo”, adelantó.
Alícuotas
Con respecto a las alícuotas y en términos generales, el futuro gobernador dijo que “será menos necesario subirlas si mejora el federalismo fiscal en Argentina. En la medida que el nuevo gobierno nacional sea más justo con los envíos coparticipables hacia la provincia, y que los montos que recibamos estén acorde a su importancia en lo que hace a recaudación, habrá menos necesidad de aumentar impuestos provinciales. Eso dependerá del gobierno nacional. Nosotros, reclamaremos fuerte”, concluyó.
Antecedentes Ingresos Brutos: persiguiendo el objetivo de una “mayor justicia tributaria”, Hermes Binner impulsó una reforma tributaria en su gestión que preveía gravar con Ingresos Brutos al sector empresarial e industrial. Por el lobby de ambos sectores, la modificación nunca fue aprobada. Inmobiliario: durante las gestiones tanto de Binner como de Bonfatti se promovieron aumentos del ciento por ciento en los mínimos tanto del Urbano como del Rural, y subas según la pauta inflacionaria para el resto de las categorías. De todos modos, nunca se actualizaron los avalúos fiscales. Ley de Suelos: la impulsó Bonfatti en 2013 para regular su tenencia, incluyendo un aumento del Inmobiliario para aquellas superficies que estuviesen ociosas. La iniciativa nunca logró avanzar en las cámaras. Impuesto Verde: su creación también fue impulsada por Antonio Bonfatti para generar recursos y destinarlos a la financiación de proyectos de investigación tecnológica. Pero la idea fue resistida por el sector industrial, y tampoco prosperó en el Parlamento. Tasa Vial: fue propuesta por Bonfatti en 2014 para financiar la reconstrucción de rutas y caminos. Su creación demandaba pagar un adicional de 32 centavos por litro de nafta o gasoil. El mensaje nunca logró ser votado en la Cámara de Senadores.
El dato Presupuesto