Hasta hace poco tiempo, la mayoría de los 32 integrantes de las Cooperativas Por un Mañana Mejor” y Jóvenes por San Cayetano vendían comida en las ferias de trueque para poder subsistir. Aunque tenían conocimientos en el oficio de la construcción, habían quedado sin trabajo, y durante más de dos años procuraron sus ingresos de esa forma.
Hoy, gracias al apoyo del gobierno de la ciudad, son los únicos fabricantes en la región de canalones de hormigón para zanjones a cielo abierto: en enero de este año comenzaron a realizar las pruebas con la construcción de seis moldes, y luego de comprobar su eficacia, actualmente se están instalando en Patricio Cullen entre Matheu y French.
Estas cooperativas de trabajo están conformadas por un presidente, un secretario, un tesorero, un síndico y los socios. Una de sus integrantes, Graciela Bogado, comenta que gracias al “empujón” que les dio el municipio santafesino pudieron comenzar a trabajar en la construcción de estos armazones. El gobierno de la ciudad les proveyó el espacio para funcionar, el material necesario para la fabricación de las estructuras, los moldes y reciben una retribución económica por la tarea. Parte de ese dinero está siendo invertido por los socios para la fabricación de cestos en altura, que muy pronto pondrán a la venta.
“Nos encontramos con gente que estaba desocupada y participando de la feria del trueque. Pero tenían experiencia en el oficio de la construcción y muchas ganas de trabajar. Les propusimos entonces que conformen una cooperativa: les brindamos asesoramiento jurídico, compramos los insumos y les pagamos la mano de obra. Es un beneficio para todas las partes: ellos vuelven a su oficio; el municipio cuenta con una alternativa para proveerse de canalones, y a los vecinos se les comienza a solucionar un gran problema, como es el de las cunetas a cielo abierto”, resumió el subsecretario de Acción Social, Carlos Medrano.
Los casos de las cooperativas Por un Mañana Mejor y Jóvenes por San Cayetano son apenas dos ejemplos de una forma de trabajo que lleva adelante la actual gestión municipal. También se ha impulsado la formación de cooperativas para los trabajos del programa “Agua+Trabajo”, la limpieza de espacios públicos, la construcción de playones deportivos y el mantenimiento de canales, entre otros.
Las ventajas
Si bien el municipio es el primer demandante de la producción de canalones, la intención es que estas cooperativas crezcan como emprendimientos privados. Para tal motivo, desde el Programa de Trabajo y Empleo, y en el marco del programa “Puente”, se los asesora en las cuestiones organizativas y administrativas de una empresa.
Los canalones son módulos de hormigón fáciles de transportar: no pesan más de 45 kilos, tienen un armazón de hierro y 50 centímetros de largo. Se colocan en zanjas a cielo abierto y presentan varias ventajas: son fáciles de limpiar, perduran en el tiempo -no se desmoronan-, no se obstruyen, permite mantener la cuneta seca cuando no hay lluvias y evitan que permanezca el agua estancada, solucionando problemas de limpieza y malos olores.
Esta primera experiencia piloto se está llevando adelante en barrio Guadalupe, y tiene la intención de mostrar a los vecinos la conveniencia de estas estructuras para poder avanzar junto a ellos en el revestimiento de todas las cunetas de la ciudad.
Mientras tanto, para la zona de la Costa se está estudiando otra forma de canalón, debido a que la presencia de arena dificulta el paso del agua.