En alerta. El escenario que más preocupa al gobierno local es la posibilidad de que se produzcan lluvias intensas mientras el río está alto, ya que esto dificulta el escurrimiento del agua. Agencia Santo Tomé
El municipio santotomesino monitorea el estado de los terraplenes y de los sistemas de bombas, ante el probable aumento del nivel del río por la creciente del Paraná.
En alerta. El escenario que más preocupa al gobierno local es la posibilidad de que se produzcan lluvias intensas mientras el río está alto, ya que esto dificulta el escurrimiento del agua. Agencia Santo Tomé
Ariel Durán y Sergio Ferrer
El municipio santotomesino se encuentra abocado a la coordinación de acciones preventivas, tendientes a mitigar los efectos derivados de la actual crecida del río Paraná y sus eventuales consecuencias sobre el Salado.
Por eso, se lleva adelante un relevamiento de las familias que, por estar asentadas fuera del anillo de defensas, se encuentran en una situación de mayor vulnerabilidad ante una eventual creciente. En forma paralela con dicho registro, personal municipal realiza un monitoreo permanente del estado de los terraplenes y los sistemas de bombas, como así también de la capacidad operativa y el equipamiento con el que cuentan para responder ante la contingencia.
Al margen de lo anterior, también se concretaron tareas de consolidación en la defensa costera, a la altura de calle Necochea, a fin de apuntalar uno de los puntos más afectados por la erosión del río (la idea es seguir trabajando allí, con la colaboración y asistencia del Ministerio de Aguas de la provincia).
Además, se llevó a cabo una reunión de trabajo que involucró a las autoridades municipales que de una u otra manera tienen responsabilidad sobre áreas ligadas a las estrategias y el protocolo de actuación en situaciones de emergencia hídrica.
Lo que se espera
El encuentro fue encabezado por la concejala Daniela Qüesta y tomaron parte, entre otros funcionarios, Adriana Baldo (Gobierno y Acción Social), Ricardo Méndez (Obras y Servicios Públicos), Mario Montenegro (Salud), Jorge Kolev (Seguridad Ciudadana), Nora Wagner de Carrivale y Elena Colzani (Relaciones Institucionales). “Hasta el momento no hay informes oficiales que indiquen que pueda acontecer una creciente extraordinaria del río Salado, que es el curso de agua que afecta directamente a los santotomesinos”, aclaró Qüesta sobre este tema. “Lo que sí está previsto es que su nivel se incremente como consecuencia de la crecida del Paraná, cuyo pico máximo se espera para el 22 de julio”, explicó después. “En ese contexto, el único escenario que podría generar inconvenientes para la ciudad sería que el aumento del nivel del río sea acompañado en nuestra región por lluvias intensas; por lo tanto, estamos tomando los recaudos pertinentes ante la posibilidad de una situación de esas características”, redondeó la presidenta del Concejo Municipal, quien se hizo cargo del Poder Ejecutivo hasta el 8 de agosto próximo, por licencia del intendente Fabián Palo Oliver.
El dato Feriado La Municipalidad de Santo Tomé no prestará servicios públicos durante el feriado nacional del 9 de Julio, en virtud de conmemorarse el Día de la Independencia Nacional. Por tal motivo, se solicita a los vecinos evitar la disposición de residuos en la vía pública, a los efectos de contribuir con la higiene de la ciudad y prevenir la obstrucción de desagües. Atento a ello, la recolección de residuos será retomada a partir del miércoles próximo, en los horarios y recorridos habituales.
“Estamos mejor que hace cinco años” “La ciudad de Santo Tomé se encuentra mejor preparada que hace cinco años para afrontar contingencias hídricas”, manifestó Daniela Qüesta, presidenta del Concejo Municipal y a cargo del gobierno santotomesino. “No hay que olvidar que los trabajos en materia de prevención del riesgo hídrico vienen siendo una política de Estado; ello se ve reflejado, entre otras cosas, en la construcción de desagües de gran envergadura -que hasta hace poco tiempo no existían- tales como el de la autovía (ruta 19), los de calles Balcarce y Chapeaurouge, o el del barrio El Chaparral, hecho a través del Promeba”, completó la intendenta interina. “Asimismo, cabe agregar determinadas tareas complementarias, como la limpieza y el mantenimiento de los canales troncales a cielo abierto, la ampliación y adecuación de los reservorios, el incremento de la capacidad de bombeo y el fortalecimiento del equipamiento específico que se necesita para afrontar emergencias”, mencionó después. Para finalizar, Qüesta recordó la relevancia de una gran cantidad de obras menores -cruces de calles, cuneteo, colocación de tubos domiciliarios-, que se llevan a cabo en forma permanente.