El Gobierno de la provincia de Santa Fe prohibió el uso de agroquímicos en municipios y comunas, para controlar la vegetación, en espacios urbanos públicos y privados.
La norma fue publicada en el Boletín Oficial de la provincia y firmada por los ministerios de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente; de Salud; de Producción, de Trabajo y Seguridad Social; y de Gobierno y Reforma del Estado.
Fuentes gubernamentales indicaron que la iniciativa "se corresponde con una de las acciones contempladas en el Proyecto Estratégico de la provincia de Santa Fe dentro del Programa Territorio Integrado-Calidad Ambiental“.
Además, para evitar cualquier mala interpretación o decisiones discrecionales de parte de las autoridades locales, la resolución dice que "se debe dar la más amplía acepción al concepto de espacios verdes“.
En tal sentido, "entendiéndose mínimamente comprensivo de plazas, parques, bordes de caminos, de vías, de canales, cunetas, cementerios, entre otros lugares públicos y ámbito privados en general, tanto residenciales como no residenciales“, es decir, las zonas con countries, barrios privados, clubes y campings.
Desde el Centro de Protección a la Naturaleza (Cepronat) manifestaron que "ahora hay que observar que las autoridades correspondientes cumplan y hagan cumplir“ la disposición. Incluso reclamaron una mayor comunicación de la medida para que todos los gobiernos locales no se desentiendan ni la desoigan.
Entre los fundamentos de la resolución, el gobierno señaló que el planteo a los pueblos y ciudades es para que promuevan ôacciones tendientes a erradicar el uso de agroquímicos como modo de control químico de la vegetación en los espacios verdes urbanos y en su lugar sólo se realice control mecánico de la misma“.
El Cepronat aprovechó la decisión del gobierno de Santa Fe para ratificar la necesidad de modificar la ley de fitosanitarios.
Al respecto, volvió a solicitar que la Legislatura -cualquiera de las dos cámaras- trate el proyecto que presentó esta ONG junto a otros actores de entidades intermedias que pertenecen a la Campaña Paren de Fumigarnos para limitar el uso de agroquímicos.
La primera cuestión que se plantea es prohibir las aplicaciones aéreas de agroquímicos, salvo la realizada con fines sanitarios con el expreso consentimiento de la autoridad sanitaria y medioambiental.
El texto -entre otras cosas- plantea limitar "las aplicaciones terrestres de agroquímicos, fijando una distancia de 800 metros de las zonas sensibles“. Por caso, se protege a las escuelas rurales fijando una zona de resguardo libre de agroquímicos de 1.000 metros. (El Litoral | Télam)