Lunes 17.10.2022
/Última actualización 10:01
El tropezón no debe convertirse en caida. Colón perdió sin atenuantes contra Racing, luego de un primer tiempo rescatable y un segundo tiempo colmado de errores. Venía de tres victorias al hilo y con producciones mejoradas, sobre todo aquella del debut de Saralegui ante Estudiantes. Los tres triunfos no fueron obra de la casualidad sino de la causalidad. Declinó ante este Racing que busca pelear el título con Boca y ahora se medirá con un Defensa y Justicia que llega victorioso por el triunfo logrado el viernes ante Unión, ya con la clasificación asegurada a la Copa Sudamericana. No será un rival sencillo para Colón y así se lo espera, más allá de la necesidad de tener un buen resultado en esta despedida del año ante su gente (luego quedará la visita a Rosario para enfrentar a Central).
Saralegui no podrá contar con Facundo Garcés, que llegó al límite de amarillas y habrá que ver si será Acevedo el encargado de reemplazarlo. Otra posibilidad podría darse con Nardelli, pero en ese caso habrá que ver si ya está Meza para jugar. El marcador de punta, que tuvo una lesión similar a la que padeció el Pulga Rodríguez allá por abril o mayo de este año, ya estaba clínicamente recuperado para el partido con Platense, pero se resolvió postergar el regreso y no sólo estuvo afuera de ese partido, sino también del que se jugó con Racing.
En el mediocampo, los cambios que esta vez hizo Saralegui (algo bastante parecido a lo que había experimentado, positivamente, en el partido con Platense en Buenos Aires) no le dieron resultados. Posiblemente pueda repetir la estructura que viene teniendo con Pierotti por derecha, Bernardi por izquierda y la dupla Perlaza-Picco por el medio. Y arriba no hay dudas y seguramente se mantendrá la presencia del Pulga Rodríguez y Wanchope Abila, más allá de que el tiempo de recuperación viene siendo muy escaso.
Por el lado de Defensa y Justicia, con la conducción de Julio Vaccari ha logrado mantener el nivel de intensidad y esa ambición ofensiva que lo viene destacando desde hace un tiempo. Sin dudas que lo del club de Florencio Varela no deja de ser un ejemplo de proyecto, que no sólo se solidifica con logros (dos torneos internacionales como la Sudamericana y la Recopa), sino también con infraestructura y también con un estilo futbolístico que se viene manteniendo desde hace años, más allá de los cambios de entrenador.
Ante Unión, la producción del equipo en el primer tiempo fue muy buena. Plantó tres hombres de punta y si el "Uvita" Fernández hubiese tenido más contundencia, posiblemente el marcador habría sido más amplio a su favor. El buen trabajo de Alanís, el despliegue de Kevin Gutiérrez, las subidas de Tripicchio y Soto por los costados y los desbordes de Togni fueron algunos de los elementos que manejó muy bien el equipo de Vaccari para sacar ventajas ante el Tate.
Ya con la clasificación adentro, Defensa y Justicia seguramente saldrá a plantear un partido abierto y ofensivo. Colón tendrá que cuidarse, lógicamente, y tratar de aprovechar esos espacios que seguramente se abrirán. Es de imaginarse algo bastante similar a lo que ocurrió, por ejemplo, ante Patronato en Santa Fe, cuando el equipo de Sava llegó para jugar una de sus últimas chances de quedarse en Primera, intentando salvarse de un descenso que ya tiene decretado a partir de la fecha pasada.
También este partido servirá para solidificar la posición de Marcelo Saralegui al frente del equipo. En cuatro partidos, ganó tres y perdió uno. Sacó 9 puntos sobre 12, lo que representa un porcentaje sumamente importante. Saralegui sabe que si llega a ganar el partido de este martes a las 16.30, tendrá amplias posibilidades de que las puertas para la continuidad queden abiertas de par en par.
En definitiva, a lo mínimo que va a llegar Saralegui es a lograr el 50 por ciento. Esto se daría en el supuesto de que pierda los dos partidos que restan. Pero haciendo un cálculo y una proyección medianamente optimista, si logra sumar en alguno (o los dos) de los partidos que faltan, habrá alcanzado un porcentaje que indudablemente hará pensar a la dirigencia sabalero en cuanto a los pasos a seguir.