Fue el 14 de mayo de 2018 y bajo la luna de Avellaneda. Ese día, en el cierre de la Superliga 2018/2019, Colón con Eduardo Domínguez en el banco le ganó a Racing en el Cilindro 3 a 1 y de esa manera clasificó a la Copa Sudamericana. Desde ese entonces, ninguno de los entrenadores que pasaron de manera definitiva (Comesaña, Lavallén, Osella) ni tampoco los interinos (Esteban Fuertes y Pablo Bonaveri) lograron volver a ganar un partido de visitante en el campo doméstico del fútbol argentino. Pasaron, desde ese momento, 24 partidos y casi dos años: Colón empató 5 veces y perdió los otros 19 partidos. Una racha que ya es, por lejos, la peor del profesionalismo sabalero saliendo del Cementerio de los Elefantes.
A esa malaria increíble, el “Barba” deberá agregarle los datos actualizados que le “dejaron” como pesada herencia:
— Con la nueva disposición reglamentaria, recibe a Colón en zona de descenso, junto a Patronato y el Gimnasia de Maradona
— Hace diez partidos que el equipo no gana, sumando local y visitante en la Superliga
— Acumula, además, un total de 280 minutos sin poder convertir goles
— En los últimos tres partidos recibió 10 goles y no marcó ninguno
— Viene de dos 0-4 en contra (Newell’s y Boca), además del 0-2 con Talleres
Es por eso que, más allá de los doble turnos que implementó y el equipo que “plante” para ir al lunes a la noche al vacío Gigante de Arroyito, mucho de lo que pueda lograr con este Colón deberá pasar por la convicción y la cabeza.
Hasta acá, todo lo que el “Barba” implementó como nueva modalidad de trabajo, generó impacto positivo y muy buena predisposición de los players sabaleros. Desde el doble turno, el cambio en la alimentación, la insistencia de las pelotas quietas y la concentración “extendida”, por llamarlo de alguna manera.
Más allá que queda un entrenamiento “fuerte” más antes de pensar en el lunes a la noche, a las 21.10 frente a Rosario Central en el Gigante de Arroyito, en el ensayo de este sábado a la mañana, el “Barba” Eduardo Domínguez hizo fútbol “de área a área” con el siguiente equipo.
En el arco, obviamente, el uruguayo Leonardo “Cachorro” Burián. Para defender, clavó línea de cuatro: Alex Vigo, Emma Olivera, Bruno Bianchi y Rafael Delgado. En el mediocampo, cuatro volantes: Zuqui por derecha, Fritzler-Estigarribia el doble “5” y Aliendro por izquierda. Arriba, en la ofensiva, jugaron Wilson Morelo y Tomás Chancalay.
En cuanto a jugadores como “Pulga” Rodríguez, Lucas Viatri y el mismo Brian Fernández, están los tres en perfectas condiciones físicas y formaron parte del equipo de enfrente a los titulares.
Si bien Domínguez fue, en su paso anterior, un entrenador de “mover poco” el once titular que pone en una práctica, este es su primer partido y con pocos días de trabajo, por lo que quizás se pueda dar alguna modificación a último momento para visitar a Rosario Central en Arroyito.
Como ya informó El Litoral, Colón hará base el domingo a la noche en el Hotel Presidente de la ciudad de Rosario, para el juego del lunes a las 21.10 ante Rosario Central. “Cuando volvemos de Arroyito, seguimos concentrados en el Hotel de Campo, para entrenar el martes a la mañana en el predio. Es un pedido de Eduardo Domínguez y la directiva le dio el visto bueno”, comentaron a este diario.