Apuntes en la "famosa" (y esta vez lluviosa) siesta santiagueña
Colón llegó el sábado por la mañana e hizo en esta ciudad el último entrenamiento. Lo mismo que en Río Cuarto: “Vamos a jugar contra un candidato”, fue la frase más escuchada en Mitre. La reunión entre Godano y Garcés.
Así luce el estadio Doctores José y Antonio Castiglione en la previa del encuentro.
Esta Santiago del Estero siempre calurosa y húmeda, a la que Colón debió visitar en otras oportunidades con temperaturas muy extremas (recordar aquella derrota en enero del equipo de Osella, semanas antes de la pandemia), ahora se apiadó en parte. El calor no fue tan agobiante, pero se debió a la lluvia que empezó a caer en horas de la mañana de este domingo y que se mantuvo durante largas horas, agregándole un elemento extra al partido, que fue esperado con muchísima expectativa en esta ciudad.
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Es que los mismos protagonistas se encargan de resaltar las virtudes y el potencial de Colón. Se dio en Río Cuarto, cuando El Litoral comprobó allí la gran atracción y el deseo –como también fue expresado en esta ciudad- de que lleguen los hinchas visitantes a los dos lugares del interior del país que ha visitado Colón hasta el momento. El mismo Joaquín Sastre, entrenador de Mitre, se encargó de señalar que “nos vamos a encontrar con un equipo que es candidato”. Y este concepto no sólo se refrenda con la campaña que hizo el equipo de Delfino hasta el momento de visitar nuevamente Santiago del Estero para jugar por el ascenso, sino en los dichos del mismo presidente sabalero. Víctor Godano fue contundente, apenas iniciado el torneo, cuando admitió que Colón es candidato. Sin pelos en la lengua ni basándose en la lógica observación de que el torneo es largo y casi podría decirse que está “en pañales”, el presidente rojinegro no tuvo empachos en ubicar a su club en el sitial más alto de los pronósticos.
Uno de los grandes temas de la semana en Colón, fue la reunión entre Godano y Garcés del viernes por la mañana. El presidente había vertido algunos conceptos, entre los cuáles señaló que “a su sueldo lo estamos pagando entre todos los socios de Colón”, reclamando de alguna forma un cambio de actitud en el jugador. Por su parte, Garcés, en conflicto con Colón a partir de haberse enterado de qué manera quedó su situación por aquél poder que firmó la dirigencia anterior a un representante (Pascual Lezcano, el mismo de Viatri) para que sea el encargado de negociar su salida, solicitó una condición que, si el club la acepta, le permitirá volver a ponerse de inmediato a las órdenes de Delfino para jugar, cambiando de esta manera su actual postura de no hacerlo. Esta situación ha sido hablada con el entrenador y también con los principales referentes del plantel (Goltz, Bernardi y Prediger), que han dado el visto bueno.
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En caso de ser aceptada esta condición por parte de la dirigencia, no sólo que se le pondría punto final al conflicto, sino que el técnico dispondría de un “refuerzo” para un sector de la cancha –la zaga central- que ha quedado bastante “desnuda”. Hasta último momento se quiso incorporar un jugador más en esa posición, pero no se lo encontró. Ante la ausencia de Lopes, Delfino tuvo que echar mano a Henríquez, que no es marcador central por naturaleza. Y Antonini, el jugador que llegó para desempeñarse en ese puesto, hasta ahora no apareció ni siquiera integrando el banco de suplentes. Y este partido, ya en la séptima fecha, no ha sido la excepción. Además, Colón dejará de tener un patrimonio “parado” y al jugador le permitirá volver al ritmo de competencia que ha perdido, ya que su último partido fue el desempate con Gimnasia del año pasado en cancha de Newell’s.
El calor no fue tan agobiante, pero se debió a la lluvia de este domingo.
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Hasta ahora, Colón sólo ha jugado con Central Córdoba, si a rivales santiagueños nos referimos. Contra el Ferroviario lo hizo en el viejo Nacional de Primera, en la B Nacional y también en el torneo de Primera. Nunca jugó contra Mitre hasta este partido que es el primero en la historia de ambos clubes, tampoco contra Güemes (otro habitante de la Primera Nacional pero formando parte de la otra zona) y no estaba en Primera cuando le tocó el turno a Estudiantes de Santiago del Estero de jugar el desaparecido Nacional de Primera. Muchos aseguran que Mitre es el equipo más popular de Santiago, aunque la historia demuestre lo contrario. Sobre todo en la comparación con Central Córdoba, que ha tenido logros muchísimo más trascendentes y jugó –juega- en Primera. El único Mitre que disputó torneos en la máxima categoría, es Bartolomé Mitre de Posadas, club con el que Colón jugó en los Nacionales de 1972 y 1975.
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Como ocurrió con la Chiva Di Meola (ídolo sabalero) y Estudiantes de Río Cuarto (allí se lo recuerda, más allá de que el paso de la Chiva fue fugaz y en el final de su carrera), hay varios nombres en común de jugadores que vistieron ambas camisetas. Y que en Colón han dejado su estela. Por ejemplo, Laureano Tombolini y el “Sungui” Blanco son los claros ejemplos. Tombolini atajó 181 partidos en Colón, pero sólo lo hizo en cuatro oportunidades en Mitre, cuando vino a esta ciudad en la temporada 2015-2016. En Colón estuvo seis, desde el 2002 hasta el 2008. El “Sungui” siempre soñó con retirarse del fútbol vistiendo la camiseta sabalera.
Otros jugadores en común entre Colón y Mitre son el sanjuanino Lucas Ceballos, Lucas Landa y Gustavo “el Potro” Savoia, autor de dos o tres goles en la agonía de los partidos que dejaron marcada su permanencia en el club, más allá de que no tuvo muchas chances. Savoia le convirtió un gol que sirvió para empatarle a Boca en la Copa Sudamericana del 2003, cuando Iarley había puesto en ventaja al equipo que dirigía Carlos Bianchi. Lo mismo pasó luego con Independiente y también con Arsenal, pero estaba “tapado” por Fuertes, Blanco, Carignano y Maceratesi, que formaban parte de aquél plantel.
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Como no podía ser de otra manera y teniendo en cuenta la tradición basquetbolera de esta ciudad, se le dio mucha importancia a dos partidos que se jugaban este domingo en la zona. Uno era protagonizado por Olímpico de La Banda, pero el más importante era el de Quimsa con Boca, reeditando un choque que se convirtió en la final de la Liga Nacional del año pasado, que quedó en manos del equipo santiagueño, que obtuvo diez títulos y dejó a Santiago en un sitial bien alto del básquetbol argentino.
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Quizás Miguel Cortijo sea una de las figuras (o LA figura) más destacada de la historia del básquetbol santiagueño, pero hubo un santafesino de nacimiento pero santiagueño por adopción, “Yoyo” Cavallero, que algunos lo señalan como el hombre que trajo desde Europa la idea de la Liga Nacional, la habló con León Najnudel y éste fue el encargado de hacerla “prender” allá por los 80 para convertirla en la principal competencia del básquetbol argentino, logrando que mejore sustancialmente el nivel deportivo.
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Colón disputará en condición de local el partido de la octava fecha, que será ante Gimnasia y Tiro de Salta, club con el que tiene partidos jugados de manera oficial, tanto en el ascenso como también en Primera (en 1998, con un triunfo para cada uno). El encuentro se jugará el lunes 25 a partir de las 21.45. Después, Colón deberá visitar a Gimnasia y Esgrima, en Mendoza. Ese partido se jugará en medio de la Semana Santa y el fin de semana “extra large” feriado.
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