Luego de la determinante reunión final del jefe de comando técnico, Eduardo Domínguez, con la mesa chica de la CD sabalera (Vignatti, Darrás, Fleming, Alonso) se terminó de oficializar a la empresa organizadora de la Copa de la Liga los detalles del viaje al sueño sabalero. El dato más importante apunta al gran objetivo: si Colón elimina el lunes 31 a Independiente y gana el boleto para la gran final del viernes 4, se vuelve inmediatamente a Santa Fe. No se queda en San Juan.
En este sentido, los dirigentes sabaleros hicieron todos los esfuerzos y las gestiones para que defina el comando técnico del "Barba".
Palabras más palabras menos, Eduardo Domínguez les dijo a los directivos: "No es que hay que hay que quedarse un solo día. Nosotros volvemos el lunes y martes a la tarde entrenamos en el predio, en nuestra cancha, con nuestra burbuja. Lo mismo el miércoles y el jueves también...todo en casa. Nos vamos a la siesta de ese 3 de junio, pensando en la final del viernes 4".
Todo, absolutamente todo, lo resolvió el "Barba". Desde la empresa privada organizadora, que es proveedora del servicio para la Copa de la Liga, confiaron un dato: "A todos los clubes les ofrecemos dos horarios de chárter: salir a la mañana o salir a la siesta, siempre el día previo. Colón, por decisión del DT, eligió el segundo turno de vuelo. Quiere entrenar y almorzar en Santa Fe el domingo".
En principio, con los mismos 55 integrantes del frustrado vuelo original cuando se paró el fútbol por el confinamiento, Colón estará volando a las 14.55 desde el Aeropuerto Metropolitano de Sauce Viejo hasta el Domingo Faustino Sarmiento de la capital del sol. Se calcula, en condiciones normales, un vuelo de una horita y algunos minutos nada más.
En cuanto a la vuelta, tal como lo anticipó El Litoral, Colón confirmó su retorno a Santa Fe en la medianoche del mismo lunes 31. "Llegamos a la una de la mañana, duermen lo que necesiten, almuerzan y a la siesta entrenamos en el predio". Fue palabra y deseo de Eduardo Domínguez. Y los dirigentes de Colón acompañaron en todo. Le hicieron caso, le dieron el gusto. Como si fuera el nuevo Napoléon, pero con "Barba".