Este jueves, antes del último gran feriado largo del año, el propio presidente de la AFA, Claudio "Chiqui" Tapia, convocó a todos los clubes de Primera División en una determinante cumbre en las propias oficinas históricas de calle Viamonte. La sorpresa, en un momento donde la entidad del barrio Centenario aparece en el ojo de la tormenta, fue la única y solitaria ausencia de Colón de Santa Fe. "Estuvieron todos, menos el Sabalero", informaron los periodistas capitalinos que siempre manejan información de primera mano.
A la hora de buscar los motivos de tan importante ausencia, El Litoral logró averiguar de manera extraoficial que el vicepresidente sabalero José Alonso, quien está muy bien considerado por sus pares y a quien el propio Claudio "Chiqui" Tapia aprecia, está de viaje por cuestiones personales y ausente de las funciones en Buenos Aires. Hasta allí todo normal, pero lo que sorprende es la falta de capacidad de gestión del resto de los integrantes de la Comisión Directiva que preside José Néstor Vignatti en poder reemplazar al respetado vicepresidente del Club Atlético Colón.
En la reunión de este jueves, donde Colón brilló por su ausencia, se fijó la fecha de la Asamblea General que modificará la estructura deportiva en la Argentina: la misma se llevará a cabo el 21 de diciembre de este año en el predio de la AFA en Ezeiza. Pero, además, todos los clubes de Primera debatieron varias horas un combo de temas específicos, donde los dos tópicos más importantes fueron los ingresos de las cadenas televisivas por los derechos totales del fútbol criollo y la chance de generar nuevas unidades de negocio en el corto plazo.
Cada club recibió, de parte de Claudio "Chiqui" Tapia, los resultados de una consultora internacional especialmente contratada por la AFA, con muy interesantes conclusiones en varios rubros. La carpeta con el nombre "Colón de Santa Fe y sus números" se quedó a dormir en las oficinas de calle Viamonte, porque el Sabalero fue el único club de Primera que faltó a la cita. Por lo visto, si no concurre el vicepresidente José Alonso, nadie gestiona la presencia institucional y las relaciones públicas, justamente en un momento complicado y donde Colón está en boca de todos. Y no por estar haciendo las cosas bien.
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