(Enviado Especial a Rosario)
Diez años tardó Colón en lograr su primer triunfo de visitante ante Rosario Central en Primera, desde el ascenso en 1965. Fue en 1976, cuando lo goleó en la cancha de Sarmiento.
(Enviado Especial a Rosario)
Le llevó diez años, a Colón, lograr su primera victoria como visitante ante Rosario Central. Desde 1966, primer año en la A, hasta 1976 habían sido derrotas o a lo sumo algún empate. Hasta que llegó una goleada sabalera de visitante, pero fue en la cancha de Sarmiento de Junín (posiblemente porque en la de Central ya se estaban haciendo las remodelaciones para el Mundial de 1978). Fue en el Metropolitano de 1976. Y casualmente, fue el último partido “en democracia”, porque se jugó el 21 de marzo de ese año y tres días después, el miércoles 24, se produjo el Golpe de Estado. Ese día, Colón formó con Luraschi; Aráoz, Di Plácido, Mariano y Fernández; Villarruel, Roldán y Cococho Alvarez; Juan Carlos López, Saldaño y Aricó. Por su parte, Rosario Central lo hizo con Ferrero; Burgos, Pascutini, Romero y Jorge García; Aimar, Mancinelli y Potente; Lamberti (que había jugado previamente en Colón), Peña y Cáceres. Los goles sabaleros de esa tarde en el Eva Perón de Junín, fueron marcados por Aimar en contra, Juan Carlos López, Saldaño y Aricó.
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Un aspecto saliente de ese equipo, que muchos que lo vieron jugar podrán recordarlo: la capacidad de sus jugadores para ejecutar los tiros libres. Había tres ejecutantes que le pegaban muy bien a la pelota, casi de manera excelsa. Cococho y Aricó eran los zurdos y Ricardo Aniceto Roldán, diestro, tenía la particularidad de “perforar” las barreras rivales. Se cansaron de hacer goles de tiro libre en aquellos tiempos, porque antes hubo otros, caso Carlos López, también con una notable pegada.
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Luego, hubo que esperar hasta 1999, cuando el equipo que entonces dirigía Pancho Ferraro goleó a Rosario Central por 3 a 0 en el Gigante. Los goles fueron convertidos por el Bichi Fuertes, Petete Trimarchi y el Sopa Aguilar. La última victoria fue en marzo de 2014, cuando Colón ganó 1 a 0 con gol de Martín Luque, en el torneo que finalmente marcó el descenso sabalero, justamente en ese mismo estadio, en el desempate ante Atlético de Rafaela.
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De todos modos, pasaron 16 años desde la última victoria de Rosario Central como local ante Colón. Fue el 10 de diciembre de 2006, cuando el equipo que dirigía en ese entonces Pipo Gorosito consiguió una clara victoria Los tres goles de ese 3 a0 fueron convertidos por Alemanno, Paulo Wanchope y Zelaya.
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Al igual que en Colón, uno de los temas a definir en Central es el vinculado al técnico. La idea es que siga Tévez y así lo señalaron algunos de los actuales dirigentes, aunque el club tendrá renovación de autoridades a fin de año. En los pasillos del Gigante se habla de una pretemporada en el estado de Florida, en Estados Unidos y la venta de algunos jugadores, al margen de Blanco y Buonanotte, que se va a la Premier League. Otros que podrían salir de la institución son el delantero Véliz y Mateo Tanlongo, otra de las promisorias apariciones que tuvo Central en estos últimos tiempos. Tévez ya le hizo conocer a los dirigentes canallas sus pretensiones respecto de refuerzos, al margen de solicitar la continuidad de Walter Montoya y del arquero Servio. ¿Seguirá estando Wanchope Abila entre los pretendidos por el Apache?.
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El plantel de Colón quedó licenciado y la idea es la de retornar a los entrenamientos en la segunda quincena del mes de noviembre. Será una pretemporada muy larga, ya que los planteles van a estar prácticamente tres meses sin jugar. La fecha de inicio de los torneos del año que viene es la del 20 de enero, pero eso recién se terminará de confirmar cuando se reúnan los dirigentes, luego del Mundial, para establecer la forma de disputa de la temporada que viene. Desde ya que el primer tema a resolver será el de la conducción técnica. Y también se tendrá que decidir respecto de la secretaría técnica, pues Mario Sciacqua se alejará de la institución a la finalización de su contrato.
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La tarde se presentó calurosa y cuando aparecía el sol se incrementaba aún más la intensidad climática, razón por la cual todos concurrieron al estadio de “veranito” y con torsos desnudos. Marcelo Saralegui, el entrenador sabalero, se metió en el campo de juego bien temprano, casi una hora y media antes del inicio del partido y sacó algunas fotografías antes de volver al vestuario visitante, donde se estaban cambiando sus jugadores.
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Un nombre en común entre Rosario Central y Colón es el “Camello” José Daniel Di Leo. Fue jugador en 1986 y luego fue técnico alterno del Patón Bauza. “Me emociona mucho hablar del Patón, es mi amigo, mi hermano, vivimos muchas cosas juntos. Ahora lo estoy controlando un poco. El está tranquilo, sin estrés, lo mejor que puede hacer es descansar. Los momentos que viví son irreemplazables. Muchos viajes, siempre peleando y yendo para adelante: No voy a la cancha a verlo a Central porque la gente se acerca y me consulta por él y vuelvo amargado. Al principio, decidí no trabajar más, pero estuve 9 meses en las inferiores de San Lorenzo porque me llevó el Colorado Cetto y ahora me picó el ‘bichito’ y veré si puedo hacer algo el año que viene. Me acuerdo de aquél equipo del 86, que era un equipazo, de primera y no de la B. En San Lorenzo, el problema fue de egos dirigenciales y eso generó una debacle. Con Vignatti no tuvimos problemas, porque el Patón es un tipo directo, frontal y se manejó muy bien”. Y contó una anécdota interesante: “En Arabia, vino un día el Príncipe y nos ordenó que jugaran un par de jugadores. El Patón le dijo que no y nos rajaron”. Y señaló que en Vélez le sugirieron que jueguen determinados jugadores y también tomaron la decisión de irse.