Lunes 13.6.2022
/Última actualización 4:14
Por momentos, hizo todo bien: aguantó la pelota ante la marca de Calderón y Polenta; asistió a sus compañeros en un par de ocasiones para dejarlos en buena posición para definir y llegó al gol en una jugada mucho más difícil que otras que tuvo a su favor, "bancándose" la marca y sacándosela de encima para encarar a Mele y definir con un remate de zurda. Wanchope Abila (8) fue la figura de Colón y del partido. Y si no tuvo un puntaje mayor fue porque, al igual que varios de sus compañeros, malogró situaciones claras.
Burián (5) no tuvo mucho trabajo y le sacó un cabezazo a Portillo que se le metía abajo en el primer tiempo. Meza (5) no sufrió demasiado en el tiempo que estuvo Zenón en la cancha, aunque se complicó un poco luego cuando ingresó Esquivel. Garcés (4) se dejó llevar por el ímpetu, venía enfrentándose con dureza en el mano a mano con Álvez y lo pisó luego de cometer infracción dando lugar a que el VAR sea el responsable de su expulsión. Novillo (5) fue, quizás, el más sólido a la hora de defender (mencionando a los cuatro de atrás) y Delgado (4) no tuvo un buen partido, aportó poco tanto en el aspecto defensivo como en el ofensivo.
En la mitad de la cancha, aparecen dos jugadores que serán muy difíciles de reemplazar. Aliendro (7) jugó un muy buen partido, fue el hombre que empujó al equipo, corrió, metió y también jugó. Lértora (6) no sólo rindió de "5", sino cuando pasó a ser un defensor más cuando se fue Garcés y Falcioni arriesgó poniendo al Pulga. Inclusive, no abandonó esa posición en la defensa cuando entró Acevedo, ya con el partido 2-1.
Los dos que no anduvieron bien en ese sector de la cancha, fueron Bernardi (4), embarullado y sin encontrar ese cambio de ritmo que complique al rival, como venía ocurriendo en casi todos los partidos. Además, errado para el arco pues en el primer tiempo tuvo una chance inmejorable y remató en forma desviada luego de una buena asistencia de Wanchope, en tanto que Teutén (4) tuvo muy escaso aporte y dio la impresión de que le pesó el partido.
Arriba, a lo ya dicho de Wanchope Abila -figura excluyente de Colón y del partido- hay que agregar a Farías (5), que alternó buenas con malas pero que definió en gran forma en la ejecución de un penal que estuvo bastante conversado, ya que el Pulga y Wanchope amagaron con sacarle la pelota, pero el pibe transmitió seguridad, se lo dieron y al final concretó el empate parcial.
De los que entraron, vale rescatar los 45 minutos del Pulga Rodríguez (5), al que todavía se le nota la falta de fútbol y de ritmo de competencia, aunque tiene tanta calidad y es un jugador tan cerebral y peligroso, que le bastaron dos o tres toques diferentes para que de sus pies salgan cosas buenas.
Desde el lugar del entrenador, habrá que decir que lo de Colón fue interesante en cuanto a la propuesta, porque fue de los dos el que más arriesgó y el que realmente se plantó para ser protagonista. Cuando arreciaron las adversidades, Falcioni esta vez no demoró ni dudó: perdiendo el partido y con un jugador menos por la expulsión de Garcés, lo puso al Pulga Rodríguez en el entretiempo. Arriesgó quedando muy abierto, con tres defensores, tres volantes y tres delanteros. Se pudo acomodar y nunca abandonó la postura ofensiva. Por momentos, lo sometió a Unión y lo encerró en su propio terreno y contra su propia área. Y transformó en figura a Mele. Razones tan simples como valederas para explicar que, de los dos, el que estuvo mucho más cerca de la victoria fue Colón. "Sólamente" le faltó lo más trascendente que tiene el fútbol: convertir en el arco de enfrente.
Gran marco
El estadio presentó un marco realmente espectacular de público. Tanto en el sector norte, como en la platea oeste y en la este, la capacidad estuvo totalmente colmada. En la popular sur había un muy buen marco de público, algunos de la platea este se corrieron hacia el sector alto de la tribuna sur y sólo se dejó como "pulmón" el codo sudoeste. El estadio estuvo en un 85 por ciento repleto. El ingreso de la gente a la tribuna norte se hizo de manera fluida y normal, en tanto que se produjeron demoras -como siempre- en la entrada del público a la platea este.
Tanto Augusto Schott como Juan Pablo Álvarez, las dos caras nuevas que tiene el plantel de Falcioni, estuvieron en el banco de relevos. Además, se produjo el retorno al equipo, luego de mucho tiempo de inactividad por lesión, de Sánchez Miño, quien ingresó en el segundo tiempo.