El arquero y Garcés fueron los mejores, el resto no desentonó...
Bajo la lupa: un Chicco que se hizo grande y un equipo que derrochó ganas
El penal que detuvo Nacho Chicco fue clave para que Colón se quede con los tres puntos. Se notó una energía positiva que se transmitió desde adentro hacia afuera.
Bajo la lupa: un Chicco que se hizo grande y un equipo que derrochó ganas
Nadie desentonó, pero hubo algunos que tuvieron una actuación desequilibrante y decisiva en el resultado del partido. Es el caso de Ignacio Chicco (8), que atajó el penal con el partido 2-1 y Colón con 10. Muchas veces se habla de los arqueros “saca puntos”. Y eso fue lo que hizo Chicco cuando se tiró a su derecha y le atajó el remate desde los doce pasos a Janson, en un momento clave del partido.
Otro que volvió a su mejor nivel fue Garcés (7), quien de paso adornó su actuación convirtiendo el gol del empate que, por ese entonces, le ponía total justicia al partido porque Colón no merecía ir perdiendo. Junto con Meza (7) fueron los más destacados de una defensa que respondió. En el caso del lateral por derecha, volvió a mostrar su enorme convicción para pasar al ataque y sorprender en cada subida. Inclusive, decidiendo muy bien en la jugada que entrando solo por derecha resolvió dejarle la pelota servida a Pierotti, mejor posicionado, para que remate al arco y se encuentre con la salvada providencial de Godín, cuando Hoyos estaba totalmente vencido.
Completaron ese trabajo defensivo, Goltz (6), seguro y sin complicarse nunca; y un activo Ojeda (6), que tuvo que lidiar con Janson y con Orellano, que invirtieron posiciones durante el partido. Vélez atacó mucho por su sector y a pesar de que en algunas ocasiones le ganaron las espaldas, generalmente terminó respondiendo muy bien, demostrando que los pocos partidos que lleva, no le pesan.
En el medio, interesante partido de Pierotti (6), decidido a la hora de atacar y generoso en el despliegue. Julián Chicco (6) tuvo, desde lo posicional y como rueda de auxilio de todos, un aceptable partido y Bernardi (6) también hizo un trabajo muy productivo desde lo colectivo, jugando al lado de Chicco y desprendiéndose en las jugadas de ataque para sumarse al bloque ofensivo.
Farías (5) tuvo una labor algo contradictoria. Armó dos o tres jugadas estupendas (una de ellas fue la del tiro libre del Pulga que terminó en el gol de Garcés) pero se equivocó inexplicablemente en algunos pases y reaccionó mal en la jugada que le costó la expulsión. El Pulga Rodríguez (5) no fue tan importante en el juego, pero ejecutó muy bien el tiro libre que no fue retenido por Hoyos y aprovechó Garcés para convertir y luego, cuando se fue expulsado Farías, entregó toda su generosidad para correr rivales, dando una importante mano por el costado izquierdo del mediocampo.
Por último, Wanchope Ábila (7) volvió a mostrar su gran importancia a la hora de convertir. Encaró solo y definió con notable jerarquía, picando la pelota por encima de la cabeza de Hoyos para darle la victoria definitiva a Colón. Pero además, estuvo siempre concentrado y participativo, aguantando sin problemas los 90 minutos.
Cuando Chupete Marini introdujo cambios, lo hizo para darle aire al mediocampo con Alvarez y Sánchez Miño, que entraron por dos jugadores que habían tenido un gran despliegue como el Pulga y Bernardi, en tanto que Gian Nardelli ingresó por Meza, extenuado, para cubrir el sector derecho de una defensa que aguantó muy bien cada ataque de Vélez en la parte final, cuando el partido se inclinó decididamente hacia el arco de Chicco.