Llegó a Santa Fe en el verano de 2019. Se calzó la 10 en la espalda y empezó a escribir su propia historia con Colón. A fuerza de talento y entrega, Luis Miguel Rodríguez llegó al corazón de los hinchas y fue parte del torneo que quedará en la retina de todos y terminó con el subcampeonato de la Copa Sudamericana en Paraguay.
Después vino el bajón. Claro, la final caló hondo en todo el plantel sabalero. Rumores de salida, de traspaso e incluso de un supuesto ofrecimiento en Gimnasia y Esgrima que por aquel entonces era dirigido por Diego Armando Maradona.
Vino la pandemia del coronavirus y la incertidumbre. El fútbol argentino demoró hasta se reacomodó a los protocolos y a los permanentes hisopados. Meses sin jugar pero para el Pulga el tiempo sin actividad parecería haberle caído mejor.
Volvió Eduardo Domínguez a Colón y algunos jugadores tuvieron que empezar de cero, incluso el propio Rodríguez. Siempre con los rumores de alejamiento y las aclaraciones posteriores de “finalizar el contrato hasta junio de 2021”. Arrancó de suplente y se lo notaba molesto pero no importó. Apareció y un abrir y cerrar de ojos se adueñó (de nuevo) del equipo. Goles, asistencias, lujos, golazos. Todo el mundo hablando de él (otra vez).
La mejor versión del “Pulga” se vio en medio de la pandemia. Colón culminó la primera fase de la Copa Diego Maradona en el primer puesto del grupo y con el tucumano como figura estelar. Después el equipo se pinchó y quedó en el camino pero Rodríguez se mantiene como uno de los goleadores del torneo con seis tantos.
Tenés que leerCon un nuevo golazo, el "Pulga" Rodríguez es el goleador de la Copa Diego MaradonaA seis meses del bendito “junio 2021” cuando se termina el actual vínculo con Colón, el delantero mostró ante Cipolletti que además de talento tiene carisma. Terminó el partido, el equipo avanzó de fase en la Copa Argentina y él aceptó el convite de un grupo de colaboradores del equipo rionegrino. “Pulga una foto”. Las cámaras de la TV lo captaron todo.
Sólo él sabrá dónde continuará su carrera. Suena en todos lados, Estudiantes, su añorada vuelta a tierras tucumanas y otros clubes. Lo cierto es que Rodríguez recobró el aura con la que corrió todo el 2019 y se erige como ídolo del fútbol: todos quieren una foto con él.
Pulga jugó 50 partidos con la camiseta de Colón entre partidos por el fútbol local (Superliga, Liga Profesional y Copa Argentina) e internacional (Copa Sudamericana). Desde su arribo convirtió 18 goles con la sangre y luto.