Dos etapas, 99 partidos, dos marcas imbatibles, dos llaves continentales, cinco competencias distintas, el golpe en el Morumbí...la ESTRELLA tan buscada, soñada, esperada. A los 42 años, Eduardo Rodrigo Domínguez es más "Barba" que nunca en Colón. Tanto como el otro "Barba", al que siempre le pedimos ayuda cuando algo parece imposible. Justo él, que hizo posible lo inalcanzable en más de un siglo para el Mundo Colón.
Con ese metro ochenta y cinco, además de "casi el mismo peso" que cuando jugaba ("en la pandemia, bajé algunos kilos"), el destino le prepara una linda gambeta: este domingo cumplirá 100 partidos como entrenador profesional del Club Atlético Colón y casualmente lo hará contra el club que lo hizo debutar como jugador de fútbol profesional, Vélez Sarsfield. Con los cortos, Parque Patricios fue "todo": cuatro etapas en Huracán. Con la camisa y el saco, Colón es más que "todo": su lugar en el mundo como DT. Acá tocó el cielo con las manos: llevó al club a su esperada estrella en 116 años.
Obsesivo con aprender a la perfección el francés ("viene una profe a casa a enseñarme") y convencido que leer un libro es tan importante como estudiar al próximo rival de Colón, disfruta su vida en Santa Fe: en esta segunda etapa, se fue a vivir casi al lado del predio deportivo de la Autopista. Entonces, no sorprende que haga ida y vuelta varias veces. O, como casi siempre ocurre, arranca a la mañana con los profesionales, almuerza en el predio y sigue a la tarde con la reserva (AFA), espiando juveniles para ver "qué hay abajo" o afectando contra-turno a los jugadores que elige para hacer algo especial (Ejemplo: Formica, Farías).
Tenés que leerMorelo descartado para el domingo y a renovar carnetSu estilo, en el trato del día a día, es casi de jugador a jugador, como si no fuera DT. No sólo con su amigo Paolo Goltz, sino con todos. Sin ir más lejos, camino al campeonato, le hizo una apuesta a Federico Lértora: "Cada vez que usted se tire al piso, acorde al resultado de quite de balón y/o infracción, apostamos una buena botella de vino tinto".
En la previa del primer mata-mata, camino al título y de cara a Talleres de Córdoba, sorprendió a todos: nunca practicó ni habló de penales. ¡Y pensar que el partido con los cordobeses se definió por penales!. Después, cuando lo pude entrevistar, me dijo: "¡No saben lo feo que es patear penales en una serie, a nadie le gusta. Y eso que a mí me iba bien pateando penales!". Ni siquiera armó listado: "Me acuerdo que el Pulga me pidió el quinto, patear último y le dije que sí. Me daba lo mismo".
En el mismo terreno donde otros volarían histéricos de los nervios como entrenador, Eduardo Domínguez es la contracara. Como la tarde previa a la final, a la hora de la merienda, cuando en el lobby del hotel en San Juan le dijo a Vignatti: "Cambie esa cara presidente, en un par de horas será campeón del fútbol argentino". No se inmutó nunca, salvo cuando se rompió con esas lágrimas que mostró la transmisión oficial de la tele con el 3-0.
De su primer ciclo en la temporada 2016/2017 a este segundo 2020/2021 cambió casi todo en su grupo de trabajo, menos al PF. De ese Iván Moreno que experimentaba representar jugadores y DT a este Juan Luis Berros, el mismo agente de Gallardo. Del "Turco" Gustavo Mamed a estos dos colaboradores (Díaz y Verna). Así con todo y con todos, incluso valorizando a niveles de importancia suprema la figura de una nutricionista, algo que nivela en su grupo de trabajo al mismo escalón de quien entrena los arqueros o al que edita los videos.
Tenés que leer¡Arrancó el armado "Colón 2022"!: Vignatti va por la firma de AliendroEse Domínguez, que presentó credenciales en ese lejano 2017 ganando un clásico de visitante y abrió dos ventanas de Copas, llegó en la pre-pandemia para salvarlo del descenso y lo sacó campeón. Esa noche de retorno triunfal, frente a Central en Arroyito, fue toda una señal: volvió, ganó, lo sacó de Terapia Intensiva con el tema promedio y luego se paró el mundo por el Covid.
Antes, fue el DT que coleccionó la mayor cantidad de partidos ganados de manera consecutiva en la historia de Colón. Ahora, fue el que se mantuvo la mayor cantidad de juegos sin conocer la derrota en el banco sabalero. En ese mismo banco se dio un gustazo: disfrutar el primer triunfo de un equipo argentino en el mítico Morumbí y contra el San Pablo.
Los fríos números marcan que en la temporada 2016/2017 dirigió 16 partidos, con ocho victorias, cinco empates y tres derrotas: 19 goles a favor, 12 en contra y una efectividad del 60.42%. En la Copa Argentina 2016/2017, con Domínguez como DT, Colón jugó dos partidos, donde ganó uno y perdió el otro, con un gol a favor y un gol en contra (50% de efectividad).
En la Copa Sudamericana 2018, en tanto, dirigió Eduardo Domínguez seis partidos a Colón, con tres triunfos, un empate y dos derrotas (cinco goles a favor y tres en contra, con una efectividad del 55.56%). En la temporada 2017/2018, de los 27 partidos, Colón ganó 11, empató ocho y perdió ocho, con 32 goles a favor y 22 en contra (+10), con una efectividad del 50.62%.
En la primera parte de la temporada 2018/2019, estuvo al frente del Sabalero en 12 cotejos, donde logró tres victorias, cinco empates y sufrió cuatro derrotas, con 13 goles a favor y 16 en contra (38.89%). En su segunda etapa como DT de Colón, el "Barba" dirigió un solo partido en Copa de la Superliga 2020, con un triunfo, con tres goles a favor y uno en contra (100%). Luego, dirigió los 11 partidos de la Copa Diego Maradona 2020, con cinco victorias, dos empates y cuatro derrotas, con 17 goles a favor y 11 en contra (51.52% de efectividad.
En la Copa Argentina 2019/2020 dirigió Domínguez a Colón en dos partidos, con una victoria y una derrota, con un gol a favor y uno en contra (50% de efectivad). Y en la gloriosa Copa de la Liga Profesional, donde dirigió a Colón en 16 cotejos de los cuales ganó nueve, empató cinco y perdió dos (29 goles a favor y 11 en contra, con una efectividad del 66.67%). Ahora, en el actual Torneo de Primera, acumula cuatro partidos: ganó dos, empató uno y perdió el otro, con cinco goles a favor y seis en contra (efectividad del 58.33%).
Los partidos jugados, ganados, empatados, perdidos...todo podrá cambiar. Los porcentajes de efectividad/rendimiento también podrán modificarse. Para arriba o para abajo. Lo que no podrá cambiar es lo que este tipo cambió: el curso de la historia del fútbol de Colón. Ese título, esa Copa, esa estrella dorada...Acá, una parte muy importante de Santa Fe cree que a este "Barba" lo mandó el otro "Barba". Y que de una vez por todas los rezos fueron escuchados en esta religión llamada Colón.