Lunes 8.11.2021
/Última actualización 18:49
Reapareció el Colón Campeón en todo su esplendor. Le ganó 3 a 0 al Platense de Spontón (que venía en alza) mostrando muchas de las cosas que lo llevaron a obtener su primera estrella. Vaya casualidad, en aquella final en San Juan se consagró campeón goleando a Racing por el mismo resultado.
En un partido en el que pasó de todo (goles, expulsiones, lesiones, nervios y tumultos entre jugadores), Colón resolvió en el marcador lo que no parecía que sucedía en el campo de juego. De todas maneras, el 3-0 no hace más que reflejar la superioridad de un equipo sobre el otro, quizás facilitada por la expulsión de Iribarren cuando ya había terminado el primer tiempo y ambos elencos se dirigían a los vestuarios.
Igualmente para Domínguez no fue tan fácil, sobre todo porque a los 13 minutos del complemento debió cambiar casi toda la defensa, sacando primero a Garcés para "cuidarlo" porque Pitana lo amonestó (llegó a la cuarta amarilla); y luego porque Delgado se lesionó y Meza no se sentía bien. Así de la línea de 3/5 pasó a una defensa tradicional de cuatro defensores (Mura-Bianchi-Piovi-Gallardo).
Pero la diferencia la hizo unos metros más adelante, con Rodrigo Aliendro como estandarte del equipo, siendo el eje de cada ataque y a veces hasta llegando a salvar alguna contra. Finalmente tuvo su premio, convirtiendo al tercer gol de la goleada.
El "Potro" Rodrigo definió con un suave toque al caño derecho de Ojeda una buena jugada que nació en un quite de Castro y una excelente habilitación de Ferreira; pero también definió un emocionante partido al que no le faltó nada.
Terminó siendo una fiesta en el hasta ahora inexpugnable Centenario. La gente festejó con Meza dulce, gracias al golazo del artillero colonista, Eric Meza, en la última jugada del primer tiempo, con una exquisita definición de derecha tras la asistencia de Beltrán.
Con cuarteto mediante el cordobés Christian Bernardi, que a los 18 minutos del complemento batió a Ojeda luego de una hermosa jugada que empezó con Ferreira, siguió con Aliendro, quien se la cedió a Beltrán y el juvenil que llegó de River asistió a Bernardi definiendo de derecha al segundo palo de Ojeda.
Y por último, a la fiesta se presentó el "Potro" Rodrigo Aliendro, para hacer "autojusticia" y marcar el gol que merecía.
En el medio de todo, como en casi todas las fiestas, un incidente que tuvo como protagonista al "patovica" Pitana, A los 21 minutos del segundo tiempo, luego de un lujo positivo de Farías a Iribarren (bicicleta y sombrero), el defensor y Ojeda increparon a la "Joya". Se armó un tumulto generalizado y Pitana resolvió todo amonestando a Bogado (que nada tenía que ver) y a Farías, que lo único que hizo fue "jugar" al fútbol. Para colmo, Domínguez, con total razón, con una patada a una botella protestó la amarilla (la quinta para el delantero que no podrá jugar contra Racing la próxima fecha) y por eso vio la roja por parte del árbitro.