El delantero, en conflicto con Boca, viene a Santa Fe
La novela Colón-Boca-Wanchope-Farías: ¿cómo termina?
Las negociaciones fueron por separado, pero algo queda bien claro: Colón quiere que Farías se quede para la Libertadores. Y Farías, también se quiere quedar.
La novela Colón-Boca-Wanchope-Farías: ¿cómo termina?
Lunes a la noche. Los medios capitalinos repiqueteaban con una información. Principio de acuerdo: 2,5 millones de dólares y el pase de Wanchope Abila por el 50 por ciento de Facundo Farías. Una sola traba: definir si Farías se quedaba a jugar la Copa Libertadores en Colón (la fase inicial termina el 25 de mayo) o se iba ya mismo a Boca. La realidad fue esa: todos se fueron a dormir esperando que al día siguiente llegue la respuesta de Colón.
Martes a la mañana, predio de Colón. Habla Falcioni: "Sé que estuvieron reunidos y que están cerca de negociar, pero no más que eso. Creo que no tiene nada que ver lo de Wanchope con Farías. Hasta anoche no se había cerrado nada, sí sé que son negociaciones aparte. Muchos las quieren unir pero no tiene nada que ver una con otra. Lo único que puedo decir es que Facundo Farías quiere jugar la Libertadores en Colón". Y agregó: "Facu se quiere quedar y la idea de todos es que se quede, lo necesitamos y tenemos un plantel con muchos deseos de competir en la Copa Libertadores. Esperemos poder contar con él. Va a ser un hombre importante y va a tomar una dimensión jugando en una competencia internacional".
Martes a la mañana, predio de Colón. Habla Farías: "Mi deseo es jugar la Libertadores en Colón. Mi representante me llamó y me dijo que acordó con Vignatti la extensión de mi contrato por tres años más". Un contrato, dicho sea de paso, que había motivado duras declaraciones de Martín Sendoa en varias ocasiones, echando en cara los "94.000 pesos de bolsillo que cobra Facundo". Incluso, otro dato más: el aumento de la cláusula de rescisión, que de acuerdo a lo que pudo averiguar El Litoral, de manera extraoficial, se llevó de 10 millones a 12 millones de dólares.
A todo esto: ¿qué pasaba con Wanchope a 500 kilómetros?. El delantero llegaba al entrenamiento de Boca y luego se iba sin hacer declaraciones, pero con la sensación de que era la última vez que tomaba contacto con sus ex compañeros. En Colón nadie confirmaba nada, pero se aseguraba que el jugador partía de inmediato con destino a Santa Fe para sumarse a Colón. ¿A cambio de qué?, de una cifra que, extraoficialmente, rondaba los 1,5 millones de dólares y un contrato por tres años. Y hasta se llegó a decir que en esa salida del futbolista, en conflicto con Boca, habían participado su representante, Adrián Ruocco y Carlos Tevez, aportando dinero. ¿Verdad o mentira?, quién sabe. Pero la versión se instaló.
Entre la noche del lunes y la mañana del martes, el que puso un poco de claridad fue el propio Julio César Falcioni. ¿Por qué?, porque dijo que las negociaciones no iban juntas sino por separado. Y claramente es así. A medida que transcurrieron las horas, se supo que lo de Wanchope Abila a Colón se hacía y que lo de Farías a Boca perdía fuerza. En todo caso, comparado con lo que ocurría horas antes, luego de la reunión que se llevó a cabo el lunes a la tardecita y de la que sólo se sacó en limpio que Wanchope Abila se alejaba de la institución.
Mientras tanto, desde la Afa surgía una información que estiraba los plazos: el libro de pases no cerrará este miércoles como se había señalado en un primer momento (el torneo arranca el jueves), sino que será el jueves a las 20. Son 24 horas más que, de acuerdo a cómo se vayan desarrollando los acontecimientos, sirven para tener un poco más de aire en la negociación.
Otro tema: Colón busca arquero. El dato que se tenía, es que se trataba de un arquero de más de 34 años que militaba en un club de la Argentina. El nombre que surgió es el de Matías Ibañez, ex Olimpo, San Lorenzo, Racing y Patronato, entre otros. Estas horas pueden ser decisivas, porque la idea de Falcioni era la de sumar un arquero, más allá de que además de Burián, en el plantel tienen a Chicco, Massuero y Haas.