¡La primera dama de Colón gritó campeón a los 103 años!

Con dos hijas, Valle y María Cristina, siete (7) nietos y varios bisnietos, a la querida Adelina Luciani (todos la conocen y llaman simplemente "Adela" en la Residencia de Juanita) sólo le falta algo a los 103 años: ver campeón a su querido Colón de Santa Fe. Y lo pudo ver, lo que motivó el relato de quienes la cuidan hoy con tanto amor: "Era la hora de la cena, demorada por el horario del partido; empezó a pegar en la mesa de alegría cuando terminó el partido en San Juan. Estaba muy emocionada".

Sus recuerdos de esos tiempos son, con sus 103 años, fabulosos. "Las calles eran Moreno, Bv. Zavalla, San Juan...nosotros vivíamos enfrente. ¿Qué había en esa zona?. Lo único que había era la cancha de Colón y nada más...Nos cruzábamos todos los días con mi hermana a jugar", dice Adela.

Esa Adelina es la actual "Adela" (así le dicen) de estos días, que con 103 años (cuando nació, Colón de Santa Fe tenía 13 añitos de vida) reconstruye de manera virtual ese tiempo hermoso a pedido de El Litoral.

"Con mi hermana, Angelita, formamos la primera comisión de damas del Club Atlético Colón. Recuerdo que éramos cinco mujeres y bordamos la primera bandera del club. La presidenta era una mujer de apellido Gatti y su hermano jugaba en el equipo de fútbol de Colón de esos años", comenta.

"El día que vino Brasil (así hace referencia a la llegada del Santos de Pelé, el 10 de mayo de 1964) no pude ir a la cancha porque estaba enferma, pero cuando vino River Plate por primera vez (1966, gol de Orlando Medina a Amadeo Carrizo con pelota embarrada) no me lo perdí. Es que después de Colón, que es mi primer amor, me gustaba River", cuenta Adela que con 103 años reparte energía en "La Residencia de Juanita", donde charla de manera virtual con El Litoral gracias a las cuidadoras.

"Desde que nací, soy colonista. Si el partido era de tarde, nuestros padres nos daban el permiso para poder ir a la cancha a ver a Colón. ¿Qué me acuerdo?: la cancha vieja, la otra sede y la casilla de madera. ¿Saben que antes había una casilla?: bueno, ahí jugábamos todas las tardes", recuerda Adela con una frescura impropia de sus 103 años.

"Vendíamos rifas en la cancha"

-¿Qué hacían las damas los días de partido cuando jugaba Colón?

-Nos poníamos en la entrada de la cancha a vender rifas para juntar dinero. Así era Colón en esos años.

-¿Qué recuerda de la sede anterior, de la cancha vieja?

-Había un canchero o cuidador que le decíamos "Valengo", porque se llamaba Valentín. Un día lo retaron porque, de tanto cansancio, se quedó dormido (se ríe...).