Nicolás Blandi tenía previsto viajar este martes con destino a la Argentina, pero el vuelo privado finalmente no despegará desde Santiago de Chile por un tema de cupos sanitarios y ahora están tratando de buscar alternativas para que lo más pronto posible esté en nuestro país.
Desde ya que, una vez arribado a Buenos Aires o a Santa Fe, deberá hacer cuarentena y recién allí estará a las órdenes de Juan Manuel Azconzábal.
El libro de pases cierra el próximo jueves. Ese no sería inconveniente si es que el viaje de Blandi se demora más de lo previsto. La cuestión es que arribe cuánto antes para que pueda ponerse lo más rápido posible en condiciones de jugar.
El asunto delanteros se convirtió en un verdadero problema para Unión en este mercado de pases, ya que se apuntó a varios jugadores que eligieron jugar en otra institución o que prefirieron quedarse en sus respectivos clubes, como por ejemplo pasó con Leandro Díaz, el delantero de Estudiantes de La Plata. Sólo llegó Nicolás Cordero, un jugador de 22 años que Huracán permitió que se fuera aún a pesar de que había sido titular en los últimos partidos del torneo pasado.
¿Es lo que el equipo necesita?, sin dudas que sí, porque el aspecto ofensivo fue deficitario en la Copa de la Liga Profesional y la ausencia de gol de parte de los delanteros se hizo notoria, al punto tal que entre el gol de García ante Patronato en la cuarta fecha y el del mismo García, de penal, en el clásico, pasaron ocho encuentros sin goles de los delanteros.
Con Blandi, Azconzábal tendrá cuatro opciones parecidas: el citado Blandi, Cordero, García y Márquez. A ellos hay que sumarle el “Pajarito” Daniel Juárez, Luna Diale (lesionado) y Machuca, que van por afuera, ya que Andereggen está con el plantel de reserva.
El hecho de que Portillo haya sido el “5” de los dos partidos y la falta de contención que hubo en el mediocampo, más la salida del plantel de Acevedo y Nery Leyes, más allá de que este último tuvo un paso frustrante por la institución, lleva a pensar que es necesaria la búsqueda de un volante central.
Quizás Unión haya perdido tiempo con la espera por la decisión de Acevedo. Hoy, a la luz de lo visto en estos dos partidos, salvo que el técnico pruebe con algún esquema o que ponga a Nardoni en el puesto en el que mejor rinde (precisamente, el de volante central), la realidad es que al equipo le está faltando más combatividad en ese sector central de la cancha, aspecto que fue claramente visible en el encuentro ante River.