El día del partido con River, Ramón Zanabria entraba al estadio con la camiseta puesta, como si fuese un hincha más, común y corriente, a ocupar su lugar en la platea. Pensaba en su historia y en las veces que se habrá puesto la camiseta para salir a la cancha a defender esos colores por los que hoy sigue gritando y emocionándose. Ramón Zanabria era un volante pensante, claro y fundamental en el logro del ascenso del '74, el día del "Campanazo" con el gol de Bravi.
El Patón Rossi era el capitán de Unión en esos tiempos, entrenaba por la tarde y a la mañana trabajaba en el Banco. Venía de "sufrir las mil y una" en ese durísimo camino del torneo Regional. "Con Ramón yo estaba siempre muy seguro, cuando recuperaba la pelota se la daba a él. Y además, sabía que él bajaba y marcaba. Jugaba de 10, pero tenía un gran despliegue y nos ayudaba mucho", cuenta siempre el Patón.
César Toyé había asomado a fines de los '60, cuando era "el pibe Toyé". Muchos le auguraban un enorme futuro por entonces. En el '73, cuando el club se reafilió y volvió a militar en el torneo de la B, formó un mediocampo muy bueno con Fredes por derecha y con Ramón Zanabria por izquierda. Muchas veces, Leopoldo Luque se quedaba afuera del equipo en aquéllos años ('73 y '74), porque el "9" era el mendocino Benito Emilio Valencia, eje de un trío ofensivo que completaban el "Rana" Juárez y el "Huevo" Garello.
El tiempo no les hizo borrar el sentimiento de amistad y todo lo que vivieron juntos adentro de la cancha. Fue un placer encontrar a estos tres muchachos que honraron la camiseta de Unión, que siguen vibrando en cada partido por el club de sus amores y que de vez en cuándo se encuentran a recordar aquéllos momentos inolvidables.