En el horno porteño, Unión calienta sueños de clásico
Central en la previa del choque con Colón... Heinze se quejó de la alta temperatura y Unión jugará a la misma hora que lo hizo su Newell's. El Tate, con cuatro cambios, visita el "Chiqui" Tapia tratando de traerse un buen resultado para llegar mejor al clásico del domingo.
En el horno porteño, Unión calienta sueños de clásico
"Los dos equipos corrieron mucho. Es peligroso tanto calor, para la salud y el espectáculo. Una vez más, el negocio le gana a este deporte y la pelota se tiene que mover. Hasta que no pase algo, esto no va a terminar". La frase pertenece a Gabriel Heinze, el entrenador de Newell's. Fueron vertidas luego de la derrota de su equipo por la mínima diferencia ante Defensa y Justicia en Florencio Varela. El partido arrancó a las 17, con una temperatura cercana a los 40 grados en Buenos Aires, aún en ese sector del conurbano en el que hay más amplitud, menos edificios y el aire corre un poquito más.
Ese horario en el que jugó Newell's, es el que afronta Unión para el partido ante Barracas Central. En este caso con más razón, teniendo en cuenta que en la cancha de Barracas no hay iluminación artificial y debe jugar, inexorablemente, con luz natural.
Para un equipo con dinámica e intensidad como el de Unión, el horario complica. Y también se diría lo mismo si se tratara de un equipo con jugadores "pesados", sin el rigor físico de la mayoría de los futbolistas de Munúa, que le imprimió, desde su llegada, ese ritmo de vértigo y explosión a Unión.
El Tate juega ante el equipo de Chiqui Tapia, que llega fortalecido por la victoria ante Sarmiento de Junín como visitante, pero que perdió el invicto que traía en condición de local desde el momento en el que arrancó a jugar en el estadio que lleva, precisamente, el nombre del mandamás de Afa.
Santiago Mele; Federico Vera, Franco Calderón, Oscar Piris y Claudio Corvalán; Imanol Machuca, Yeison Gordillo, Lucas Aued y Kevin Zenón; Mauro Luna Diale y Thiago Vecino, serán los once jugadores que dispone Munúa para este partido, que es el previo al gran clásico santafesino que se jugará el domingo que viene a las 17 (justamente) en el 15 de Abril.
En principio, la disposición táctica sería un 4-4-1-1 para defender y un 4-2-3-1 para atacar, con Vecino como eje del ataque, Luna Diale arrancando suelto y tratando de ganar las espaldas de los volantes rivales y Machuca-Zenón siendo los encargados de abrir la cancha por afuera, un aspecto que el técnico rojiblanco no quiere desperdiciar más allá del cambio de esquema y la vuelta a algo más tradicional, abandonando el 4-3-3 con el que jugó los dos primeros partidos (el empate ante Banfield y la derrota frente a Instituto).
Un buen resultado en el barrio de Barracas (donde Unión no juega desde 1946) le permitirá llegar agrandado a un clásico al que el rival (Colón) lo vé con muchas complicaciones, urgencias y dificultades. Son partidos distintos, partidos "aparte" como muchas veces se ha dicho y sobran ejemplos, pero si Unión llega a sacar un resultado positivo en el "Chiqui Tapia", tendrá un plus a favor.
"No pensamos en el clásico, sino en Barracas. Hace mucho que no se nos da la victoria de visitante. Al principio del año pasado tuvimos una buena racha, pero después no se nos dio. Queremos esforzarnos para seguir trabajando por el camino que queremos todos. Tenemos que sentirnos cómodos con la pelota, estar más tranquilos y no pensar en lo que podrán hacer los otros, sino en lo que hagamos nosotros, confiados como grupo. Tenemos material para dar muchísimo más de lo que podemos dar". Mauro Luna Diale - Jugador de Unión.